Ministra de Salud y crisis de las isapres: “Ciertamente que cualquier solución tiene que tener su participación”

Luego que tras dos meses suspendida este miércoles se retomara la mesa de negociaciones entre el gobierno y las isapres, que busca amortiguar el efecto sobre la industria del fallo de la Corte Suprema que las obliga a aplicar la nueva tabla de factores a todos los afiliados y restituir los cobros en exceso, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, señaló que el aporte de las aseguradoras a las negociaciones es necesario para salir de la crisis.

“Desde ayer retomamos la discusión con las isapres porque ciertamente que cualquier solución tiene que tener su participación y hay información detallada que solo ellos tienen y que nosotros necesitamos como, para efectivamente, ver cuáles son las alternativas para salir de esta situación”, afirmó en un seminario organizado por Espacio Público.

Aguilera indicó que el gobierno no está enfocado en dar una solución en particular a las isapres, sino que en evitar que se produzca una crisis sistémica que termine involucrando, por ejemplo, a las clínicas y en general a las personas.

Asimismo, sostuvo que en el último año las cifras de traspasos desde el sistema privado de salud al público ha tenido un fuerte aumento. En específico detalló que mientras el 2022 dicho número alcanzó a 380 mil personas, en lo que va de este año ya llega a 100 mil, lo que equivale al tamaño de una isapre pequeña.

El fallo de la Corte Suprema del 30 de octubre además de la devolución de los cobros en exceso por la aplicación de la tabla de factores de edad en general para todos los afiliados, también establece la gratuidad para los menores de dos años por considerarse que ya están incluidos en el plan GES, y que será la Superintendencia de Salud la encargada de definir cómo se aplica la resolución, para lo cual tiene plazo hasta el 30 de mayo.

Al respecto Aguilera señaló que “actualmente nosotros estamos evaluando una propuesta que establezca una progresividad del cumplimiento del fallo, distinguiendo entre los tres efectos que tiene financieramente: el tema de la suspensión de los menores de dos años, que probablemente sería el elemento que podría entrar en un primer momento; el tema de la aplicación de la tabla de factores que significaría una reducción en los ingresos futuros, y las devoluciones de los excedentes”.

Agregó que “la mecánica, los plazos que se han conocido en la prensa, la gradualidad, son temas estimativos que nosotros estamos modelando y por eso ahora que se retomó la mesa de trabajo con las isapres y que estamos pidiendo precisar las cifras, es algo que podemos seguir avanzando a través de distintos modelos de cuál es la forma en la cual se logre o por lo menos se vislumbre una sostenibilidad que dé facilidades para que efectivamente se cumpla el fallo”.

Precisó que en el caso de las leyes éstas se pueden interpretar, pero los fallos se tienen que acatar y recordó que la misma vocera de la corte Corte Suprema, Ángela Vivanco, ha planteado, en sus sucesivas intervenciones, que ellos esperan que el fallo se cumpla, pero que tampoco pretenden la quiebra del sistema.

En ese sentido Aguilera enfatizó que el fallo no pone fin al negocio de las isapres, sino que ha definido un set de reglas que son difíciles y complejas de cumplir. “No es la intención de ellos el que se termine el sistema de isapres y, de hecho, hay isapres que probablemente no tiene mucho efecto el fallo sobre su viabilidad financiera”, aseveró.

Se estima que las reuniones entre el gobierno y las isapres continúen la próxima semana.