El arresto de Pavel Durov en Francia el pasado 24 de agosto ha generado incertidumbre en cuanto al futuro de Telegram.
El CEO de la red social —que fundó junto a su hermano Nikolai en 2013— fue detenido en el aeropuerto de Le Bourget de París, después de que su avión privado aterrizara en el lugar.
Las autoridades lo acusan de cargos relacionados a la difusión de material ilícito en la plataforma.
Más en concreto, según se reportó, se denuncia que no ha tomado las medidas de seguridad suficientes en la aplicación y que no ha cooperado con las fuerzas del orden.
Desde su creación, Telegram se ha posicionado como una aplicación pionera en el ámbito de la mensajería encriptada.
Y ese es uno de los motivos de por qué ha adquirido un papel protagónico en la invasión que Rusia está efectuando en Ucrania, desde el pasado 24 de febrero de 2022.
A lo largo de la guerra, el Kremlin ha utilizado la red social como uno de sus principales canales para hacer anuncios.
De la misma manera, tanto seguidores del gobierno como disidentes han recurrido a la plataforma para compartir mensajes relacionados al conflicto y su desarrollo.
Periodistas independientes, analistas y aficionados del ámbito militar también se suman a la lista, además de soldados que detallan cómo es el escenario en el frente de batalla.
Tales factores han contribuido a que Telegram hoy se presente como una pieza dominante del relato de la guerra.
Así lo sugieren algunos sondeos.
La encuestadora rusa independiente, Levada Center, asegura que al inicio de la invasión un 38% de los ciudadanos rusos usaba Telegram.
En cambio, actualmente, uno de cada dos utiliza la app, ya sea para recibir información o para comunicarse con otros usuarios.
Sin embargo, luego del arresto de Durov, surgieron ciertas dudas sobre el rol que tendrá Telegram.
Cabe recordar que aunque inicialmente el Kremlin trató de restringir la red social—de hecho, entre 2018 y 2020 se hicieron esfuerzos para mantenerla prohibida en el país— luego pasó a ser una de sus vías predilectas de propaganda.
Cómo ha influido Telegram en el relato de la guerra en Ucrania
Después de que el gobierno ruso tomara medidas como prohibir Facebook, Instagram y medios independientes opositores, muchos ciudadanos comenzaron a utilizar la aplicación para ver noticias sobre la guerra.
Según un sondeo del Levada Center, uno de cada cuatro rusos lee cada día los foros de mensajes públicos de Telegram, a través de los cuales pueden acceder a una visión del conflicto distinta a la que entrega el Kremlin.
Hace cinco años, la cifra era de solo un 1%.
Parte del creciente interés hacia Telegram también se ha debido a que los mensajes son encriptados, por lo que prometen una mayor seguridad y privacidad para los usuarios.
Dicho factor es especialmente atractivo en el contexto de una guerra, en donde los opositores se ven enfrentados a la represión y en el que existe una lucha de versiones opuestas en cuanto a lo que ocurre en el combate.
Quienes están en contra de la guerra a menudo utilizan la red social para informar sobre las consecuencias de la ofensiva que desató el mandatario Vladimir Putin.
Por otro lado, quienes están a favor de la invasión suelen usarla como una vía para difundir propaganda afin al discurso del Kremlin.
También han surgido cuentas que, durante el transcurso del conflicto, han acumulado millones de seguidores por compartir opiniones y/o informaciones sobre esta situación.
Además, según rescata el New York Times, se han visto voluntarios que la usan para recaudar fondos para los soldados y para ayudar a evacuar a los civiles que están en zonas de mayor riesgo.
En Ucrania también tiende a ser utilizada para recibir alertas de ataques aéreos, ya que muchos consideran que puede ser una forma más rápida que la aplicación del gobierno.
Uno de los puntos más relevantes sobre el uso de Telegram en esta guerra es que soldados que están en el frente la usan para mostrar cómo se desarrollan los combates y movimientos en terreno.
Esto último ha dado pie a que se difundan ciertos registros de carácter altamente violento y explícito.
Junto con ello, las tropas rusas han recurrido a la red social para comunicarse entre ellas.
Uno de los casos que más resalta en cuanto al uso de Telegram para difundir contenidos es el de Yevgeny Prigozhin, fundador del Grupo Wagner que murió en agosto de 2023.
El líder de la organización de mercenarios usó la plataforma para anunciar su breve levantamiento contra las autoridades rusas y subir registros de los avances de sus efectivos hacia Moscú.
Aquello fue visto tanto en Rusia como en el extranjero, ya que aunque Telegram es especialmente popular en dicho país, Ucrania y los estados de la ex Unión Soviética, también cuenta con numerosos usuarios alrededor del globo.
Desde la app informaron a inicios de 2024 que cuentan con más de 900 millones de usuarios a nivel mundial.
Después de que se confirmara la detención de Durov en Francia, algunos analistas consultados por el citado medio estadounidense plantearon que podrían presentarse complicaciones en la recaudación de fondos de la compañía.
Asimismo, otros sugirieron que sus políticas de privacidad podrían verse alteradas, ya que las fuerzas policiales están buscando acceso a la base de datos de chats privados.
Esto se debe a que parte de las acusaciones en contra de Durov se centran en no entregar información ni tomar las medidas suficientes para evitar casos de tráfico de drogas, fraude y contenido sexual infantil, según rescata la BBC.
Por lo tanto, se espera que lo que ocurra con la investigación también afecte al rol de Telegram como un espacio para el relato de la guerra.
Según informó el canal de la red social cercano al Kremlin, Baza, funcionarios de seguridad del país ya han recibido órdenes de eliminar la aplicación de sus celulares.