Las fuerzas de Israel efectuaron ataques aéreos contra el territorio de Irán, durante la madrugada (hora local) de este sábado 26 de octubre.

Según informó el ejército israelí, la ofensiva alcanzó alrededor de 20 objetivos, incluidas instalaciones de fabricación de misiles, misiles tierra-aire y otros espacios militares.

Los acontecimientos se presentaron como un acto de represalia por los ataques que Irán realizó el pasado 1 de octubre.

En dicha instancia de principios de mes, sus tropas dispararon cerca de 180 misiles balísticos, de los cuales la gran mayoría fueron interceptados por los sistemas de defensa israelíes.

Esa ofensiva también se presentó como una represalia, después de que las fuerzas israelíes iniciaran operaciones terrestres en Líbano y asesinaran al líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, mediante bombardeos sobre posiciones en Beirut a finales de septiembre.

Las tensiones en Medio Oriente se han intensificado progresivamente desde el pasado 7 de octubre de 2023.

En esa instancia, el grupo militante Hamas realizó una ofensiva directa contra el territorio israelí.

El episodio dejó 1.200 muertos y 250 rehenes capturados, de los cuales alrededor de un centenar siguen cautivos.

Por su parte, el gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu ha respondido con ataques permanentes en la Franja de Gaza.

Las autoridades sanitarias locales denuncian que se han registrado cerca de 42.300 muertos.

Tanto Irán como Hamas y Hezbolá son parte del llamado Eje de la Resistencia.

Se trata de una alianza militar de la que también son parte los hutíes de Yemen, el gobierno sirio y grupos de Siria e Irak.

Según se acusa, la red es potenciada por las fuerzas iraníes y tiene el objetivo de contrarrestar la influencia de Israel y Estados Unidos en la región.

Tras los ataques aéreos del sábado 26 de octubre, surgieron preguntas sobre si Irán optará por responder con una nueva represalia o si más bien evitará hacer otro contraataque directo.

Distintos analistas han planteado que ese primer escenario podría desencadenar una guerra aun más amplia en Medio Oriente.

Sin embargo, el segundo también tendría riesgos estratégicos para Irán, aseguró el editor internacional de la BBC, Jeremy Bowen, en un artículo para el citado medio.

Parecer débil o escalar la guerra: la compleja decisión de Irán tras los ataques de Israel. Foto: avión de la Fuerza Aérea de Israel, antes de participar en ataques en Irán, el 26 de octubre de 2024.

Qué respondió Irán por los ataques de Israel

Después de que Israel efectuara sus ataques aéreos contra Irán, el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, dijo que la ofensiva “no debe ser minimizada ni exagerada”.

También afirmó que las fuerzas israelíes cometieron un “error de cálculo” sobre Irán, que Teherán debe “corregir”, informó la agencia de noticias oficial IRNA.

“No conocen Irán” y “aún no han comprendido correctamente el poder, la capacidad, la iniciativa y la voluntad de la nación iraní”, agregó Jamenei.

Bajo esta línea, sentenció: “Debemos hacérselo entender”.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Esmaeil Baghei, declaró en una conferencia de prensa que Irán “utilizará todas las herramientas disponibles para dar una respuesta definitiva y eficaz” contra Israel.

Junto con ello, desde dicha cartera del gobierno iraní manifestaron que tienen derecho a legítima defensa “tal como lo consagra el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas”.

Previamente, una semana antes de la ofensiva, el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, había advertido que “cualquier ataque contra Irán será visto como el cruce de una línea roja para nosotros”.

“Un ataque de ese tipo no quedará sin respuesta”, advirtió en ese entonces.

Parecer débil o escalar la guerra: la compleja decisión de Irán tras los ataques de Israel. Foto: el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, en un acto el 27 de agosto de 2024.

Cuál fue la reacción de Estados Unidos tras los ataques de Israel a Irán

El secretario del Departamento de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, reiteró el compromiso del país norteamericano para defender a sus aliados en Medio Oriente y evitar una escalada en la guerra.

“Estados Unidos está bien posicionado para defender a las fuerzas, instalaciones y socios estadounidenses en toda la región y está decidido a evitar que cualquier actor explote las tensiones o amplíe el conflicto”, dijo en declaraciones rescatadas por Reuters, después de tener una llamada con su homólogo israelí, Yoav Gallant.

Según una nota emitida por la cartera de Defensa, el jefe del Pentágono afirmó ante este último que “Irán no debería cometer el error de responder a los ataques de Israel, lo que debería marcar el final de este intercambio” de agresiones.

El primer ministro de Reino Unido, Keir Starmer, también se sumó a las declaraciones de Estados Unidos de que Israel actuó en defensa propia, ante la ofensiva con misiles que Irán realizó el pasado 1 de octubre.

“Tengo claro que Israel tiene derecho a defenderse de la agresión iraní”, afirmó la autoridad británica, según rescató la BBC.

De la misma manera, dijo: “Tengo igualmente claro que debemos evitar una mayor escalada regional e instar a todas las partes a que muestren moderación. Irán no debería responder”.

Parecer débil o escalar la guerra: la compleja decisión de Irán tras los ataques de Israel. Foto: el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en una conferencia en Jerusalén, el 2 de septiembre de 2024.

Cómo Irán podría responder a los ataques de Israel

El editor internacional del citado medio, Jeremy Bowen, planteó en su artículo que actualmente Irán se encuentra frente a una compleja situación, en la que sus líderes “tienen que decidir si evitar (una nueva represalia) o (hacerla y) arriesgarse a una escalada aún peor”.

“Deben elegir la opción menos mala de una serie de difíciles opciones. En un extremo del espectro está la opción de contraatacar con otra oleada de misiles balísticos. Israel ya ha amenazado con tomar represalias nuevamente si eso sucede”.

En el otro, Irán está decidiendo si dar por finalizados los destructivos intercambios de ataques directos contra sus respectivos territorios”.

Bowen afirmó que “el riesgo para Irán, si no dispara, es que parezca débil, intimidado y disuadido por el poder militar y la determinación política de un Israel siempre respaldado por Estados Unidos”.

“Al final, es probable que el líder supremo y sus asesores tomen la decisión que, en su opinión, sea menos perjudicial para la supervivencia del régimen islámico de Irán”.

Tras la ofensiva iraní contra Israel de principios de octubre, el presidente estadounidense, Joe Biden, instó al primer ministro Netanyahu a que no atacaran las instalaciones petroleras y/o nucleares de Irán.

Esto, debido a que se presume que una ofensiva de esas características podría desatar una escalada mayor en el conflicto.

El sábado 26 de octubre, las fuerzas israelíes atacaron instalaciones militares, pero no petroleras ni nucleares.

Desde la mirada de Bowen, “la decisión de Israel de no atacar los activos más valiosos de Irán podría, tal vez, darle a Teherán la oportunidad de posponer una respuesta, al menos el tiempo suficiente para que los diplomáticos hagan su trabajo”.

En el marco de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) realizada en septiembre, el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi, sugirió que Irán está abierta a una nueva ronda de negociaciones nucleares “si las otras partes están dispuestas”.

Sin embargo, tras la ofensiva israelí del sábado 26 de octubre, dijo en una carta al Secretario General del organismo que su país se reserva el derecho de responder a la “agresión criminal” de Israel.

Para Bowen, “todo esto debería tener una gran importancia para el mundo, más allá de la región”.

Pese a que Irán ha insistido que no tiene el objetivo de desarrollar armas nucleares, se han realizado acusaciones de que utilizan su programa civil con ese propósito.

“Sus dirigentes deben estar buscando una nueva forma de disuadir a sus enemigos. El desarrollo de una ojiva nuclear para sus misiles balísticos podría estar en su agenda”, sugirió el editor internacional de la BBC.

Respecto a Israel, aunque se presume que cuentan con armas de este tipo, sus autoridades se han mantenido más bien reticentes y nunca lo han confirmado de manera oficial.