“Unilateralmente y sin previo aviso”: Clínica Dávila suspende sus convenios con isapre Cruz Blanca

Las clínicas han intensificando las gestiones de cobro con las isapres para que les paguen los US$ 540 millones que les adeudaban a mayo por prestaciones realizadas (facturadas y no facturadas), ya que advierten que, en los últimos 12 meses, los retrasos en el pago de cuentas por prestaciones son cada vez mayores. Los prestadores han amenazado a las isapres con acabar la relación comercial si es que no pagan en los plazos que corresponden, algo que hace poco más de un mes se concretó para dos isapres.

Así por ejemplo, en julio se conoció que Clínica Alemana suspendió convenios con Nueva MasVida y Consalud; y lo mismo hizo Red Salud con Nueva Masvida. Y si bien Clínica Dávila tenía todos sus convenios vigentes con las isapres, eso cambió desde esta semana: la clínica informó en su sitio web que desde este lunes se suspendieron sus convenios con Cruz Blanca.

Si bien los beneficiarios de las isapres seguirán recibiendo las coberturas establecidas en su plan de salud, lo que cambia es la modalidad de pago de las atenciones: los afiliados tendrán que pagar directo las prestaciones y luego ir a la isapre a reembolsar.

“Desde esa fecha, las atenciones ambulatorias y de hospitalización deberán pagarse en su totalidad, para luego ser reembolsados directamente en la isapre”, comunicó la clínica. Allí agrega que “los pacientes que tengan activo el GES-CAEC, podrán continuar su atención en la clínica”.

Consultada al respecto, desde isapre Cruz Blanca señalaron que “Clínica Dávila decidió suspender unilateralmente -y sin previo aviso- el convenio de pago con CruzBlanca a contar del lunes 5 de septiembre, por lo que dejarán de recibir bonos y los afiliados deberán pagar la prestación directamente al prestador, según lo indicado por el recinto”.

También agregaron: “Lamentamos que hayan tomado esta decisión que sin duda afecta a afiliados y pacientes, y recordamos que aún pueden solicitar a Cruz Blanca el reembolso correspondiente de acuerdo con su plan de salud. Por nuestra parte, estamos estudiando las posibles vías de acción”.

Asimismo, aseguraron que “seguiremos haciendo esfuerzos con el fin de velar por los intereses de los afiliados y asegurar acceso a una salud oportuna y de calidad, en medio de la delicada situación que enfrentan las isapres, cuestión que es de público conocimiento y que tiene a todo el sector y a las autoridades trabajando en instancias de diálogo para buscar una pronta resolución”.

En tanto, desde Dávila dijeron que “la medida fue tomada tras un proceso de negociación con dicha isapre, la que ha acumulado un volumen de cuentas médicas no bonificadas muy por encima de los plazos habituales, lo que genera un grave perjuicio para la Clínica y hace inviable la continuidad de los convenios”.

Desde la compañía perteneciente a Empresas Banmédica, agregaron que “es importante mencionar que los afiliados de CruzBlanca seguirán siendo atendidos sin distinción y que, en el caso de las prestaciones asociadas a hospitalización, se darán facilidades de pago. Es de nuestro interés reanudar el convenio con CruzBlanca, una vez que esta regularice el pago de la deuda vigente”.

Para aquellos afiliados que ahora tengan que pagar directo en clínicas y luego ir a reembolsar en la isapre, la normativa establece ciertos plazos de reembolso de parte de las aseguradoras: en prestaciones ambulatorias puede ser de hasta 30 días hábiles, mientras que los reembolsos hospitalarios llegan hasta los 60 días corridos.

El mes pasado el gerente general de Clínica Dávila, José Ignacio Valenzuela, había dicho que “por el lado de las isapres, llevamos algunos meses ya con ciertos retrasos en los pagos, no cayendo necesariamente en incumplimiento de contratos, pero sí particularmente desde el punto de vista del plazo de bonificación”.

Al respecto, señaló que “hemos estado en negociaciones con resultados satisfactorios en algunos casos, pero aún estamos en conversaciones con algunas que, de no llegar a acuerdo, también nos veríamos en la obligación de modificar o terminar nuestras relaciones”. Eso empezó a cumplirse en el caso Cruz Blanca, esta semana.