Carreras clandestinas: el problema aún sin freno para Lo Barnechea y Vitacura
Vecinos del sector oriente han denunciado la presencia de autos transitando a más de 160 kilómetros por hora. Los municipios han tomado acciones de fiscalización para identificar a los responsables, lo que ha llevado a una disminución de las carreras, aunque no su completa erradicación. Desde Vitacura apuntan a la responsabilidad de las autopistas para ayudar a identificar a quienes corren a exceso de velocidad.
El pasado fin de semana largo las alarmas se encendieron entre los vecinos del sector oriente de la Región Metropolitana: poco antes de la medianoche del sábado, cerca de una estación de servicio en el sector de Los Trapenses, en Lo Barnechea, autos de alta gama se estacionaban a la orilla de la calle, en fila, uno tras otro, como esperando una bandera o luz verde para partir.
Minutos después, así fue. Los vehículos iniciaron su recorrido a alta velocidad por Avenida José Alcalde Délano, para luego bajar por calle Santa Teresa, pasando y esquivando a autos comunes y corrientes que a esa hora transitaban por el sector, para luego seguir el recorrido por Costanera Norte, traspasando el límite comunal hacia Vitacura.
El reporte del suceso, originado por desórdenes en el sector, dice que todo se originó a las 23:42 horas, cuando un llamado al 1405 comunal de Lo Barnechea alertó de una “aglomeración de vehículos en el servicentro Copec”, según se lee en la descripción, lo que obligó a trasladar personal de seguridad a la zona.
Al llegar al lugar, el personal pudo ver que se mantenía “gran cantidad de vehículos deportivos con la finalidad de efectuar carreras clandestinas”, y que “al momento de la llegada de personal (...) los asistentes al encuentro en conjunto con los vehículos abandonan el lugar en dirección hacia Vitacura. Una vez retirados la gran mayoría de los asistentes del encuentro, personal normaliza los medios”.
El problema es que eventos de este tipo no son nuevos. Las carreras clandestinas han estado en la retina de los municipios de la zona desde hace un tiempo, específicamente de Vitacura y Lo Barnechea.
La primera, liderada por la alcaldesa Camila Merino (Evópoli), desde comienzo de este año ha iniciado una serie de fiscalizaciones en la Copec de Cerro Alvarado -acompañados de Carabineros y equipos de fiscalización del Ministerio de Transportes (MTT)-, donde han logrado constatar que algunos vehículos que realizan esta actividad no cuentan con sus documentos al día, están bajo la influencia del alcohol o incluso se desplazan a una velocidad sobre los 160 kilómetros por hora, es decir 60 km/hr por sobre lo permitido.
Según entendidos en el tema, esto ha ayudado a controlar el desarrollo de las carreras ilícitas en las zonas. Incluso, en comparación con el año pasado, estas han disminuido notoriamente.
Una acción similar se ha tomado en Lo Barnechea, donde el alcalde Cristóbal Lira (UDI) instaló en abril de este año un control en el sector Copec de Los Trapenses para frenar las carreras clandestinas. En rigor, el servicio preventivo contó con la instalación de drones en la zona durante los días 25, 26 y 27 de ese mes, los cuales patrullaban la zona luego de ser alertados por vecinos.
Lo mismo se desarrolló en distintas fechas durante mayo y en agosto, cuando nuevamente se denunciaron aglomeraciones de vehículos en la zona. Desde el municipio respaldan que tales acciones llevaron a una disminución de las denuncias por carreras clandestinas: si en mayo y abril se registraban 12 y 3 llamadas denunciando este tipo de hechos, respectivamente, en mayo la cifra bajó a 4; junio a 3 y julio a 3.
“Desde abril dispusimos de una estrategia preventiva, a través de drones y personal municipal que permitió identificar días y horarios en donde se concentraban automóviles en estaciones de servicio para realizar estas carreras. A partir de esa información focalizamos nuestra oferta de seguridad y copamos dichos lugares, lo que nos permitió desactivar muchas de esas actividades y disminuir su ocurrencia. Clave también ha sido la colaboración de nuestros vecinos que han reportado oportunamente algunos focos para tomar las medidas correspondientes”, detalló el alcalde Lira.
Aun así, desde el círculo de Vitacura afirman que lo desarrollado es lo que que está dentro de sus facultades como municipio, esto no es suficiente para erradicar por completo la actividad. Ahí Merino apunta al rol que deben cumplir las autopistas al facilitar tecnología para identificar a los responsables, ya que por ahí transitaría cerca del 1% de los autos en velocidad temeraria.
“Hoy las autopistas miden la velocidad, con eso se pueden acreditar los autos que van a una velocidad temeraria y que hoy día es delito; que se exponen a penas de cárcel y también a quienes se les puede quitar la licencia de por vida. Es importante ocupar lo que ya tenemos y para eso hay una mesa de trabajo hoy con la autopista, especialmente con la Costanera Norte, junto con la Fiscalía y también el Ministerio de Transportes”, señaló.
Asimismo, se está a la espera de los resultados de la denuncia que la municipalidad y el MTT presentaron en febrero de este año a Fiscalía por las carreras clandestinas detectadas en enero en la autopista Costanera Norte.
En concreto, esta solicitaba a la Fiscalía que acuda al punto de control de la vía “para respaldar nuestras afirmaciones e identificar los vehículos involucrados”, señalaron desde el municipio en su momento, además de aplicar sanciones de suspensión de la licencia de conducir, multas (desde $130.000 hasta $650.000) y cárcel (41 a 60 días).
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