Estudio revela que más de la mitad de los vendedores ambulantes no dejaría la actividad

Un estudio encargado por el gobierno de Santiago, al Centro de Políticas Públicas UC con la asesoría de la Cámara Nacional de Comercio, mostró que cinco de cada seis vendedores ambulantes están satisfechos con la actividad, y más de la mitad no la dejaría.

El estudio mostró que el 82,9% de los vendedores ambulantes mostró satisfacción con la actividad y un 54,3% no estaría dispuesto a dejarla. Esto, porque valoran los atributos como la flexibilidad laboral, autonomía y liquidez financiera. Se estima que el ingreso promedio diario en esta actividad es de $40.000, con una jornada laboral de 6 días a la semana, en los que trabajan en promedio 8,3 horas al día.

Por otro lado, el 56,6% de los vendedores ambulantes señaló que estaría dispuesto a regularizar su situación laboral, mientras que solo el 39,3% de ellos tiene la intención de formalizar su emprendimiento, y dejar de vender en la calle.

“Esta situación demanda establecer tipologías de comercio ambulante y estrategias diferenciadas para brindar soluciones eficaces, tanto para regularizar la actividad en los casos que sea factible, como para focalizar la fiscalización e investigación en aquello que involucra delitos, como, por ejemplo, el contrabando o la falsificación”, dijo Cristian Crespo, subdirector del Centro de Políticas Públicas UC.

El comercio ambulante lo desarrollan tanto hombres como mujeres en igual proporción, y la mayoría tiene entre 30 y 49 años. Una gran proporción de ellos tiene enseñanza media completa, y un gran número es además jefe de hogar a cargo de niños. La ropa y la comida lideran los bienes transados en el comercio informal.

“El estudio es concluyente y define múltiples variables en la problemática del comercio ambulante. Por ejemplo, con esta radiografía nos percatamos que el mercado ilegal es muy atractivo tanto para vendedores como compradores: sobre el 90% de los compradores se encuentra satisfecho o muy satisfecho con la compra de artículos, motivados por los precios (53,7%) y el fácil acceso (47%) de los productos. Por el lado de los vendedores, los niveles de ingresos a los que acceden, así como otros beneficios de la actividad se vinculan a la baja disposición a la formalización o la reconversión laboral”, sostuvo el gobernador de Santiago, Claudio Orrego.

El estudio mostró además que la mayoría cuenta con enseñanza media completa. El 42% son extranjeros, de los cuales el 36,5% cuenta con una visa o residencia y el 49,1% no cuenta con una condición migratoria regular.

“El incremento del comercio ilegal en los barrios es una realidad que va en aumento. Los resultados del estudio se relacionan directamente con nuestra última Encuesta de Victimización del Comercio donde el 64,7% de las personas estima que la presencia de ambulantes ha aumentado, no sólo en Santiago, sino también en otras regiones”, indicó José Pakomio, presidente de la CNC.

El levantamiento de la información se hizo entre marzo y junio de este año, y se seleccionaron 20 puntos con alta presencia de comercio ambulante en 13 comunas de la Región Metropolitana.