Este 7 de octubre se cumplió un año desde estalló la guerra en Gaza, un conflicto que ha estado marcado por los ataques cruzados y las constantes amenazas de represalia.
Esa fecha, en 2023, el grupo militante Hamas realizó una ofensiva directa contra Israel que dejó 1.2000 muertos y unos 250 rehenes.
De este último número, se reporta que 101 personas siguen secuestradas.
Frente a la ofensiva, las fuerzas israelíes han respondido con ataques permanentes en la Franja de Gaza, los cuales han provocado más de 41.000 muertes, según denuncian las autoridades sanitarias locales.
La posibilidad de que se concrete un alto al fuego se ve lejana, mientras que el progresivo incremento de las tensiones también ha involucrado a otros países y grupos armados de Medio Oriente.
Actualmente, Israel lleva enfrentamientos con Hamas en Gaza, con Hezbolá en Líbano, con los hutíes en Yemen, con Irán y con milicias chiitas de Siria e Irak.
Cada una de esas partes forma parte del llamado Eje de la Resistencia, una alianza potenciada por las fuerzas iraníes a través de la cual suministran armas, entrenamiento militar y financiamiento a sus aliados, según se acusa.
El principal objetivo explícito de esa red es contrarrestar la influencia de Israel y Estados Unidos en la región.
A lo largo de la guerra, que ya lleva más de un año, Irán ha realizado dos grandes ofensivas directas contra Israel.
La primera se dio el 13 de abril de 2024, cuando sus fuerzas lanzaron alrededor de 300 drones y misiles, como respuesta a un bombardeo contra la embajada iraní en Damasco, el 1 de abril.
El ataque más reciente se dio el 1 de octubre de 2024, cuando lanzaron unos 180 misiles contra el territorio.
Este último se presentó como un acto de represalia por las operaciones terrestres que Israel inició en el sur de Líbano, además de por el asesinato del líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, a finales de septiembre.
Tras dicho episodio de principios de octubre, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, prometió un contraataque, en medio de un escenario en el que las múltiples ofensivas y atentados de las distintas partes a lo largo de la guerra amenazan con una escalada más amplia en la región.
Dos días antes de que se cumpliera un año del conflicto, el exministro de Defensa israelí (entre 2020 y 2022) y presidente del Partido de Unidad Nacional, Benny Gantz, escribió una columna para el New York Times.
En su escrito detalló una serie de puntos que, según el también exjefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa (entre 2011 y 2015), “el mundo necesita entender sobre Irán”.
Qué dijo el exministro de Defensa de Israel sobre Irán
Gantz, en primer lugar, se refirió a los sucesos que ocurrieron el 7 de octubre de 2023 y preguntó abiertamente: “¿Qué esperaban los líderes de Hamas y qué buscan lograr los líderes de Irán?”.
El exministro de Defensa planteó que las autoridades militares y políticas israelíes no pudieron descifrar a tiempo lo que ocurriría con dicho episodio.
Aseguró que un alto comandante de las Fuerzas de Defensa de Israel le dijo al inicio de la guerra: “La información estaba ahí, pero subestimé el componente yihadista del cálculo de Hamas y (Yahya) Sinwar”, el líder del grupo militante.
Según el presidente del Partido de Unidad Nacional, “Hamas interpretó la inestabilidad interna de Israel como una debilidad que impediría la determinación y la capacidad para responder a un ataque”.
“La inteligencia ha demostrado desde entonces que los líderes de Hamas creían que, en nuestro punto más débil, no seríamos capaces de unirnos”, agregó.
En este sentido, acusó que el plan del grupo militante era que, después del ataque del 7 de octubre, los aliados del Eje se unieran en “una guerra regional con el objetivo final de destruir el único Estado judío”.
“Un documento secreto de Hamas, supuestamente descubierto en Gaza, da fe de esa afirmación: escrito por el líder de Hamas el 8 de enero de 2023, en él afirma haber recibido un compromiso de Irán de que el eje se uniría al ataque contra Israel una vez que se activara el plan de Hamas para invadir Israel a través de la inundación de Al-Aqsa”, escribió Gantz, en líneas en las que adjuntó un enlace de un medio israelí en el que se aborda dicho punto.
Bajo este punto, el extitular de Defensa enfatizó que hay “tres razones que respaldan el ataque de Hamas: el fanatismo yihadista, la evaluación de que Israel estaba en un punto de debilidad y la lealtad a Irán y a su eje del mal”.
“Es por estas razones que el 7 de octubre y los posteriores ataques de Irán contra Israel deben servir como una dura advertencia a la región y al mundo sobre las intenciones intransigentes de la república islámica y su perspectiva sobre Occidente”, sugirió Gantz.
También hizo un llamado abierto a “que otras naciones no cometan el mismo error que nosotros y subestimen este componente del cálculo del ayatolá Alí Jamenei”, el líder supremo de Irán.
Cuáles son las preocupaciones que despierta Irán, según el exministro de Defensa de Israel
En su columna para el periódico estadounidense, Gantz aseguró que las alianzas estratégicas de Irán les han permitido construir un “anillo de fuego” conformado por una red de milicias, las cuales tienen “capacidades comparables a las de naciones”.
“Tienen decenas de miles de cohetes, drones y fuerzas de comando listas para atacar. Las mismas capacidades con las que Irán ataca a Israel fueron utilizadas anteriormente por Teherán y sus representantes contra Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos en Yemen”, afirmó.
Y a esto se le suma, acusó Gantz, que buscan desarrollar armamento nuclear.
Desde el gobierno israelí han insistido en esa afirmación y denuncian que Irán utiliza su programa nuclear civil para estos fines.
No obstante, desde Teherán niegan esas acusaciones.
Aunque se presume que Israel cuenta con armas nucleares, sus autoridades se han mantenido más bien reticentes sobre este tópico y nunca lo han confirmado de manera oficial.
Por otro lado, según distintos informes, no se cree que Irán tenga armas nucleares actualmente.
Aún así, Gantz reiteró en su columna para el Times que Teherán “sigue apresurándose para adquirir capacidades nucleares, de manera encubierta y abierta”.
“El líder de Hamas y el ayatolá Jamenei comparten la misma ambición: aniquilar a Israel”, manifestó el exministro de Defensa.
Sin embargo, según él, el líder supremo iraní “solo tuvo una mayor paciencia estratégica, lo que lo llevó a una conclusión diferente sobre el momento adecuado para lanzar un ataque a gran escala” contra Israel.
“No se equivoquen: Irán se está preparando, construyendo y esperando el momento adecuado de debilidad para atacar”, advirtió Gantz.
Bajo esta línea, se refirió a las partes del llamado Eje de la Resistencia y dijo que Teherán “utilizó” a Hezbolá en Líbano para “explotar las dificultades económicas del Estado y fortalecer su presencia nacional”.
“Hizo lo mismo en Siria, en medio de los estragos de la guerra civil siria. Lo hizo también en Yemen, explotando el vacío político y las pésimas condiciones humanitarias, y actualmente está ampliando su alcance, explotando la inestabilidad de la región africana del Sahel”.
Desde la perspectiva del extitular de Defensa israelí, “está claro que Israel debe, y el mundo también debería, ser proactivo frente a la amenaza que el régimen iraní plantea a la existencia de Israel y al futuro de la región”.
“El mundo no puede pasar por alto el papel de Irán en el estrangulamiento de la libertad de navegación y el daño al comercio global en el Mar Rojo o su apoyo tecnológico y militar a Rusia en Ucrania”.
“El régimen y su eje deben hacer frente a un Medio Oriente fuerte y unido, liderado y apoyado por Estados Unidos, que esté dispuesto a tomar la iniciativa para impedir la realización de la visión iraní de un 7 de octubre regional”, sugirió en su columna para el Times.
Junto con detallar una serie de propuestas que, según él, se deberían adoptar para abordar el escenario en la región, recalcó que “ahora es el momento de reforzar la cooperación regional y hacer un amplio esfuerzo para enfrentar a Irán”.