Los puestos con el nombre de la firma figuran en distintas partes del mundo. Y esto también incluye a Chile.
A quienes han pasado cerca de ellos, seguramente les ha llamado la atención la propuesta que ofrece Worldcoin: permitir que escaneen tu iris ocular a cambio de criptomonedas.
En una primera impresión, aquello puede parecer extraño, debido a que se trata de un proceso rápido mediante el cual se promete un beneficio a cambio.
Sin embargo, como es de suponer, responde a proyectos y propósitos específicos.
La compañía fue fundada en 2019 por el consejero delegado de OpenAI, Sam Altman, quien es conocido por ser uno de los grandes impulsores de la inteligencia artificial (IA).
Cabe recordar que programas como ChatGPT, DALL-E y Sora son productos de dicha firma.
No obstante, a diferencia de estas últimas, Worldcoin tiene otro objetivo: reunir datos biométricos para crear una red financiera y de identidad global.
De esta manera, pueden verificar que cada persona tenga una identidad digital única, según detalla Forbes.
Pese a que aquello promete ser útil en tiempos en donde la IA es cada vez más realista y con la capacidad para simular las características de los seres humanos, distintos organismos han alertado que puede poner en riesgo la privacidad.
Los peligros de Worldcoin y la respuesta de la firma
El sitio trasandino Infobae detalla que la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) está analizando un total de cuatro denuncias vinculadas al tratamiento de datos de parte de Worldcoin.
Tales acusaciones están “en fase de análisis” y siguen la línea de la autoridad alemana de supervisión financiera, BaFin, la cual está investigando a la firma por operar de esa manera sin los requerimientos necesarios.
Otros países en los que también se está investigando a Worldcoin son Argentina, Francia y Kenya. En este último, incluso se ordenó la suspensión de sus actividades, según el citado medio.
En España, la Federación de Consumidores y Usuarios CECU ya había advertido el año pasado sobre los potenciales riesgos de entregar datos biométricos.
Esto, debido a que presentan un diminuto margen de error estadístico.
Frente a esta situación, desde Worldcoin aseguran que “los usuarios no tienen que proveer información personal para registrarse”.
“Ni correos, números de teléfono, perfiles sociales o nombres. Todo es opcional”.
De la misma manera, afirman que “ninguno de los datos recolectados, incluidas las imágenes que toma el Orb —el dispositivo con el que se toman los datos biométricos— , han sido o serán vendidas”.
Aún así, el mencionado organismo advierte que con el simple hecho de acceder a la propuesta mencionada “ya estamos dando información de carácter personal y extremadamente sensible”, debido a que “se trata de datos únicos”.
“Si los datos biométricos son robados o suplantados no podemos cambiarlos (...) No podemos, en principio, cambiar nuestros rasgos faciales o nuestro iris”, declararon desde el CECU.
Bajo esta línea, sentenciaron: “Al tratarse de información única de cada individuo, podría permitir la identificación de las personas sin su consentimiento”.