María José Cumplido (PL): “Hay que socializar el trabajo doméstico y los cuidados a través de un Estado que sea corresponsable”

La historiadora feminista y activista LGTBIQ+, María José Cumplido (33), compite en un cupo del Partido Liberal por el distrito 11, un bastión histórico de la derecha que incluye a Las Condes, Vitacura, Peñalolén y otras comunas. La exeditora de Historia y Ciencias Sociales en Memoria Chilena, sitio web de la Biblioteca Nacional, dice que su visión aportará a buscar puntos medios para destrabar, quiere garantizar el derecho al cuidado y considera que el concepto de familia debe incluir a todas las que existen.

El Partido Liberal pertenecía al Frente Amplio y decidieron salirse. Para este proceso están en Unidad Constituyente conglomerado de la ex Nueva Mayoría. ¿Qué rol cree que van a cumplir ustedes como liberales dentro de la centroizquierda en la Convención?

Creo que ahí el rol más probable en un inicio va a ser servir como puente. Hay mucho acuerdo sobre lo que hay que hacer, pero hay que dirimir el cómo. No creo que el foco esté en lo identitario o quién es más de izquierda que otro, eso yo creo que fue una de las razones de salirse del Frente Amplio, ese tipo de discusiones no sirven en un momento así, pero lo que sirve es el ímpetu de generar una unidad programática.

¿Por qué es importante el rol que como historiadora puede jugar dentro de la Convención?

Investigar la historia te muestra que las cosas rara vez son tan blanco y negro, que están cruzadas por matices. Buscar esos grises me parece que va a ser importante para destrabar una Convención que puede estar muy extremada o puede venir también de una cultura política muy enfrascada en un diálogo bastante obtuso.

¿Cuáles serían sus principales banderas para la discusión?

Son tres. Desconcentrar el poder, a través del cambio del régimen híper presidencialista, fomentando los equilibrios. Es decir, un sistema bicameral que permite la vigilancia y el equilibrio, en pos de generar una institucionalidad que sea más ágil y produzca mayor gobernabilidad. En segundo lugar está el feminismo entendiéndolo como aquello que promueve la igualdad entre hombres y mujeres. Va a ser importante cuando hablemos del trabajo doméstico, del derecho al cuidado, los derechos sexuales y reproductivos, y otros. Y tercero, la participación vinculante, darle más poder a las personas, para que eso también agilice a los políticos que muchas veces no ven las demandas de la gente.

¿Qué sistema de gobierno propone?

Adhiero a los sistemas semipresidenciales, pero estoy abierta a hablar derechamente de parlamentarismo. Me inclino más por un semi presidencialismo, por algo más moderado y gradual que tiene que ver también con cómo ponemos a prueba nuestra cultura política, que es autoritaria. Eso ayudaría a darle mayor legitimidad al sistema, mejorar los equilibrios y agilizar las políticas.

Plantea una perspectiva de género en salud a través del derecho al cuidado. ¿En qué consiste?

Los cuidados, así como el trabajo doméstico, han sido históricamente vistos como un problema privado de las mujeres y esto significa que ellas se hacen cargo. Eso ha hecho que las mujeres hagan este trabajo gratis y eso tiene consecuencias en la sociedad y en la economía, tales como, la dificultad para insertarse laboralmente, peores índices de salud mental, menos redes de apoyo y menos libertad. Hay que volver responsable a la sociedad de aquellas tareas que se le han cargado a las mujeres, socializar el trabajo doméstico y los cuidados mediante un Estado que se haga cargo del cuidado a través de la corresponsabilidad e incluso también podemos hablar de un salario mínimo garantizado.

Pasando al tema de la comunidad LGTBIQ+ ¿Qué propone?

La Constitución tiene que dar cuenta de que todas las personas nacen y permanecen iguales en dignidad, por lo tanto, tienes que tener una mirada donde la comunidad LGTBIQ no esté expulsada. Cuando se piensa por ejemplo en familia y se asocia a una familia mamá, papá e hijo, ahí expulsas no sólo a la población LGTBIQ, sino a la mayoría de las familias de Chile. Hay que abrir el espacio, para incluir y hablar en pluralidades. Ahí va a ser fundamental que el Estado no se quede con la frase ‘hombres y mujeres nacen libres e iguales’, sino que su rol sea promover la dignidad, la equidad y la no discriminación.

¿Y en cuanto a la definición de familia?

Es complejo definir qué es una familia, porque una familia son muchas cosas. Entonces creo que hay dos opciones, o se incluye familias en plural, entendiendo esa pluralidad como la mayor amplitud posible o simplemente que no esté en la Constitución el concepto de familia.

Uno de sus ejes es la vinculación de la ciudadanía. ¿A través de qué instrumentos?

Es importante que haya cabildos vinculantes, plebiscitos para ciertos temas, tratados internacionales, por ejemplo, o decisiones donde el Congreso no logre consensuar. La iniciativa popular de ley me parece fantástica y eso puede puede ser desde una ordenanza municipal hasta una iniciativa de ley propiamente tal. Lo importante es hacerlo administrable. A través de dos índices, que son: necesitar una cantidad de firmas según el nivel de impacto de lo propuesto y el segundo es el tiempo.