Teóricos de los estados exóticos de la materia reciben Nobel de Física

Un bollo de canela, un bagel y un pretzel ayudaron a Thors Hans Hansson, del comité Nobel de Física de la Real Academia Sueca de las Ciencias, a explicar la topología, concepto clave para entender el trabajo de los ganadores del Nobel de Física 2016: los británicos David Thouless (82), de la U. de Washington, Duncan Haldane (65), de la U. de Princeton, y Michael Kosterlitz (73), de la U. de Brown.

La topología es una rama de las matemáticas que estudia las propiedades geométricas que no cambian al deformar un objeto, siguiendo con el ejemplo del pretzel, al ser clasificado topológicamente siempre tendrá dos agujeros cualquiera sea la forma que se le quiera dar, a no ser que sea cortado. La incorporación de esa área a la física permitió estudiar las fases o estados inusuales de la materia.

"El premio llega en un momento en que hay gran interés en este tipo ideas. Era algo esperado largamente, extrañaba que no los reconocieran con un Nobel", dice Luis Foá, físico de la U. de Chile.

Los trabajos por los que fueron galardonados fueron realizados en los 70 y 80, y algunos permanecieron relativamente olvidados por la comunidad durante décadas, hasta que adquirieron un nuevo impulso con el descubrimiento de los aislantes topológicos en 2007, explica.

"No fue un boom en esos momentos, no había capacidad para demostrarlo. Ahora se ha comenzado a hacer en laboratorio, con aisladores y superconductores topológicos. Se produjo el boom y revalorización", agrega Enrique Muñoz, físico de la U. Católica.

Un ejemplo de comportamiento exótico está en los materiales superconductores que, a temperaturas muy bajas (cerca de los grados Kelvin, -273 ºC), pueden volverse conductores eléctricos perfectos. "Es algo evidente en el material mismo, sin embargo, el origen de ese comportamiento raro -que la resistencia de ese material se vaya a cero (que no tenga resistencia)- está en la naturaleza cuántica de las partículas, en este caso de los electrones, que constituyen este material", señala Muñoz. Ello no podía explicarse antes de los trabajos del trío de británicos.

Las aplicaciones de estos estudios, incluyen los mismos superconductores y los aislantes topológicos, que podrían ser usados en dispositivos electrónicos más eficientes; para hacer medidas ultra precisas y en computación cuántica, entre otros.

Ni mujer ni LIGO

Tras el anuncio de la detección de las ondas gravitacionales, en febrero, se esperaba que el equipo de LIGO sería un fuerte candidato al premio, sin embargo, el estudio fue publicado fuera del plazo considerado por la Academia, por lo que quedó fuera esta vez. También seguirán esperando las mujeres, pues ninguna física ha sido galardonada en 53 años.