Actualmente, en redes sociales como TikTok, se pueden encontrar numerosos videos que alertan sobre los riesgos que puede significar comer arroz recalentado.
Aquello tiene sentido, ya que efectivamente hay consideraciones que se deben tener en cuenta.
Sin embargo, los riesgos que se aseguran en las distintas plataformas pueden caer —en ciertos casos— en afirmaciones que se distancian de lo que dicen los especialistas de la salud.
El principal temor en torno al arroz cocido es que, si pasa demasiado tiempo a temperatura ambiente, puede convertirse en un terreno fértil para un tipo de bacteria llamada Bacillus cereus.
Según explicó al New York Times el inmunólogo de la Universidad Nacional Australiana, Si Ming Man, a esta “le encanta crecer en el ambiente cálido y húmedo que proporciona el arroz cocido”.
Junto con ello, dijo que sus esporas tienen la capacidad de sobrevivir al proceso de cocción, por lo que si los alimentos no se mantienen fríos en el refrigerador, pueden crecer y producir toxinas que no se destruyen con el recalentamiento.
Aunque aquello es habitual de ver en las sobras de arroz, también se han visto brotes de Bacillus cereus en filetes, ensaladas de pasta y licuados, entre otras comidas.
Los síntomas de esta afección suelen manifestarse a través de vómitos y diarrea en un marco de 24 horas. Y, generalmente, los signos tienden a desaparecer por sí solos.
La investigadora de la Universidad de California en Davis, Linda Harris, afirmó al citado medio que “lo más probable es que la enfermedad ya haya pasado para cuando decidas hacer algo al respecto”.
No obstante, hizo hincapié en que “la excepción son las personas con sistemas inmunitarios debilitados”.
Dentro de este grupo, entran los menores de 5 años, los mayores de 65, las embarazadas y las personas inmunodeprimidas.
Aún así, especialistas compartieron una serie de recomendaciones para evitar enfermarse, a pesar de que no se esté entre los últimos individuos mencionados.
Lo que debes saber antes de comer el arroz recalentado
Desde el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos aseguran que el arroz cocido debe comerse de 4 a 6 días, mientras que la mayoría de las otras sobras solo llegan a un límite de 4.
Esto, siempre y cuando se hayan guardado en un refrigerador a 4 grados Celsius o menos y no se hayan quedado fuera de este por más de dos horas.
En el caso de que se esté en verano o haya un día altamente caluroso, este último rango se reduce a una hora.
Por otro lado, algunos especialistas consultados por el Times sugirieron no consumirlo después del cuarto día y no recalentarlo en más de una ocasión.
Respecto a cuánto tiempo se puede guardar en el congelador, desde el organismo estadounidense aseguran que puede conservarse hasta seis meses en dicho lugar.
Eso sí, hacen hincapié en que estará más fresco si permanece ahí por menos de dos meses.
La autora del libro de cocina Ever-Green Vietnamese (Ten Speed Press, 2023), Andrea, Nguyen, dijo al citado medio que se debe descongelar en el refrigerador, para después recalentarlo o añadirlo a sopas y guisos que se hervirán a fuego lento.
Para cocerlo en el microondas, la periodista especializada en cocina del periódico neoyorquino, Priya Krishna, recomendó cocerlo al vapor en el mismo artefacto.
Los pasos son: enjuagar el arroz y añadirlo a un tazón grande apto para estos aparatos, con el doble de volumen de agua.
Luego, se debe cocer destapado entre 15 a 25 minutos. El tiempo puede variar dependiendo de la potencia que tenga el microondas.
Cuando el arroz se vaya poniendo esponjoso y baje el nivel de agua, el aparato capturará el vapor como si fuese una olla con tapa, explicó
Por eso, es recomendable que el interior del microondas esté limpio.
Y, para recalentar el arroz frío, el autor del libro sobre este alimento Rice: A Savor the South Cookbook (The University of North Carolina Press, 2021), Michael Twitty, sugirió calentarlo en una sartén con una pequeña cantidad de líquido y aceite “hasta que vuelva a estar esponjoso y vaporoso”.
La idea es que los granos de arroz recuperen la humedad que necesitan, después de la sequedad que adquirieron por estar en el refrigerador.
Cabe recordar que siempre es recomendable acudir a profesionales de la salud y la alimentación para evaluar tu caso particular y las mejores formas de abordarlo.