2020 fue un año para el olvido en Clínica Meds. La pandemia los obligó a cerrar 5 centros médicos de forma temporal y uno permanente. Hubo que suspender a parte del personal, y recortar rentas en hasta 30% durante varios meses, y los socios hicieron un aporte de capital de unos $18.400 millones, para permitir la continuidad operacional. Hoy el panorama es distinto. Están con cifras mejores a las de 2019, y la estrategia para 2022 se centra en potenciar lo que ya está en marcha.

“Este año Meds ya tenido niveles de actividad que los comparo con 2019, porque el 2020 es otra actividad. Hemos crecido en la actividad ambulatoria sobre el 20% y sobre el 60% en la actividad quirúrgica a septiembre en igual periodo. Este año fuimos bien audaces y trabajamos en varios proyectos como la ampliación del centro Meds de Antofagasta. Hemos hecho un nivel de inversión muy potente en imagenología”, dijo a Pulso la gerente general de Meds, Priscilla Molina.

Y agregó que “estamos ampliando los pabellones en Meds La Dehesa para cumplir con las expectativas de los pacientes. Las tomas de muestra las tuvimos que ampliar. Hubo que ampliar las áreas de kinesiología. Más que crecer en otros centros hemos potenciado los que están. Hoy Meds tiene 30 especialidades médicas. Se han incorporado nuevos médicos y nos quedamos chicos. Estamos haciendo un nuevo piso de Meds especialidades, donde está la clínica de La Dehesa un piso completo para especialidades no traumatológicas. La demanda de los pacientes nos obligó a hacer esa inversión. Se han invertido cerca de $4.000 millones en estas ampliaciones. Para 2022 esperamos seguir potenciando los actuales centros”.

El monto que pretenden invertir en 2022 es similar al de este año. No descartan abrir un nuevo centro en el futuro, pero aclaran que aún están en etapa de definición. Uno de los factores que observan de cerca es la incertidumbre política y económica que hay en el país.

“Por supuesto que no podemos estar exentos que estamos en un periodo de incertidumbre. Obviamente que esto nos hace estar mucho más alerta de cuáles van a ser las fases de nuestra inversión. Este crecimiento de nuevos centros es parte de nuestro ADN. El punto es que tenemos que ver en qué momento lo hacemos. Habrá que ir viendo cómo se dan las cosas. Está la incertidumbre política, pero a nivel prestador está todo el tema de las aseguradoras, qué va a pasar con las Isapres. Pensamos que los prestadores privados tienen que seguir vigente, porque lo que pasó con la pandemia se demostró que los públicos con los privados resolvemos los problemas de los pacientes”, indicó Molina.

El 31 de marzo de 2020 y tras la llegada del coronavirus a Chile, clínica Meds debió adoptar medidas para palear los efectos. Recién en agosto comenzó la reapertura de centros médicos y en septiembre ya estaban todos -menos el de Fleming- operativos. Además, en diciembre del año pasado las rentas volvieron a la normalidad. Las pérdidas fueron de $4.500 millones.

“La pandemia golpeó a la clínica como golpeó a muchas otras clínicas también. Tuvimos que cerrar 5 centros médicos de forma temporal y uno de forma definitiva. Nos quedamos con los que tenían mayor oferta de servicio, y obviamente la clínica de La Dehesa abierta porque atendimos pacientes Covid. Te imaginarás lo que es tener centros cerrados, personal suspendido. Se rebajaron las rentas, tuvimos que hacer una economía de guerra, y los inversionistas hicieron un aporte de capital. Nos pusimos las pilas rápidamente con el Meds online. Hasta el día de hoy hacemos más de 1.200 consultas de telemedicina... Fue duro, pero también se convirtió en una oportunidad para acelerar procesos internos de prestar nuevos servicios”, señaló la ejecutiva.

Los dueños de clínica Meds, que son en más de un 60% doctores y un 35% del family office del empresario Felipe Ibáñez, realizaron un aporte de capital que les permitió seguir operando en medio de la pandemia.

“Hicieron un aumento de capital que permitió inyectar recursos y seguir con la continuidad operacional. Todo en esa época subió. Había que seguir pagándole al personal de salud, y había que usar elementos de protección personal. Nos dio la tranquilidad para poder reactivarnos rápidamente. Piensa que Fonasa se demora en pagar, pero los flujos se demoraban en llegar. Nos permitió trabajar de manera más tranquila”, dijo Molina.

Este 2021 la clínica ha retomado la actividad previa a la pandemia. Las ventas a septiembre han aumentado un 25,5% con respecto al mismo periodo de 2019.

“Este es un año donde a Meds le ha ido muy bien. Ha sabido mantener su posicionamiento como líder en medicina deportiva, pero también ha sido capaz de no perdiendo nuestro modelo de atención donde el paciente resuelven todo en un mismo acto y se va con su diagnóstico ok, se han incorporando otras especialidades adoptando el modelo Meds. Seguimos siendo líderes en lo que hacemos y la actividad se ha visto en aumento, porque tenemos una buena calidad de servicio. Hoy tenemos muy buenos números y diría que vamos a cerrar un muy buen año”, señaló la gerente.

Por último, dentro de los planes de desarrollo de la clínica durante este año, está la creación del comité de pacientes que tendrá su primera sesión a mediados de este mes.

“Sentimos que nos faltaba algo. Empezamos a recabar experiencia internacional al respecto y nos dimos cuenta que nos faltaba un paso, que era sentar en la mesa a nuestros pacientes e invitarlos a co-crear con nosotros nuevos servicios. Distintos formatos para ser atendido. Uno va evolucionando como clínica. La idea es formar un comité, formar parte de una mesa permanente de trabajo. Creo que es un paso cualitativo, radical, importante”, dijo.

Asimismo, indicó que “esto surgió como en 2018. Hace tiempo ya. Desde ahí nos empieza a dar vuelta, pero vienen muchas cosas en el camino. Este 2021 nos sentimos preparados para hacer esta mesa de trabajo. Ya tenemos el comité conformado, postularon pacientes que les interesó esto. Esperamos tener nuestra primera sesión por la quincena de noviembre”.

La clínica fue fundada en 1992 con un enfoque hacia el área de la salud deportiva. Tiene ocho centros a lo largo de Chile y una clínica en La Dehesa. Se estima que atienden a cerca de 200 mil personas al año, alcanzando una facturación de alrededor de US$ 60 millones anuales.