El inicio de esta nueva década ubicó al cambio climático y la sustentabilidad en el centro de las estrategias de inversión. Así se refleja en los portafolios 2020 de los mayores gestores de fondos, donde los analistas desacreditan la teoría de que en el corto plazo, las inversiones ESG implican sacrificar rentabilidad.

El ETF que reúne a los principales índices de economías emergentes (iShares MSCI Emerging Markets ETF), cerró 2019 con alza de 14,8%, mientras que el fondo que agrupa a compañías emergentes con potencial ESG apuntó un retorno anual de 17,2% (iShares ESG MSCI EM ETF).

"Es imperativo buscar factores ESG a medida que los inversionistas buscan portafolios que brinden un crecimiento sostenido (…) Los fondos que siguen acciones con potencial ESG han crecido en forma significativa a partir de 2016", dice un reporte de JP Morgan.

Eso sí, el banco de inversión norteamericano destaca que, a pesar del fuerte avance del sector, el universo de inversiones ESG sistemáticas y activas se reduce a un 0,9% del total de activos que reúnen los ETF emergentes.

De hecho, una encuesta a 25.000 inversionistas realizada por Schroders, indica que el 16% invierte con foco en sustentabilidad, frente al 32% que aseguró estar interesado en los principios ESG.

Dicha tendencia tomará un giro este año, de la mano de la entrada en vigencia de una normativa de las Naciones Unidas. Se trata del acuerdo de Principios de Inversión Responsable (PRI), el cual establece que en junio, los bancos de inversión y gestores de fondos deberán aumentar en un 50% sus activos bajo administración con foco ESG.

"Lo que sugiere que en 2020, el activos bajo administración orientados a ESG aumentará en más del doble. Desde US$ 22 billones (millones de millones) a US$ 45 billones. Los integrantes del PRI que no cumplan con este requisito se arriesgarán a la exclusión del pacto, algo que los administradores de activos no querrán", dice un reporte de Goldman Sachs.

Un reporte del equipo de análisis cuantitativo de JP Morgan advierte que las economías emergentes serán las más afectadas por el cambio climático.

"El cambio climático es un problema global, pero las economías emergentes de bajos ingresos tendrán consecuencias desproporcionadas (…) Europa emergente es menos vulnerable a los riesgos climáticos entre las economías emergentes", dice el banco de inversión norteamericano.

Y justamente los inversionistas de economías emergentes demuestran mayor interés en aplicar criterios ESG en sus portafolios. Así lo demuestra la encuesta de Shcroders, donde el 87% de los inversionistas en India, 80% de China y 77% de Tailandia, dijeron que siempre consideran la sustentabilidad.

Por esta razón, JP Morgan identifica las 50 acciones emergentes con mayor potencial ESG, donde destaca Walmart México y las brasileñas Localiza Rent A Car de Brasil, B3 y Lojas Renner. (Ver tabla)

Según indica el reporte, la lista de ESGQ Top 50 de JP Morgan, ha logrado un crecimiento marginal de 0,7% más alto que el ETF iShares Emergente.

"Esto concilia con la opinión de nuestro equipo más amplio de que invertir en ESG no implica necesariamente sacrificar los rendimientos", dice el banco de inversión.

Otro punto que destaca JP Morgan radica en los ratios precio utilidad y el ROE de las acciones que integran el listado ESGQ Top 50.

"El ratio precio utilidad a 12 meses de la lista de acciones Top 50 se ubica en 14.1 veces frente al ratio de 12.7 veces de las acciones que integran el MSCI Emergente, lo que sugiere que las métricas de los papeles ESG cuentan una valoración más atractiva. Además, se estima que el Retorno sobre el capital (RoE) para la lista Top 50 es de 13.4%, es decir, 1.4% mayor a que el índice de emergentes. La administración de capital superior y sostenida y los márgenes de rentabilidad deberían respaldar el caso de la inversión ESGQ", indica JP Morgan.