¿Sigue viva la UDI popular?

Si el consejo directivo ampliado de la UDI del próximo 10 y 11 de enero ya tenía una serie de ingredientes sabrosos, el anuncio de Pablo Longueira terminó por condimentarlo.

Los clásicos redactores de documentos afinan sus plumas para poner en el papel las ideas, y principalmente, rearticular una UDI, que para muchos está desaparecida: la UDI popular.

Los procesos que vienen en el partido tienen ya un cronograma establecido. Primero, esperarán el resultado de la segunda vuelta presidencial. Hasta ese minuto muchos de los líderes del partido mantendrán un pacto de silencio para no influir de ninguna forma en la campaña de Evelyn Matthei.

Después del consejo directivo ampliado, en marzo, se elegirá un nuevo consejo general, que está compuesto por cerca de 800 representantes, quienes eligen la mesa directiva. Concejales, alcaldes, diputados, senadores, presidentes regionales y distritales, más delegados del partido son sus miembros.

Esto último parece ser la clave. Para suceder a Patricio Melero, una soterrada carrera ya está desatada.

Dos nombres parecen llevar la delantera: el senador Víctor Pérez y el diputado Ernesto Silva.

Dos hombres que encabezan sectores distintos de la UDI actual. Mientras Pérez asume la continuidad de la directiva anterior que encabezó como secretario general junto a Juan Antonio Coloma como presidente, Silva apuesta por la corriente que intentó infructuosamente derrotar a Coloma en dos oportunidades.

La UDI "popular": la de Pérez, versus la UDI "renovada": la de Silva.

Los primeros buscan agrupar a un contingente de parlamentarios jóvenes. ¿El concepto? experiencia y juventud. Frase utilizada en varias oportunidades por el propio Juan Antonio Coloma quien en esta oportunidad daría paso a Pérez. Aunque todo puede cambiar, comentan desde ese sector.

En paralelo, se ha ido construyendo una columna bajo el alero del senador y fundador gremialista Jovino Novoa, la que estaría compuesta por Ernesto Silva, José Antonio Kast, Jaime Bellolio, Javier Macaya y María José Hoffmann, además de otros diputados jóvenes que fueron recientemente electos. Ellos portarían un fuerte discurso de "renovación", no solo de rostros, sino que de "ideas", comentan desde este sector.

Pero hay un factor determinante: qué dirá Andrés Chadwick. Con Pablo Longueira fuera de la primera línea, Jovino Novoa retirado del parlamento, el ministro del Interior de Sebastián Piñera, será un elemento de influencia en la nueva UDI.

Pero su domicilio pareciera ya estar definido: la fundación del actual presidente. Lo ha dicho, y su participación desde la mesa del partido está descartada, pero su opinión, como la de Novoa y de Longueira, será escuchada.

Según comentan en la UDI, Chadwick se podría cuadrar con Pérez, cerrando así el espacio a este grupo joven que quiere encabezar Silva y Kast.

Es así como la opinión de los parlamentarios nuevos cobra relevancia. Entre ellos la postura que pueda tomar, por ejemplo, Jacqueline Van Rysselberghe.

La disputa también se da en la definición de quien liderará la bancada el 2014. Desde principios de esta semana se han iniciado conversaciones entre Ernesto Silva y Gustavo Hasbún, actual jefe de bancada que quiere retener el cargo, frente a la posibilidad de que Javier Macaya se postule también para dirigirla.

Frente a todo esto, una fórmula aparece entre los diálogos gremialistas: una mesa de consenso, como la que hoy lidera Patricio Melero junto a José Antonio Kast. Sin embargo, son varios los que ven inviable la posibilidad de que Víctor Pérez logre aglutinar una fuerza suficiente para poder competir a una lista que parece estar ya conformada, como es la que lidera Silva.

En el fondo la consigna parece seguir siendo la misma: "ganar votos con nuestras ideas en sectores populares", comentan en el partido, esto buscando emular precisamente el espacio que hoy Pablo Longueira parece dejar vacío.

¿Las respuestas? Aún en proceso, ¿los caminos? Por ejemplo, Jaime Bellolio propondrá un congreso ideológico "para pensar el Chile que quiere la UDI para los próximos 15 a 20 años".

Un debate que ya se instaló en el partido de calle Suecia y que se reforzará a contar de las próximas horas.