Alza bursátil: efecto político y fundamentales de la economía

Durante la presente semana todo es optimismo en el mercado bursátil nacional. Con un lunes post elecciones donde el IPSA se ubicó en torno a los 5.595 puntos y que, además, durante la presente semana no se ha movido en rangos inferiores a los 5.490 puntos, cabe preguntarse: ¿la fiesta se debe a que el candidato ganador es el favorito de los inversionistas? (como lo señaló el ministro de Hacienda).

En este sentido, creo que es necesario explicar que estas fluctuaciones se dan no por un tema político, sino básicamente por la evolución (mejoría) de los fundamentales de nuestra economía y, por ende, mejores perspectivas futuras para los diferentes sectores industriales y perspectivas de flujos de caja para los inversionistas.

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En relación con lo señalado, primero observar que para el próximo año nuestro crecimiento económico se ubicará en torno al 3,2% a 3,5%, cifra por sobre lo que terminaremos creciendo este año, que ya finaliza con un 1,6%. Estas mejores perspectivas de crecimiento económico para 2018, redundarán en incrementos paulatinos pero sostenidos de la Formación de Capital Fijo, producto de los mejores pronósticos de la demanda agregada, en especial del componente de consumo. En segundo término, pero también un factor importante del contexto económico, es el compromiso de disminución del déficit fiscal de nuestro país.

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Todo lo señalado, permite vislumbrar un incremento en la inversión nueva, que a su vez con los retornos de inversiones pasadas realizadas por las empresas aumentarán, por lo que las expectativas de flujos de caja y, por tanto, de dividendos configuran un escenario propicio para la compra de acciones, lo que sin duda ha impulsado el IPSA durante los últimos días.

*El autor es académico Facultad de Economía y Negocios Universidad Finis Terrae.