Caída del sector servicios por rebrote de coronavirus frena el crecimiento de la actividad en la eurozona

El crecimiento de la actividad empresarial en la zona euro se detuvo en septiembre debido a un deterioro en el sector servicios, golpeado por un resurgimiento de los casos de coronavirus que ha empujado a los Gobiernos a reintroducir restricciones y a los ciudadanos a quedarse más tiempo en casa, según mostró una encuesta publicada el miércoles.

Esa nueva caída de los servicios contrarrestó con creces el efecto del mayor crecimiento del sector manufacturero en dos años.

Tras la reimposición de restricciones ante la segunda ola del virus, el índice de gestores de compras de IHS Markit bajó desde los 51,9 de agosto a 50,1 puntos en septiembre.

Esta lectura tan sólo queda ligeramente por encima de los 50 puntos que separa el crecimiento de la contracción y muy por debajo de la media prevista en una encuesta de Reuters, de una modesta caída a 51,7.

“La recuperación económica de la zona euro se estancó en septiembre, ya que el aumento de las infecciones de COVID-19 llevó a una renovada reducción de la actividad del sector servicios en toda la región”, dijo Chris Williamson, economista jefe de negocios de IHS Markit.

“Es evidente que estamos en presencia de una economía de dos velocidades, puesto que las fábricas indican que el crecimiento de la producción fue impulsado por un aumento de la demanda, que proviene especialmente de los mercados de exportación y la reapertura del comercio minorista en muchos países, pero el sector servicios ha vuelto a decrecer”.

El PMI del importante sector servicios cayó a 47,6 en septiembre desde la anterior lectura de 50,5, significativamente por debajo de la marca de equilibrio de los 50 y notablemente inferior al pronóstico más pesimista de una encuesta de Reuters, que proyectaba un nivel de 50,5.

Con la caída de la demanda y parte de la actividad proveniente de la acumulación de trabajo atrasado, las empresas de servicios recortaron los niveles de personal por séptimo mes consecutivo. El subíndice de empleo bajó de 47,8 a 47,6.

Al sector manufacturero le fue mucho mejor. El PMI de las fábricas subió a un máximo de dos años de 53,7, desde los 51,7 puntos de agosto, frente a una previsión media de 51,9. Mientras el sector servicios estuvo por debajo de todas las expectativas, el de fabricación estuvo por encima de todas ellas.