Costos de fletes marítimos suben 30% en lo que va de 2024 y superan con creces el nivel prepandemia

CSAV VAPORES

El valor promedio del transporte de carga de importación marítimo está en su punto más alto en 18 meses, situándose en US$145 por tonelada a julio, versus los US$94 observados en enero, según un informe de la Cámara del Comercio de Santiago. Con ello, está por sobre los niveles previos al Covid-19 en más de un 60%.


Los costos de los fletes marítimos o de transporte naviero internacional habían venido experimentando hasta el año pasado una normalización en comparación a las fuertes distorsiones al alza que sufrieron las operaciones a nivel mundial a raíz de la pandemia del Covid-19. Sin embargo, de acuerdo al último reporte de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) sobre la materia, “durante lo que va de 2024 se observa un quiebre de tendencia a través de un rebrote de pensiones alcistas”.

Así, según el informe, el valor promedio de los fletes marítimos de carga de importación ha subido un 30% en lo que va del año, situándose en US$145 por tonelada a julio, versus los US$94 observados en enero.

“Estos valores corresponden, además, a los más altos en 18 meses. Previamente, el mayor valor histórico se había registrado en agosto de 2022, cuando se aproximaron a los US$370 por tonelada, producto de la crisis de contenedores que se produjo en la pandemia”, expone la CCS.

Este incremento de las tarifas, puntualiza el gremio, ha llevado a que los costos actuales del transporte de importación de carga general esté por sobre los niveles prepandemia en más de un 60%.

En ese sentido, la CCS explica que el alza en el transporte de carga de importación ha tenido un fuerte impacto en el valor FOB de las mercancías que ingresan al país. “En el último trimestre móvil, el flete naviero de carga general representó el 7,2% del valor de las mercancías importadas, muy por sobre los niveles prepandemia, en que el flete se situaba levemente por sobre el 4% del valor FOB”.

La situación actual de los fletes marítimos ha estado impulsada principalmente por los costos de transporte de los productos adquiridos en Asia, cuyo precio ascendió hasta US$153 por tonelada en el trimestre móvil finalizado en julio de este año, lo que equivale a un nivel 60% por sobre la tarifa de comercio observada en otras regiones. De hecho, de acuerdo al informe, en países fuera de Asia el valor promedio alcanza a US$93 por tonelada.

Los factores que empujan este escenario, detalla la CCS, en su mayoría se refieren a la crisis de ataques en el Mar Rojo y el Canal de Suez, que conectan Europa con Asia, lo que ha obligado a las empresas navieras a optar, obligadamente, por rutas alternativas que pueden ser no sólo más largas, sino que también más costosas.

“Junto a las interrupciones en las rutas tradicionales y más económicas, se ha observado también una mayor demanda global de importaciones, superior a lo proyectado por el mercado logístico, tensionando sus capacidades y presionando los costos”, sostiene el reporte.

En los primeros siete meses del año la carga de importación marítima superó los 26 millones de toneladas en Chile. De ese total, un 28% correspondió a tonelaje importado desde Estados Unidos. En el ranking de países de mayor participación en el origen de importación le siguen Brasil, con un 12%; China y Colombia, con un 11% cada uno; Argentina, con un 5%; Perú, con un 4%, y Ecuador, con un 3%.

“Los datos recogidos por la CCS muestran además que entre enero y julio del año en curso el 92% del tonelaje transportado por compras de bienes desde el exterior utilizó la vía marítima, mientras que el modo carretero explicó casi el 8% (alrededor de 2,2 millones de toneladas). La vía aérea, por su parte, alcanzó apenas el 0,2% de la carga, con 42 mil toneladas”, se lee en el informe.

En Chile, el precio de los fletes está empujando la inflación, según el análisis del Banco Central. “La proyección de inflación total aumenta en el corto plazo, principalmente por la mayor alza de los componentes volátiles. Una fracción responde a los efectos directos e indirectos en el IPC del mayor aumento de las tarifas eléctricas que se produjo en junio y julio. Se suma el impacto del incremento de las tarifas de fletes marítimos a nivel global y la depreciación del peso en los últimos meses. A fines de este año, se estima que la inflación total cerrará en 4,5% (4,2% en junio)”, señaló el instituto emisor en su último Informe de Política Monetaria (IPoM) presentado este mes.

El reporte de la CCS anticipa que, de momento, algunos indicadores adelantan para agosto y septiembre una posible reducción de los costos en el mercado global. Lo anterior, puesto que ha habido recientes expansiones en la capacidad de la oferta de transporte internacional, además de una disminución estacional en las presiones de demanda.

“El mercado no obstante, se mantiene estrecho y con altos niveles de incertidumbre”, advierte la Cámara de Comercio de Santiago.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.