Nuevas regulaciones y foco en prevención: los cambios que afrontarán las empresas con el inicio del año laboral
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La entrada en vigencia de normativas laborales como el recién promulgado Decreto Supremo 44, buscará -según los expertos- fortalecer el cuidado de los trabajadores al promover un entorno laboral seguro y la prevención proactiva, entre otros puntos.
“Diversos estudios han mostrado que la violencia en el trabajo lleva a desmotivación, alta rotación, baja productividad, mal servicio e incluso, a riesgo de sostenibilidad a mediano plazo”, asegura Pamela Gana, superintendenta de Seguridad Social, organismo responsable de fiscalizar el cumplimiento de las normativas de seguridad social y garantizar el respeto de los derechos de los trabajadores.
Según la autoridad, “la prevención de riesgos laborales no es solo una obligación legal, sino que una inversión en el bienestar de las personas y en la productividad de las organizaciones”. En especial, con la entrada en vigencia de nuevas normativas y protocolos que incrementarán las exigencias en materia de cuidado de los trabajadores.
¿Qué escenario enfrentarán en este sentido las empresas en marzo, con el inicio del año laboral? Una de las últimas normativas laborales aprobadas es el Decreto Supremo 44 (DS 44), vigente desde el 1 de febrero pasado, en el cual destacan cinco ejes centrales: promover un entorno laboral seguro, la prevención proactiva, el enfoque de género, una mayor participación y una capacitación continua de los trabajadores. A esta normativa se suma la Ley Karin, vigente desde el 1 de agosto de 2024, la cual busca garantizar espacios “laborales seguros y libres de acoso, estableciendo la obligación de prevenir los actos que vayan en contra de este objetivo”, según detalla el gobierno.
Para Rodrigo Mujica, director de políticas públicas de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), que reúne a cerca de 4.000 empresas, 47 asociaciones y 21 gremios, la implementación de las nuevas normativas como la Ley de Conciliación de vida personal, familiar y laboral; el Decreto Supremo 44; la Ley de 40 horas, y la Ley Karin, entre otras, representan “desafíos en las organizaciones, ya que requieren de acciones permanentes e, incluso, cambios en la cultura organizacional de las empresas”.
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Sobre el Decreto Supremo 44, Mujica resalta que esta normativa “impone nuevas obligaciones a las empresas en materia de salud y seguridad en el trabajo e, incluso, cambia la estructura preventiva que deben tener las organizaciones, incorporando, por ejemplo, un nuevo ‘delegado de seguridad y salud en el trabajo’ para las empresas de entre 10 y 25 trabajadores”. Otro de los cambios relevantes, según Mujica, es el surgimiento de una matriz de identificación de peligros y evaluación de riesgos.
En esta línea, Héctor Jaramillo, gerente Corporativo de Seguridad y Salud en el Trabajo de Mutual de Seguridad, detalla que uno de los ejes que impulsa esta nueva normativa es “la detección dentro de la empresa de los peligros, así como la identificación y evaluación del riesgo que puede tener para las personas”.
Salud mental y prevención
El cuidado de la salud mental de los trabajadores será otro de los temas centrales que estará presente en el inicio del año laboral, de acuerdo a Jaramillo. Estos casos, sostiene el ejecutivo, se han incrementado en los últimos años, especialmente después de la pandemia de Covid-19. “Como país contamos con buenos resultados en tendencia a la baja de disminución de accidentes y de mortalidad, pero aumentando los problemas de salud mental en enfermedades profesionales”, indica.
Una forma de reducir y prevenir casos de salud mental es a través de la protección del entorno laboral de los trabajadores, destaca Jaramillo. Este punto cobra especial relevancia en las empresas, tras la puesta en marcha de la Ley Karin, normativa que, según cifras de la Dirección del Trabajo, hasta el 31 de diciembre de 2024 registró un total de 21.864 denuncias, de las cuales 9.151 (42%) se enmarcaron como denuncias vinculadas a este cuerpo legal.
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Para la superintendenta Gana, la implementación de la Ley Karin contribuirá a prevenir y, en casos acreditados, sancionar eventos de violencia o acoso en los espacios laborales. Además, asegura la autoridad, incentivará a las organizaciones a crear “protocolos para la prevención de acoso y violencia que, idealmente, sean construidos de manera participativa y de acuerdo a la cultura organizacional de cada lugar de trabajo”.
Desde la Sofofa Mujica afirma que los esfuerzos se han centrado en la educación y capacitación de los trabajadores a fin de reducir los episodios de violencia laboral. “El primer paso es la educación para evitar que se produzcan situaciones de acoso o violencia. La prevención siempre debe ser el foco. Luego, las empresas han venido implementando cambios en los procedimientos de denuncia, investigación y sanción, y también las medidas de resguardo que deben aplicarse en el caso en que se reciban denuncias”. Según Mujica, algunas empresas han tenido dificultades debido a la “poca anticipación” con que se emitió la normativa necesaria para implementar esta ley.
La prevención y fiscalización de las nuevas normativas laborales, es un tema de interés en el mundo público y privado. En este contexto, en Mutual de Seguridad manifiestan que cada caso debe ser analizado, ya que en algunas ocasiones una denuncia por violencia en el trabajo puede esconder problemas relacionados directamente con el ambiente laboral en que habitan los trabajadores.
“Cuando le preguntamos a médicos que recibían los antecedentes para calificar un caso de posible enfermedad profesional, ya no sobre la Ley Karin, sino sobre una posible enfermedad profesional, nos mencionaban que era muy común encontrar relatos de problemas en el trabajo. Porque la denuncia de una posible enfermedad profesional o de un acoso laboral, también pueden ser conductos o vías de manifestar situaciones que no llegan a ser un problema de salud, sino que es un problema que está ocurriendo en un lugar de trabajo”, detalla Jaramillo.
Frente a estos factores, desde el gobierno llaman al diagnóstico y prevención para cuidar los entornos de trabajo. También llaman a avanzar en la implementación de las nuevas normativas que garantizan una mayor seguridad para los trabajadores y su ambiente laboral. “El mayor desafío es que se comprenda que la prevención es lo principal y lo fundamental en la gestión de los riesgos ocupacionales en general. Prevenir siempre va a ser mejor que curar. Cambiar el foco desde lo curativo o sancionable a lo preventivo y actuar para que algo no ocurra”, enfatiza la superintendenta Gana.
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