Esta semana se registró una catástrofe natural en el norte de África. El paso de la tormenta Daniel por las costas de Libia ha dejado miles de muertos y ciudadanos desplazados, además de daños y destrucción en las infraestructuras.

Solo entre el domingo y el lunes cayeron 414 milímetros de agua en la ciudad de Al Baida, cifra que equivale a un año y medio de precipitaciones habituales.

En Derna el escenario no ha sido distinto. La ciudad ha sido fuertemente afectada por las inundaciones, lo que provocó el colapso de dos represas y facilitó que el agua se expandiera por la zona.

Asimismo, los vientos llegaron a adquirir velocidades de entre 70 y 80 kilómetros por hora, lo que agudizó un escenario de riesgo para la población.

Según el Centro Meteorológico Nacional del país africano, se trata de las peores inundaciones que han enfrentado durante los últimos 40 años.

Pero, ¿qué es exactamente este fenómeno que dejó Grecia para llegar a este territorio?

Qué hay detrás del “medicán”, el huracán en el Mediterráneo que explica la tormenta que dejó inundaciones en Libia. Foto: Inundaciones en Libia.

Qué es un “medicán”

La tormenta Daniel ha sido calificada por especialistas como un ciclón mediterráneo o “medicán”, término que surge de la unión entre las palabras “Mediterráneo” y “huracán”.

“Este fenómeno híbrido muestra algunas características de un ciclón tropical y otras de una tormenta de latitudes medias”, precisaron desde la Organización Meteorológica Mundial.

Por otro lado, el meteorólogo de la BBC, Chris Fawkes, explicó en su medio que “son iniciados por la corriente en chorro, que trae aire frío muy por encima de la superficie de la Tierra y provoca estas tormentas”.

“Una vez que se forma, se desarrolla un área de baja presión, que se alimenta de las aguas cálidas del Mediterráneo y el sistema adquiere características más parecidas a las de una tormenta tropical”, añadió.

Junto con ello, dijo que se caracterizan por traer fuertes vientos y por ocurrir con mayor frecuencia en la zona occidental del Mediterráneo.

Es precisamente por eso que lo ocurrido en Libia es más bien poco común en ese sector.

Si bien, los medicanes tienen aspectos en común con los huracanes y los tifones, tienen algunas diferencias clave.

Entre ellas se encuentra que suelen ser de menor tamaño, que ocurren más comúnmente entre otoño e invierno y que pueden desatarse cuando la temperatura de la superficie del mar se encuentra hasta a 15ºC.

Por otro lado, un huracán tradicional requeriría que dicha cifra sea por encima de los 26ºC.

También, los medicanes se diferencian porque tienden a moverse de oeste a este, a diferencia de los huracanes en el océano Atlántico, que lo hacen de este a oeste.

Qué hay detrás del “medicán”, el huracán en el Mediterráneo que explica la tormenta que dejó inundaciones en Libia. Foto: "Medicán".