El mejor futbolista de 2019, según los capitanes y técnicos del fútbol chileno, fue José Pedro Fuenzalida (34). El Chapa. El polifuncional. El ídolo y capitán de Universidad Católica. Uno de los goleadores del bicampeón, pese a no ser delantero.

Son las 13.30 del miércoles 22 cuando el referente cruzado llega hasta las instalaciones de La Tercera, donde recibió de parte del director del diario, José Luis Santa María, el premio que lo consagró como el mejor de los mejores. "Muchas gracias por este reconocimiento", dice el seleccionado, aún algo agotado tras una intensa práctica en San Carlos de Apoquindo.

Hoy, después de más tres meses, vuelve el Torneo Nacional, que no pudo concluir en cancha su edición anterior debido a la falta de garantías y a la violencia de las barras bravas. "Uno igual tiene que ser consciente de lo que pasó el año pasado. Hay un estallido social que explota en octubre y que afectó a toda la industria. Como Católica queríamos una definición en cancha, pero las condiciones no iban a ser las mismas. No podíamos pretender jugar con estadio lleno, porque no estaba el ambiente. Me habría gustado que se definiera en cancha. Habría sido bueno y deportivamente mejor. Empezaremos un nuevo torneo y no tengo dudas de que estamos en condiciones de desarrollar un torneo normal. Todavía la condición del país no está bien, pero la idea es que las cosas que se están cambiando, más el plebiscito de abril, se vayan solucionando. He visto muy buena recepción de la gente. Creo que quieren ver fútbol. Y también creo que jugar fútbol no va de la mano con las cosas que todos queremos que cambien", reflexiona el futbolista.

¿Quién será la figura del certamen que comienza hoy, cuando Everton reciba a Universidad de Concepción? El Chapa lo tiene claro. "Espero que sea nuestro goleador, que sea uno de nuestros delanteros. Eso va a implicar, probablemente, que hayamos cumplido los objetivos. Creo que esto es un trabajo en equipo y siempre me ilusiono con que tengamos al mejor jugador, al mejor central, al mejor arquero, al mejor volante, dentro de los balances del año. Apostamos a que nuestro fútbol genere eso, que tengamos los mejores números", señala con esperanza.

Y claro, si el portador de la jineta cruzado es muy optimista con respecto al trabajo de Ariel Holan. El técnico argentino le recuerda nada más y nada menos que a Marcelo Bielsa, por su forma de trabajar. "Él viene del hockey, lleva poco tiempo en el fútbol y viene con otra mentalidad. Es mucho más estratégico en cuanto a cómo ve el fútbol y eso a mí me gusta mucho. Me gusta el análisis de los partidos, cómo vamos a enfrentar al rival, que es algo que hoy ya se ocupa mucho. Nosotros lo empezamos a vivir cuando llega Bielsa a Chile y esto es un poco de esa misma línea. Creo que es algo muy positivo, porque se trabaja mucho durante la semana. Holan es de la misma línea, con mucha planificación y trabajos con mucha intensidad, de mucha coordinación entre los compañeros. Se busca achicar el margen de error durante los partidos", explica.

"Creo que hemos dado un salto en el tema de la intensidad. Holan también viene del fútbol argentino, donde la intensidad va incluso por sobre la parte futbolística, lo que lo hace también muy competitivo. Es algo que a nosotros también nos puede ayudar mucho y estamos trabajando en eso. No ha sido fácil adaptarse a un nuevo técnico por cuarto año seguido, con una idea distinta, pero el proceso ha sido muy bueno. Creo que la evolución del equipo, desde el primer día hasta ahora, ha sido muy positiva en cuanto a la intensidad de los entrenamientos y a la calidad. Vemos muchos videos, hemos aprendido muchas cosas nuevas, tácticas o técnicas que se nos piden. La ilusión de todos es llevar eso a la cancha", sostiene.

Para el diestro, hablar en estos momentos de equipos candidatos al título es mera especulación. "Hay algunos que se han reforzado con 17 jugadores. Recién en la séptima u octava fecha podremos ver qué equipos están para pelear el campeonato", advierte.

"Por nombres, los tres equipos grandes se reforzaron con un 9, lo que quiere decir que están buscando eficacia en el arco rival, ganar los partidos. Han habido muy buenas vueltas: Matías Fernández en Colo Colo, Montillo en la U. Deportivamente le va a hacer bien al espectáculo, pero espero que los jugadores que llegaron a Católica sean los mejores. Al ver cómo llegó Gastón Lezcano, cómo está Fernando Zampedri, creo que pueden ser jugadores muy importantes para nosotros. Esperemos que ellos suban su nivel al máximo y sean las figuras de sus puestos a fin de año", confiesa el Chapa.

El ranking de la IFFHS ubicó a Chile como la peor competencia de la Conmebol. ¿Qué piensa el bicampeón de Copa América al respecto? "No sé el parámetro, creo que es por torneo internacional. Si es así, podría ser, no hemos tenido buenos rendimientos. Mi análisis del fútbol chileno es que acá se juega buen fútbol, pero tenemos un tema de intensidad, que es distinta. Por ahí, en torneos internacionales, hay otras ligas donde se juega menos fútbol, pero que son mucho más intensas y con eso nos marcan una diferencia. En las copas internacionales no te dejan jugar tanto y hay que salir con los dientes más apretados, sobre todo de visita", analiza.

Justamente, uno de los objetivos para la UC este año es hacer un buen papel en la Copa Libertadores, aunque también tiene la meta del tricampeonato. ¿Cuál es el más trascendental? "Creo que los dos. Tenemos cuatro desafíos importantes todavía. La Copa Chile 2020; después el Torneo Nacional, que todos los años apuntamos a eso y que para mí es lo más importante, porque se juega todo el año, semana a semana; también tenemos la Supercopa, que aún no tiene fecha, pero que también la queremos ganar; y el gran desafío que tenemos como fútbol chileno, más allá de representar a Católica, es la Copa Libertadores, donde tenemos un grupo muy difícil. Tenemos la ilusión de que, con la propuesta que estamos entrenando, podamos alcanzar un buen nivel y competir a nivel internacional", señala.

"Creo que el torneo que va a empezar tiene la misma importancia de cada año. Claramente, dentro de las consecuencias positivas de ganarlo está el tricampeonato, que sería algo soñado, pero no hay que pensar en eso. Lo único que me importa es salir campeón. Si salimos campeones, lo otro va de la mano", añade.

"Siempre es un equipo especial, porque de local se hace muy fuerte, tiene mucha tradición. Es un partido duro, de visita, en un estadio que siempre ha sido difícil, pero estamos bien preparados", asevera.

Fuenzalida termina contrato en junio de este año. Es decir, Católica podría quedarse sin su principal líder a mediados de año. El Chapa se toma con calma su futuro. "Tenemos conversaciones fluidas con Católica, pero me gusta tomarme mis tiempos, ir viendo, me gustan los desafíos, sentirme cómodo. No voy a estar en ningún lugar mejor que en Católica, pero vamos a ir viendo a medida que pase el tiempo", advierte, siempre cauteloso.

Ya son las 14:20 y luego de casi una hora, Fuenzalida abandona Copesa, no sin antes sacarse decenas de fotos, firmar autógrafos y grabar videos de varios fanáticos que aparecen en el camino. Su esposa, junto a una de sus hijas, llega a buscar al ídolo de la UC que le dio el puntapié inicial a Torneo 2020, donde espera consagrarse una vez más.