El Mar de China Meridional ha enfrentado cambios significativos en los últimos años, específicamente en el sector de las Islas Spratly.
Se trata de un archipiélago que se encuentra entre Vietnam y Filipinas, al sur del territorio presidido por el mandatario Xi Jinping.
Ya hace una década, China desarrolló en la zona una campaña de construcción de islas para ganar presencia y asentar bases militares.
A pesar de que Vietnam inició sus operativos en este ámbito en 2021, las tensiones en esta parte del globo han llevado a que aceleren sus planes.
Para finales de 2024, presumen la creación de más de 1.000 acres de nuevas tierras ahí.
La medida se presenta como una respuesta al expansionismo marítimo de China.
Un total de cinco funcionarios vietnamitas anteriores y actuales declararon al Washington Post que el gobierno se ha enfocado en “consolidar” puestos de avanzada con fines de autodefensa.
De esta manera, esperan contribuir a su estrategia para contrarrestar amenazas a su seguridad.
La intensificación de sus operaciones ha llevado a que, en un periodo de tres años, hayan multiplicado por diez su superficie en las Spratly.
El director general de planificación de políticas del Ministerio de Asuntos Exteriores de Vietnam, Le Dinh Tihn, dijo al periódico estadounidense que recurrirán “a todos los medios posibles para asegurarnos de que podemos defender y salvaguardar nuestros intereses legítimos en el Mar del Este (como denominan al Mar de China Meridional)”.
Enfatizó que las medidas que están tomando en las Spratly están “completamente dentro de los derechos legítimos” de su país.
Le Dinh Tihn hizo hincapié en que, aunque desean una solución pacífica para las disputas marítimas, han debido tomar acciones ante las tensiones que se han dado principalmente entre China y Filipinas.
Cuál es la relevancia de las islas y del Mar de China Meridional
Para el país del mandatario Xi Jinping, dominar el Mar de China Meridional tiene una alta relevancia estratégica, debido a que alberga una de las principales rutas marítimas del mundo y es rica en recursos.
Tales características han llevado a que la zona se posicione como un punto de interés para distintos actores de la región.
Filipinas, en específico, cuenta con un tratado de defensa mutua con Estados Unidos, por lo que una gran escalada de los roces podría incrementar las probabilidades de un conflicto mayor.
En las islas que China tiene bajo su control en las Spratly, poseen bases militares que tienen sistemas de misiles antibuque y antiaéreos, además de aviones de combate y radares.
Es en parte por esto que Vietnam ha optado por construir y ampliar los puestos de avanzada que tenían, afirmaron los funcionarios de ese país.
Hasta agosto de 2024, el más grande que poseen está en el arrecife Barque Canada, el cual han duplicado en tamaño a 492 acres desde noviembre de 2023, es decir, en apenas unos meses.
Este posee una pista de aterrizaje de 3.000 metros, por lo que puede ser ocupada por grandes aviones militares y de transporte, detalla un análisis de imágenes realizado por el Asia Maritime Transparency Initiative (AMTI).
Dicho organismo forma parte del Center for Strategic and International Studies (CSIS), con sede en Washington D.C., Estados Unidos.
Para desarrollar estos puestos, han recurrido a maquinarias como dragas de succión, que les permiten crear canales y puertos para barcos.
El subdirector del AMTI, Harrison Prétat, dijo al Post que también han construido “estructuras de defensa costera”.
De la misma manera, el analista militar con sede en Hanói (la capital vietnamita), Ha Hoang Hop, explicó que con estas operaciones pueden desplegar más embarcaciones y efectivos en las Spratly.
Aquello les permite fortalecer su presencia en la zona en disputa.
Junto con ello, detalló que los puestos poseen sistemas de radar y radio que permiten identificar los movimientos de los buques chinos.
Y aunque China sigue teniendo un mayor control en la zona, las medidas que han tomado reafirman su compromiso de defender sus espacios marítimos, aseguró al citado medio el investigador del American Enterprise Institute, Zack Cooper.
El analista especializado en Asia del International Crisis Group, Huong Le Thu, planteó al Post que la estrategia que está empleando Vietnam se traduce en una alerta, una forma de decir “no nos presionen demasiado”.
A pesar de las tensiones que se viven en la región, China y Vietnam han tratado de acercarse por la vía diplomática.
Cabe recordar que ambos países son socios comerciales.
De hecho, en diciembre de 2023 el mandatario chino visitó Hanói para firmar acuerdos bilaterales.
En ese momento, desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de China afirmaron que ambas facciones “tienen ideales y convicciones comunes y disfrutan de un futuro compartido”.
Asimismo, el pasado 18 de agosto de 2024, el mandatario vietnamita To Lam inició su visita a China, instancia de tres días para la que se acordó una reunión con Xi Jinping y otros altos mandos locales.
Por su parte, Estados Unidos también ha reforzado sus relaciones con Vietnam, hasta el punto en que transfirieron dos guardacostas y empezaron a entregar 12 aviones de entrenamiento como parte de un paquete de asistencia de seguridad y venta de armas, según los informes del Departamento de Estado.
Desde la Embajada del país norteamericano en Hanói prefirieron no hacer comentarios sobre la construcción de las islas por parte de Vietnam.
No obstante, los funcionarios dijeron que están “preocupados por un cambio en el status quo” en las Spratly y que apoyan la defensa de la soberanía de Vietnam.
Las operaciones de este país en el Mar de China Meridional también han contemplado una ampliación de su milicia marítima y una mejora en los barcos de pesca comercial, según los especialistas.