A todos nos ha pasado alguna vez: enciendes un dispositivo para revisar tus redes sociales, ver una película en el streaming, o participar en un videojuego en línea, y la página se demora en cargar o te tira a “error” incontables veces. Aquello puede ser muy frustrante, sobre todo cuando tienes que atender un tema con urgencia.

En Chile, los hogares con acceso Internet fijo llegaron a un 67% a inicios de este año y las preferencias por redes de alta velocidad se posicionan como una tendencia que sigue en ascenso, según datos de la Subsecretaría de las Telecomunicaciones del gobierno.

Si bien, numerosas empresas ofrecen planes que prometen una alta conectividad, es común que situaciones como las descritas anteriormente sigan ocurriendo, a pesar de que hayas contratado la oferta más veloz del mercado para acceder a tus contenidos favoritos.

Internet. Foto: The Irish Times.

¿Por qué? Quizás estás teniendo problemas con tu router, el dispositivo que envía la señal hacia tus otros aparatos tecnológicos. Así lo confirmaron especialistas a El País, en una instancia en la que entregaron recomendaciones para que no tengas que volver a pasar, nuevamente, por estos incómodos episodios.

Las claves para mejorar tu conexión a Internet

Para que el router entregue la señal de manera eficiente a tu computador, teléfono celular, consola de videojuegos o televisor inteligente, es necesario que esté lo más cerca posible de tus aparatos electrónicos, idealmente en el centro de tu casa u oficina.

Según explicaron al citado medio desde la empresa española dedicada a este ámbito, AVM, “lo ideal es que esté en el lugar donde más se utiliza”, como por ejemplo, en tu sala de estar. Asimismo, hay que “asegurarse de que no esté escondido en un armario” u otro sector que pueda dificultar que las ondas lleguen a su destino, lo cual podría afectar negativamente a la velocidad de tu internet.

Videojuego en línea. Foto: Simonkr / Getty Images.

En caso de que la señal sea nula o extremadamente baja, recomendaron apagar el router por diez segundos y luego volver a encenderlo, para que así resuelva eventuales problemas operativos. Si bien, esta medida puede ser útil en algunos casos, no aplica para todos, por lo que en ciertas ocasiones es necesario llamar a un técnico.

Entre los factores que podrían estar dificultando el correcto funcionamiento de tu wi-fi, se encuentra que hayan muchos aparatos conectados. “¿¡Pero cómo!? Si en mi familia somos pocas personas y tenemos escasos artefactos”, podría decir alguien.

Quizás, otros usuarios están usando tu internet sin que te des cuenta, por lo que siempre es recomendable que bloquees este con una clave secreta, para que así solo puedan usarlo quienes la tengan. En este sentido, mientras más dispositivos estén conectados, mayores son las probabilidades de que disminuya la velocidad.

Internet. Foto: Avast.

De la misma manera, sistemas de banda como el 5 GHz ofrecen menos interferencias, mientras que a veces, solo hace falta actualizar el firmware para optimizar el rendimiento, una acción que los expertos sugirieron tener siempre en consideración, ya que ocupa un papel clave en la seguridad.

Si ya probaste cada uno de estos consejos y no ves mejoras en la calidad de tu internet, hay otros a los que puedes recurrir.

Los beneficios de la señal “en malla” y la conexión por cable

Una opción a considerar si vives en una casa grande o con muchas paredes, es la instalación de una red wi-fi de tipo mesh o de “red en malla”, la cual se caracteriza porque amplía la señal por distintos sectores de manera simultánea.

Según informaciones reunidas por El País, la mayoría de los sistemas de esta categoría distribuyen el internet de manera inteligente y considerando factores como la distancia y el número de aparatos a los que está suministrando.

Internet. Foto: Shutterstock.

Por otro lado, también puedes optar por la utilización de un cable ethernet para los dispositivos que están en un lugar permanente, tales como un escritorio o una pared (en el caso de los televisores), ya que este entrega los datos del wi-fi de manera directa y facilita que funcionen más rápido.

Aun así, si los problemas persisten, siempre es recomendable consultar a un especialista de la empresa que te ofrece los servicios, para así barajar otras soluciones.