Economía de Brasil se contrajo 0,2% en los primeros tres meses bajo gobierno de Bolsonaro

El estreno económico de Jair Bolsonaro no ha resultado ser el que se esperaba, cuando los mercados celebraran su triunfo en las elecciones. Ayer el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística informó que la economía de Brasil registró la primera caída trimestral del producto interno bruto desde el cuarto trimestre 2016.

En línea con las perspectivas de los analistas consultados por Bloomberg, la actividad registró un descenso de 0,2% entre enero y marzo, frente al periodo anterior. El retroceso se explica en gran medida por una caída de 1,9% en las exportaciones y de 1,7% en la inversión fija. Otras bajas importantes fueron las del sector agropecuario e industrial, que retrocedieron 0,5 % y 0,7 %, respectivamente.

A la luz de las desalentadoras cifras, el ministro de Economía, Paulo Guedes, sostuvo que para alcanzar el "sueño del crecimiento" es preciso aprobar reformas estructurales, como la de la pensiones y la tributaria. Por el contrario, planteÓ que "trucos" como una "liberación" de recursos o corte artificial de los intereses ya se han implementado en el pasado sin éxito, generando un "vuelo de gallina" en la economía, es decir, un crecimiento bajo e inconsistente.

Sin embargo, hay quienes creen que el asunto va más allá de las transformaciones por la que apuesta el gobierno. "Las regiones que se basan más en el sector industrial están luchando más que otras. Esto podría explicar por qué la recuperación carece de fuerza y por qué puede llevar más tiempo alcanzar tasas de crecimiento más altas que en el pasado, incluso en un escenario positivo con el progreso de la agenda de reformas", indica Bank of America.

En ese marco, Capital Economics sostiene que "las primeras señales son que el crecimiento en el segundo trimestre también ha sido muy débil y ahora existe un riesgo real de que la economía caiga en una recesión técnica".