Máximo jefe de la institución policial partió junto a un grupo de generales durante la madrugada rumbo a la zona donde fueron emboscados los funcionarios policiales.
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Bajo siete llaves está el discurso que leerá este sábado la máxima autoridad de Carabineros, quien vive días complejos por su inminente formalización -el 7 de mayo- por su presunta responsabilidad de mando en violaciones a los DD.HH. ocurridas durante el estallido social. En su círculo íntimo aún está la expectativa de que un ministro de fuero paralice el caso en los próximos días, ganando tiempo para su objetivo final: llegar al 19 de noviembre y terminar su mandato.
El titular del tribunal de alzada había sido designado este jueves por la propia Corte para analizar esta medida precautoria, con la cual el general director de Carabineros pretende suspender la tramitación de la causa en su contra y preparar una demanda contra el Ministerio Público.
“Las personas que tenemos cargos directivos, a nivel nacional, tenemos algo que no lo tienen todas las autoridades, que es la confianza del Presidente de la República”, afirmó la máxima autoridad de Carabineros.
La fiscal Ximena Chong no asistió, por encontrarse en juicio contra un exintegrante de las Fuerzas Especiales de Carabineros, y el fiscal regional Centro Norte, Xavier Armendáriz, no cruzó ni miradas con la máxima autoridad de la policía uniformada a quien formalizará el próximo 7 de mayo. Quienes estaban presentes califican su visita a la ceremonia como "protocolar" y "fugaz", ya que fue la última autoridad en llegar y la primera en irse. Se le vio incómodo en el seno de la institución que tiene en sus manos su futuro judicial. El alto oficial redacta su renuncia, siempre y cuando nada pase de aquí hasta que sea imputado.
Desde la bancada opositora precisaron que su respaldo al mandamás de Carabineros “no permite pasar por alto la injusticia y la miseria con la que el gobierno y otros actores estatales han actuado en contra”.
El ministro del tribunal de alzada será el encargado de revisar los antecedentes del recurso con el que el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, busca que se suspenda la causa en contra, ya que a su juicio el delito que se le imputará no existe.
"No puede pretenderse que la acción de amparo se erija en un instrumento que propicie la revisión por vía no destinada al efecto de lo actuado por un tribunal", se señala en el fallo del tribunal de alzada. Más temprano, la defensa de la autoridad policial ingresó en la Corte de Apelaciones de Santiago una orden de no innovar en la que solicita suspender su formalización.
El general director de Carabineros busca por todos los medios legales no llegar al 7 de mayo. Ese día la Fiscalía le imputará el delito omisivo de apremios ilegítimos y homicidio durante el estallido social, motivando su salida forzada de la institución; sin embargo, aún se resiste a esa idea y en 72 horas ya ha hecho cuatro presentaciones judiciales. El objetivo es claro: lograr llegar a noviembre y ser el primero -en 14 años- en poder finalizar su periodo al mando de la institución y no engrosar la lista de lo que hoy llaman -entre los uniformados- como “la maldición del uno".
El general director de Carabineros participó de una actividad junto al subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara. “Hablar de mi permanencia o no en el cargo creo que está absolutamente fuera de lugar", expresó.
Antes recurrió al TC sin conseguir aplazar la audiencia del 7 de mayo y presentó también un recurso de amparo.
El jefe de la policía uniformada alista su salida luego de que el TC rechazara suspender la formalización en su contra. Aunque un último camino que activó con el recurso de amparo, la decisión ya está tomada si es que todo sigue su curso para el 7 de mayo. Por estos días busca el proceso menos "traumático" para la institución, pues vivirá la cuarta salida forzada de los últimos tres generales directores que lo antecedieron, en lo que algunos llaman "la maldición del uno" o del "cuatro estrellas". El 3 de mayo asoma como su último día como máxima autoridad de la institución.
La portavoz del Ejecutivo, en una entrevista televisiva, planteó que la doctrina Tohá "es un criterio político para todos, incluido el general director” de Carabineros. "Básicamente es una definición política del gobierno que busca no distraer a instituciones clave, en este caso para la seguridad, frente a eventuales formalizaciones o procesos de formalización", dijo.
Abogados piden “que se otorgue un plazo razonable para preparar la defensa material”.
“Más allá de las personas y más allá de las relaciones o la evaluación política que uno pueda tener de las personas a cargo de las instituciones, o los juicios los que enfrentan, nos interesa resguardar la estabilidad de las instituciones", sostuvo la vocera del Ejecutivo.
