Denise Rosenthal: "Espacios como Viña son fundamentales para una nueva sociedad"

En un verano como este hace doce años, Denise Rosenthal se subió por primera vez a la Quinta Vergara. "Lo pasé bien mal", dice sin ambigüedades la cantautora sobre su debut en el Festival de Viña con el grupo adolescente Amango, la versión en vivo de la serie de televisión donde interpretaba a Fernanda McGellar. Y aunque reconoce que aquel show de 2008 fue incómodo y que sufrió "una crisis de pánico", dice que al mismo tiempo fue una experiencia reveladora, el instante en que se dio cuenta que debía emprender una búsqueda personal como creadora.

"Marcó un antes y un después en mi desarrollo como persona, como ser humano y como profesional".

Más de una década después, la cantante regresa al escenario que vio morir a la "Feña" y nacer primero a D- Niss y luego Denise Rosenthal, el nombre propio con el que ha timbrado dos discos y una personalísima propuesta musical, estética y discursiva, con el empoderamiento feminista, la autoaceptación y el cambio de conciencia como banderas.

De la mano de éxitos como "Agua segura" y "Tiene sabor" - adelantos de un tercer álbum anunciado para este año- y un equipo de trabajo que desde 2018 sólo integran mujeres, la solista llega esta noche al certamen con un "espectáculo de primer nivel" y la experiencia adquirida en estos años.

"Esto es la consolidación de un proceso que lleva muchos años y da pie para seguir adelante con otras metas y desafíos que me he propuesto", resume la artista, quien además de Viña estará en marzo en Lollapalooza, los dos mayores festivales de la cartelera y, hoy en día, también los más cuestionados por quienes los consideran una instancia de frivolidad en días complejos para el país.

Rosenthal, quien esta semana ha aprovechado su rol de jurado para visibilizar en su vestimenta a mujeres importantes en la historia de Chile, tiene una opinión distinta.

"Mi sensación es que es importante reivindicar estos espacios culturales, artísticos y populares, para poder efectivamente generar contenidos. Aprovechar esas oportunidades para empezar a construir una industria y una comunidad que sea más amena con nuestros propios exponentes, para empezar a valorar también nuestra cultura".

-¿Se hace más difícil lograr lo anterior tras el estallido, con un Festival fuertemente cuestionado por algunos?

-Es a mi modo de ver una situación compleja, es cierto, y nosotros somos trabajadores al igual que el sinfín de personas que está trabajando en el Festival. Todos y todas estamos conscientes de que la región de Valparaíso específicamente tiene muchas deudas en cuanto a las demandas sociales.Aquí estamos con problemas con la privatización del agua, con los campamentos. Pero si bien estamos de acuerdo en poder construir una sociedad más justa y equitativa, estos espacios culturales también son necesarios para sanar, congregar, para volver a reunirnos y entender, como dijo Kramer, que pese a nuestras diferencias todos y todas queremos vivir en un país más justo.

-¿Está de acuerdo con las "funas" del público a los artistas?

-La gente está construyendo su propia realidad y creo que también es un derecho. Uno como artista debe aprender de todas las desilusiones y fracasos y de lo que la gente está comunicando. Ricky Martin lo decía: hay que escuchar a quienes quieren decir algo. Es un tema delicado, a nadie le gustaría que eso le sucediera en su carrera, pero significa también que ese artista debe hacerse cargo y generar ese cambio interior que es necesario. La gente hoy quiere generar cambios y formar parte de su construcción, y estos espacios donde la gente puede expresar su opinión son fundamentales para el desarrollo de una nueva sociedad.