Todo parecía resuelto en la licitación del Registro Civil para la fabricación de las cédulas de identidad y pasaportes. Fue un proceso largo y marcado por polémicas, postergaciones e impugnaciones pero que al final dejó como gran triunfador a Aisino.
El consorcio liderado por esa empresa china se adjudicó dicha licitación por US$205 millones y en la práctica implicaba que el precio de los pasaportes caería a la mitad y el de los carnés en un 20%.
Sin embargo, el caso dio un vuelco repentino porque el Registro Civil anunció esta tarde que el director el Director Nacional, “en uso de sus facultades”, resolvió dejar sin efecto el resultado de esa licitación pública debido a inconsistencias encontradas en la oferta de la empresa.
En un comunicado, la entidad detalló que adoptaron esta medida luego de solicitar una serie de informes a la empresa con el fin de verificar antecedentes necesarios para culminar con la firma del contrato, que se iba a extender por diez años.
“En concreto se solicitó que, en cumplimiento de las Bases de Licitación, informara sobre una serie de inconsistencias contenidas en su oferta. Con fecha 12 de noviembre, el representante de la UTP Aisino contestó que la información pedida era improcedente y, por lo tanto, no dio respuesta a los requerimientos exigidos”, señaló el servicio en un comunicado de 9 puntos.
Según el Registro Civil, estas inconsistencias que no fueron aclaradas por la firma china implican una vulneración al “Pacto de Integridad” establecido en las Bases de Licitación del proceso.
Programa Visa Waiver
Pero hay más. En el comunicado de nueve puntos, el Registro Civil dijo que la adjudicación de los pasaportes debía asegurar la continuidad del sistema de exención de visas y, en ese contexto, pidió a la Cancillería que informara sobre los impactos que podría tener este contrato para la elegibilidad del país en el programa Visa Waiver.
“Al efecto la Subsecretaría de Relaciones Exteriores informó al Servicio de Registro Civil e Identificación, mediante oficio reservado de fecha 12 de noviembre recién pasado que, según los antecedentes disponibles para dicha entidad gubernamental, existe un alto grado de probabilidad que se ponga término al Programa Visa Waiver con Estados Unidos y probablemente con Canadá, en el evento de celebrarse el contrato con el adjudicatario”, señala el documento.
Las suspicacias
Hace algunos días, el Ministerio de Justicia pidió a dos abogados una mirada externa a este proceso, para suplir una de las debilidades que había tenido el Servicio de Registro Civil, al que se ha acusado de llevar adelante esta licitación de manera muy cerrada, sin atender que los resultados tenían implicancias para el país con otros Estados.
De esa forma, se le encomendó a Luis Cordero y Andrés Jana, que revisaran el proceso licitatorio que favoreció al consorcio chino alemán que había adjudicado la fabricación de los pasaportes. Como experto en derecho administrativo, Cordero, debió revisar los aspectos formales de las bases de licitación, mientras que Jana, analizó las bases de la licitación con una mirada más estratégica y debía advertir eventuales riesgos de juicios que podrían afectar a Chile ante organismos internacionales.
Tanto Cordero como Jana tenían previsto entregar sus informes esta semana, sin embargo, las autoridades del Registro Civil, optaron por adelantar los resultados.
El gobierno tenía hasta el 29 de noviembre próximo para firmar el contrato y enviar a la Contraloría General de la República la resolución que favorecía al consorcio chino. Por lo mismo, en el gobierno afirman que este era el momento para revisar si la empresa china cumplía las condiciones estipuladas para adjudicarse la licitación.
El proceso
En el comunicado, el registro Civil dijo que resolverá en los próximos días los próximos pasos a seguir para la contratación del servicio del nuevo modelo del sistema de identificación, documentos de identidad y viaje y servicios relacionados, “resguardando el mejor interés de los usuarios, tanto respecto de la seguridad de sus datos personales, como del costo de los documentos”.
Hay que recordar que esta licitación fue polémica desde el comienzo. A ella llegaron cinco consorcios postulantes y la alianza entre Aisino y Muhlbauer presentaron la mejor oferta económica y dos de sus competidores, Sonda-Thales e Idemia, la francesa que hoy opera el servicio y cuyo contrato finaliza en enero de 2022, presentaron impugnaciones en el Tribunal de Contratación Pública.
Además, la presencia protagónica de Aisino generó inquietud en algunos parlamentarios y hasta en la embajada de Estados Unidos en Chile, quienes cuestionaron la participación del grupo chino por razones de seguridad. La inquietud creció solo dos días antes de la adjudicación, prevista para el pasado 6 de octubre, cuando el Registro Civil informó una prórroga de diez días para “efectuar una revisión exhaustiva de cada una de las soluciones ofertadas”.
¿Quién es Aisino?
A pesar de no ser muy conocida en Chile, Aisino es una de las cinco compañías tecnológicas más grandes de China, junto a Huawei, Alibaba, Xiaomi y Tencent. Su principal negocio es la seguridad informática con foco en el sector financiero, Internet de las Cosas (IoT) y la informatización fiscal.
Actualmente tiene varios proyectos andando o como propuestas para el sector público, principalmente en países de África, Asia oriental y Medio Oriente. En Europa solo tiene proyectos “en preparación” en Rusia y Bielorrusia, y no está en América, con excepción de la licitación en nuestro país.
Aisino cotiza en la bolsa de Shangai y es parte de un grupo de empresas agrupadas y controladas por CASIC (China Aerospace Science and Industry Corporation Limited), de propiedad del Estado de dicho país. Este consorcio es una de las 500 empresas más importantes del mundo, según su sitio web corporativo, y está entre las 100 empresas de defensa más relevantes del planeta.
“Es la columna vertebral de la industria espacial de China y un líder en el desarrollo de la informatización industrial de China. CASIC posee 19 laboratorios nacionales clave o centros de tecnología de ingeniería y 28 plataformas de innovación de ciencia y tecnología”, señala su sitio web.