Depresión, ansiedad y miedo: La psiquis del jugador preocupa de cara al regreso del fútbol chileno

Los psicólogos del fútbol chileno sacan la voz. Levantan la mano para dejar en claro su preocupación por la cabeza de los futbolistas, pensando en un retorno que cada vez está más cerca, aunque todavía sin una fecha clara. Ya lo hicieron los preparadores físicos, en un documento que terminó enfrentando al gremio. Ahora fue el turno de otros especialistas.

Es que los profesionales de las salud mental asumen que no todo es entrenamiento físico y sesiones de táctica. Los más de 100 días de interrupción del Torneo Nacional producto de la pandemia podrían generar una serie de enfermedades tales como la depresión o ansiedad, que podrían entorpecer el retorno que se avecina.

Quince psicológos de diferentes elencos del fútbol chileno, entre ellos Colo Colo, la U y la UC, diseñaron una propuesta para el retorno del fútbol competitivo. La ANFP, este viernes, en un formato Power Point que contiene 15 diapositivas, ya lo distribuyó a los 33 equipos profesionales.

En el documento, los profesionales dejan en claro que buscan ofrecer recomendaciones para contribuir a proteger la salud mental en el proceso de reintegro a la actividad. Se basan en una revisión bibliográfica y el análisis de una encuesta que realizaron a 656 jugadores del fútbol profesional chileno de Primera, Primera B y Segunda División.

La propuesta de los profesionales de la salud comienza dando números alarmantes: un estudio realizado por FIFPRO (Federación Internacional de Futbolistas Profesionales) y las Facultades de Medicina de Ámsterdam, entre el 22 de marzo y el 14 de abril, en la que se encuestó a 1.602 futbolistas profesionales de países que han implementado medidas drásticas para contener la propagación del coronavirus, donde participaron 1.134 hombres (con una edad media de 26 años) y 468 mujeres (con una edad media de 23 años) detectó que el 22% de las mujeres futbolistas y el 13% de los hombres futbolistas presentaron síntomas correspondientes a un diagnóstico por depresión. El 18% de las mujeres y el 16% de los hombres, informaron de síntomas correspondientes a un diagnóstico de ansiedad generalizada.

Los psicólogos estudiaron diferentes documentos. En la revisión bibliográfica se analizaron estudios relacionados a la cuarentena de los jugadores. En esta queda establecido que los futbolistas pierden la confianza en sus propias capacidades. Además aumenta la incertidumbre en relación a las posibles lesiones deportivas que podrían marcar el retorno a la competencia.

En relación a las encuestas que se realizaron en el medio local, se determinó que se debe aprovechar como factor potenciador la buena relación que tienen los jugadores con sus familias, como también el interés de estos mismos en regresar a las prácticas. Dentro de los factores a mejorar aparece la necesidad de crear estrategias para el manejo de la ansiedad e incertidumbre sobre el futuro profesional, brindar las condiciones para el manejo seguro de las etapas de regreso a la competencia y la importancia de dar claridad en fechas y plazos relacionadas al retorno de la actividad. También se hace urgente la idea de diseñar trabajos para evitar potenciales lesiones.

Las recomendaciones del grupo de psicólogos apunta a diferentes fases. Siempre el futbolista aparece como el actor principal, en sus diferentes roles que puede llegar a cumplir dentro de la actividad.

En las diapositivas se recalca la importancia de que el futbolista debe ser capaz de sentir la posibilidad real de aprovechar el tiempo para encontrar una versión mejorada de sí mismo. También los invita a plantearse nuevas metas, en su casa, siempre mirando al futuro. Busca que sean capaces de organizar su tiempo para jugar, conversar y dialogar con sus hijos y parejas. Otra de las motivaciones es que sean capaces de generar una lista de las cosas importantes que han realizado en su hogar. Los invita a estudiar, a aprovechar el tiempo, a organizar su semana para no tener momentos de incertidumbre..

Otro de los tópicos que aborda es la sicoeducación. En este capítulo, los psicólogos buscan que los futbolistas chilenos sean capaces de seguir las pautas de trabajo de sus clubes. Invitan a que se informen por los canales de la institución para evitar la incertidumbre. Hablar con sus compañeros, conocer sus emociones y seguir al pie de la letra los protocolos exigidos en lo que marcará la operación retorno. Asumir también el castigo que pueden recibir en caso de no cumplir lo establecido en el documento.

Para evitar lesiones y estrés recomiendan que los futbolistas consideren que los pensamientos son capaces de aumentar o disminuir la tensión muscular. Deben utilizar imágenes pare recrear nuevas condiciones de entrenamiento, como también valorar las horas de sueño y descanso necesarias para recuperarse. Elongar de manera relajada, inhalando y exhalando. Si sienten alguna molestia se la deben informar al cuerpo técnico o médico de cada institución.

Finalmente, el documento resalta la importancia de la identidad deportiva. El jugador debe ser capaz de reconocer sus emociones y utilizarlas en su favor para poder establecer un plan personal para optimizar sus capacidades. Deben pensar en lo que representan para su institución, mientras se asume que superar las adversidades les permitirá volver aún más fuertes a la competencia. No aislarse, trabajar de la mano del cuerpo técnico y sus compañeros.