Por debajo de las expectativas de mercado y del Banco Central cerró el año la inflación.

El INE informó ayer que el IPC de diciembre tuvo una variación mensual de 0,1%, una décima menos de lo que anticipaba el consenso de analistas para ese mes. Con ese dato, la inflación anual terminó el año con una alza de 3%, su mayor registro desde septiembre de 2018.

El 3% es la meta inflacionaria que tiene el Banco Central (aunque el instituto emisor habla de esa cifra a dos años plazo, no a diciembre), pero está por debajo del 3,4% anticipado por el propio instituto emisor en el Informe de Política Monetaria (Ipom) de diciembre.

La autoridad monetaria había previsto un efecto de la depreciación del peso mayor en la inflación, y también que en 2020 alcanzará niveles cercanos a 4%, producto de la situación cambiaria.

Entre las razones para que la apreciación de la moneda estadounidense esté -por ahora- impactando menos de lo previsto, está la desaceleración económica, que impediría traspasos importantes a precios de público, indican en el mercado.

Desde Banchile Inversiones indicaron que "de acuerdo a nuestras estimaciones, la contracción de la actividad doméstica y el alto stock de inventarios del sector comercio en los últimos meses del año afectaron el traspaso de tipo de cambio a precios, lo que en parte puede observarse por la evolución del IPC de bienes transables que retrocedió 0,1% en diciembre".

En Santander, que acertaron en la estimación de diciembre, indican que "tal como esperábamos, la fuerte depreciación del peso de las últimas semanas no se vio completamente reflejada en el índice de precios de diciembre, por cuanto en varios ítems su traspaso es gradual".

De todas formas, desde la entidad esperan que hacia adelante "observaremos un alza transitoria en la inflación, por sobre la meta, debido al efecto del mayor tipo de cambio y, de mantenerse las tensiones en Medio Oriente, al incremento en el precio del petróleo".

En BICE también ven una mayor inflación en los próximos meses: "no descartamos que en el primer trimestre del año 2020 haya un efecto rezagado del alza del tipo de cambio y algunos efectos puntuales, como la sequía o la reciente alza del petróleo internacional, que puedan tener un efecto positivo para la inflación".

Desde BTG Pactual, anticipan que "la depreciación cambiaria, sumada al reciente aumento del precio del petróleo, añadan algunos puntos adicionales a la inflación, la que llegaría a 3,5% en el primer trimestre de 2020. Luego, esperamos que los efectos de la menor actividad predominen y presionen a la baja los precios, llevando la inflación a niveles cercanos a 3% en diciembre de 2020".

Con este escenario, en BTG no ven una nueva baja en la TPM durante este año, aunque otros analistas no cierran esa puerta.

Tanto en BICE como en Banchile ven que podría producirse un nuevo recorte, para reactivar la menor demanda interna.

El dólar bajó ayer por segunda jornada consecutiva, debido a una mayor calma en los mercados internacionales luego del temor inicial por el ataque con misiles de Irán a dos bases con militares estadounidenses en Irak.

La divisa estadounidense despidió el día con una caída de $7,11 (-0,92%) a un valor de $761,55. Con este resultado, el peso chileno fue la segunda moneda emergente que más se aprecia y la sexta a nivel mundial, según Bloomberg.

El cierre de la cotización del peso chileno fue minutos antes de que el presidente de EEUU, Donald Trump, se refiriera al conflicto. Sus palabras luego fueron leídas como de distensión, lo que hizo que en after market la moneda estadounidense siguiera depreciándose, hasta niveles de $758.