Con el paso de los años, se han convertido en toda una tendencia en las redes sociales. Se trata de decoraciones que adornan los dientes con joyas de fantasía o incluso reales, las cuales pueden tener precios desde cerca de los $60.000 pesos chilenos hasta cifras exuberantemente altas.
Artistas como Madonna, Beyoncé, Rihanna, Rosalía, Miley Cyrus, Pharrell Williams, A$AP Rocky, Justin Bieber y Katy Perry —además de una infinidad de raperos como Travis Scott— han recurrido a ellos, por lo que han influenciado a que numerosos cibernautas compartan videos en plataformas como TikTok, en donde muestran los adornos que llevan en su dentadura.
Si bien, tales accesorios han ganado cada vez más popularidad, diversos especialistas en el área de la salud bucodental han advertido sobre los riesgos de someterse a estos procesos.
Uno de ellos es el presidente del Consejo General de Dentistas de España, Óscar Castro, quien explicó a El País que hay de distintos tipos y materiales, aunque suelen estar confeccionados en oro y plata, además de llevar diamantes en ciertas ocasiones.
“(Están) los que son fijos y requieren de una preparación previa del diente donde van colocados, lo que conlleva desgastar el esmalte y parte de la dentina (un tejido que está debajo del esmalte)”, dijo, para luego añadir que hay otros removibles, “que se mandan a hacer tras una toma de una impresión dental”.
De la misma manera, hay otros en el mercado que ofrecen un tamaño y una forma estándar, los cuales “se adaptan mucho peor al diente”.
Los riesgos de tener joyas en los dientes, según especialistas
Las fundas dentales con estos objetivos son conocidas popularmente como grillz y tienden a ser promocionadas en redes sociales. Pero a pesar de que esta tendencia ha explotado con los últimos años, el encargado de hacer estas decoraciones en Grillz Madriz, Jorge Sánchez, manifestó al citado medio que no es nueva.
“En realidad, se pueden rastrear sus raíces hasta el 2.500 a.C., cuando las mujeres etruscas y las mayas los usaban como un símbolo de riqueza y poder”, aseguró, mientras que “se popularizaron en Estados Unidos gracias a la cultura hip hop y sus artistas” en la década del 80.
Según Sánchez, sus métodos de trabajo con estos accesorios se adaptan a la dentadura de los clientes y pueden ser removibles o permanentes, dependiendo de lo que quiera cada uno.
En cuanto a los riesgos y cuidados, el representante del Servicio de Cirugía Oral y Maxilofacial del Hospital Universitario La Luz, Néstor Montesdeoca, aseguró a El País que dependiendo del tamaño de estas estructuras, se pueden generar daños en la boca y la dentadura de los pacientes.
“Puede variar en función del diseño, desde un simple cementado sobre el esmalte, el menos lesivo, hasta la incrustación, en el que hay que erosionar la superficie dental para fijar la joya”.
Los factores más importantes a considerar
La presidenta de la Sociedad Española de Odontología Conservadora y Estética (SEOC), Isabel Giráldez, explicó que las joyas más grandes pueden requerir que se adelgace el espesor del esmalte para colocarlas, “lo que puede dar lugar a un aumento de la sensibilidad dental”.
Y pese a que hoy son considerados por algunos como un símbolo de la moda, Montesdeoca dijo que no los recomienda.
“Al final los pacientes se cansan, la tendencia pasa y hay que reparar el diente”.
Bajo esta misma línea, Castro enfatizó en que los riesgos de ponerse grillz no son menores, por lo que es necesario que se conozcan las consecuencias de someterse a estos procesos.
“La moda no puede estar reñida con la salud”, afirmó, para más tarde describir que su uso podría aumentar las posibilidades de tener caries, molestias en la boca y alteraciones en el movimiento de la mandíbula. Asimismo, hay casos en donde se podrían presentar alergias a ciertos materiales.
A ello se le suma, según el presidente de la Sociedad Española de Ortodoncia, Juan Carlos Pérez, que “su uso prolongado puede decolorar o teñir los dientes”, además de que si no están bien puestos, “pueden provocar traumas, fracturas, e incluso problemas como la gingivitis, enfermedad periodontal o recesión de las encías”.
Por su parte, Jorge Sánchez de Grillz Madriz recomendó que —en caso de que se decida tomar esta opción a pesar de las advertencias de los especialistas— , siempre se debe optar por profesionales de la salud verificados para estos procesos.
Cabe destacar que siempre es recomendable acudir a un dentista o médico para evaluar cada caso particular y sus eventuales riesgos.