La salud es uno de los aspectos centrales para el bienestar de las personas. Múltiples investigaciones científicas han advertido sobre el impacto que la alimentación, el ejercicio y reducir factores como el estrés tienen en el organismo, tanto a nivel físico como mental.

Si bien, siempre es recomendable acudir a un doctor para revisar cada caso particular y los síntomas que se puedan presentar, existen una serie de pruebas sencillas que pueden ayudarte a evaluar tu estado médico y —como efecto— a prolongar tu longevidad.

Así lo aseguró la reportera especializada en esta temática del periódico británico The Sun, Vanessa Chalmers, quien escribió un artículo en el que enumeró algunas que pueden realizarse fácilmente durante la rutina.

7 pruebas sencillas para evaluar tu estado de salud y prolongar tu longevidad. Foto: referencial.

Cuáles son las primeras pruebas

Según informaciones reunidas por ella del Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS, por sus siglas en inglés), la frecuencia cardiaca en reposo determina la eficiencia de tu corazón, por lo que es clave llevar una medición.

En este sentido, detalló que si esta supera continuamente las 120 pulsaciones por minuto o si está por debajo de las 60 en ese mismo periodo de tiempo, es necesario que consultes a tu médico de cabecera.

Otra prueba que sugirió Chalmers tiene relación directa con la grasa visceral y consiste en cortar un trozo de cuerda con la longitud de tu altura, dividirlo por la mitad y ver si logra rodear tu cintura (dos centímetros por encima del ombligo).

Si los extremos no se juntan, es altamente probable que ese nivel de grasa sea alto, según detalló en el citado medio. En caso de ser así, el riesgo de padecer diabetes de tipo 2, cardiopatías y apnea del sueño, entre otros padecimientos, podría ser más alto.

Para los controles que encontrarás a continuación (hasta el final de la nota), es necesario que midas tu frecuencia cardiaca para evaluar si se encuentra en un estado óptimo, bajo los parámetros que fueron descritos más arriba.

Uno de ellos consiste en hacer un ejercicio conocido como “step-up”, lo que —en este caso— se traduce en subir y bajar un pequeño escalón por tres minutos. Ya realizada esa actividad, quédate quieto y mide tu frecuencia cardiaca. Un estado físico “por debajo de la media”, según los datos reunidos por Chalmers, es de entre 117 y 122 latidos por minuto (LPM) para los hombres, mientras que para las mujeres es de 121-129.

7 pruebas sencillas para evaluar tu estado de salud y prolongar tu longevidad. Foto: referencial.

Desde medir dónde se encuentra el cuerpo en el espacio hasta revisar si está equilibrado

Además de las pruebas mencionadas, incluyó un ejercicio que tiene el objetivo de medir la fuerza central. Para realizarlo, debes colocarte en posición de plancha, como si fueras a hacer una flexión.

La idea es que los codos estén hacia adentro, con los hombros por encima de ellos, para así tratar de mantener la postura. Una puntuación “mala”, según Chalmers, es por debajo de los 45 segundos.

En cuanto a la capacidad para conocer dónde se encuentra el cuerpo en el espacio y medir la flexibilidad, sugirió colocarse sobre una pierna y cerrar los ojos. Se debería permanecer en esa posición por al menos cinco segundos para aprobar la prueba.

Junto con ello, describió un control que tiene una intensidad considerablemente mayor a la de los otros ejercicios mencionados, la cual pone a prueba al ritmo cardiaco.

Se trata de hacer “burpees”, lo que según un artículo de ABC consiste en partir en una posición de cuclillas, colocar las manos en el suelo y mantener la cabeza erguida.

Posteriormente, se deben desplazar las piernas hacia atrás con los pies juntos y hacer una flexión de pecho, con la espalda recta y tocando el sueño con el torso. Después, se recogen las piernas —como en la postura inicial— y se levanta el cuerpo de un salto vertical, con las manos elevadas. Al caer, la idea es que el aterrizaje sea lo más suave posible.

7 pruebas sencillas para evaluar tu estado de salud y prolongar tu longevidad. Foto: referencial.

Si puedes hacer cinco de una sola vez ya se considera como un buen resultado, según Chalmers, mientras que si logras hacer más de 12, ya es “impresionante”, debido a la alta exigencia de este ejercicio.

Y para terminar, incluyó otro para conocer si tu cuerpo está equilibrado. Se trata de pararse con apoyo en una pared, para así mirar tus pies, los cuales deben quedar mirando hacia delante para que “las piernas y las caderas trabajen por igual”. Concretada esa posición, tu cabeza debería tocar la pared.

En caso de que tengas dudas sobre tu estado de salud, es necesario recalcar que siempre es recomendable visitar a un médico para evaluar cuáles son los factores que podrían estar afectando a tu caso particular, además de para conocer qué ejercicios puedes realizar.

7 pruebas sencillas para evaluar tu estado de salud y prolongar tu longevidad. Foto: referencial.