Histórico: gasto fiscal realizado sube un récord de 27% en el primer semestre y subsidios representan casi la mitad
Programas como el IFE, los bonos y otras transferencias para hacer frente a la crisis sanitaria impulsaron con fuerza el gasto público. Por el lado de los ingresos, hubo mayor recaudación por IVA (gracias al alza del consumo), impuesto a la renta y también por el aumento del aporte de la minería privada, que incrementó en más de dos veces lo entregado el año pasado, gracias al mayor precio del cobre.
Las medidas fiscales de apoyo para familias y empresas durante la pandemia hicieron que el gasto público anotara en el primer semestre el salto más importante de su historia.
De acuerdo al informe de Ejecución Presupuestaria del primer semestre, informado este viernes por la Dirección de Presupuestos (Dipres), el gasto del gobierno central acumulado alcanzó a $31.312.905 millones, lo que equivale al 13,3% del PIB estimado para el año. Este monto es un incremento real (descontada inflación) de 26,9% en relación al mismo período de 2020, el mayor salto del que hay registro comparable.
Dentro del Gobierno Central Presupuestario, el gasto en transacciones que afectan el patrimonio neto (gasto corriente) creció 29,1% anual acumulado a junio. Esto estuvo influido, principalmente, por el aumento del ítem de Subsidios y Donaciones, el que representó el 48% de todo el gasto público en el período, con $15.018.634 millones, lo que corresponde a un alza de 65% y teniendo una incidencia de 89% en la variación anual.
Este aumento de subsidios y donaciones está explicado por el programa Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y demás ayudas gubernamentales para hacer frente a la pandemia, y que dejan al país entre las naciones que más esfuerzo fiscal ha realizado. Otros programas que tuvieron incidencia en el dato, de acuerdo a Dipres, fueron los mayores beneficios otorgados por el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENCE) asociados al Subsidio al Empleo, así como un mayor gasto en el IPS como efecto de la denominada ley corta de pensiones y el aumento de cobertura del Aporte Previsional Solidario (APS).
“Cabe destacar también el mayor gasto en el Tesoro Público por los beneficios contemplados en la Ley Nº 21.323, que concede el Bono Clase Media y a Transportistas, en la Ley Nº 21.339 que concede Bono de Cargo Fiscal Afiliados a AFP, todas medidas de fuerte impacto en la Red de Protección Social. Por su parte, la alta incidencia del Ministerio de Salud se explica por las transferencias de los Servicios de Salud a los establecimientos de Salud Primaria para el proceso de vacunación y por el per cápita”, puntualizaron desde la institución.
El Ministro de Hacienda, Rodrigo Cerda, destacó el resultado de la ejecución fiscal y las ayudas en pandemia. “Este crecimiento de gasto es muy superior a todos los crecimientos de gasto en los años anteriores. Esto lo explica, por un lado, la red de protección social que al incrementarse mucho más masivamente durante esta primera parte del año está mostrando niveles considerables de gasto. Pero en los meses venideros vamos a ver números superiores porque vamos a ver con más fuerza el efecto del IFE Universal”, sentenció.
Sobre la inversión, el gasto de capital presupuestario anotó un salto de 10,5% en los primeros seis meses del año, compuesto por un crecimiento real de 9,3% de las transferencias de capital y de 11,6% en las iniciativas de Inversión, en el mismo periodo.
Ante esto, Cerda puntualizó que “estamos observando el efecto de la inversión pública, porque también se está ejecutando y esa ejecución también lleva a este crecimiento del gasto del presupuesto, y la razón es que este año la inversión pública es muy superior a la que teníamos en años anteriores. En general, el estado ejecuta US$8.000 millones en inversión pública, pero este año estamos ejecutando cerca de US$12.000 millones”.
Con esto, el gasto ejecutado ya alcanza el 60% de la Ley de Presupuestos aprobada, el mayor porcentaje al menos desde el año 2000. Sin embargo, como se agregaron más gastos luego de publicada la ley, debido a los programas de ayuda ante la pandemia, el estimado para el año en su conjunto subió hasta cerca $71.951.215 millones (cerca de US$97 mil millones), de acuerdo al Informe de Finanzas Públicas del segundo trimestre. Así, lo que se ha ejecutado hasta ahora corresponde al 43,5% de ese monto.
Sobre la inversión, el gasto de capital presupuestario anotó un salto de 10,5% en los primeros seis meses del año, compuesto por un crecimiento real de 9,3% de las transferencias de capital y de 11,6% en las iniciativas de Inversión, en el mismo periodo.
Con esto, el gasto ejecutado ya alcanza el 60% de la Ley de Presupuestos aprobada, el mayor porcentaje al menos desde el año 2000. Sin embargo, como se agregaron más gastos luego de publicada la ley, debido a los programas de ayuda ante la pandemia, el estimado para el año en su conjunto subió hasta cerca $71.951.215 millones (cerca de US$97 mil millones), de acuerdo al Informe de Finanzas Públicas del segundo trimestre. Así, lo que se ha ejecutado hasta ahora corresponde al 43,5% de ese monto.
Ingresos
Por su parte, los ingresos fiscales llegaron a junio a $25.610.798 millones, equivalentes a 10,9% del PIB y un incremento de 30,6% respecto a enero-junio de 2020. Desde Dipres informaron que el resultado se explica principalmente por los Ingresos Tributarios Netos (ITN), que registraron un crecimiento acumulado a junio de 32,5% a/a, de los cuales, la mayor parte corresponde a ingresos de Resto de contribuyentes, que crecieron 26,9% a/a en el mismo periodo.
Este aumento obedeció, en gran parte, a la mayor recaudación acumulada a junio por concepto de IVA (38,5%) -influenciado por las mayores compras realizadas por los chilenos en el semestre-, y un alza en la recaudación por Impuesto a la Renta (48,4%).
“El alza en la recaudación por IVA obedeció puntualmente a una mayor recaudación del IVA Declarado (21,2% real anual), debido al mayor dinamismo del consumo privado sostenido, en parte, por los programas de ayuda fiscal emanados de la Red de Protección Social implementada producto de la Pandemia provocada por el COVID-19, junto con la mayor liquidez producto de los retiros de fondos previsionales y, en menor medida, al reintegro del IVA postergado durante el año pasado, a través de las medidas tributarias extraordinarias para enfrentar la crisis económica y sanitaria”, indica la Dipres en su informe.
También destaca el aumento de 167,2% a/a que registró la gran minería privada (GMP10), gracias al aumento del precio cobre, que permitió mayores transferencias desde las firmas al Estado. El promedio semestral del valor del metal rojo fue de US$4,13 la libra, mientras en igual lapso del año pasado alcanzó a US$2,49 la libra, lo que más que compensó el menor valor del dólar ($720 en la primera mitad de 2021 vs $813 en enero-junio de 2020). El aumento del metal rojo también benefició a los ingresos producto de Codelco, que tuvieron un alza anual de 211,8%.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.