Diputados sacrificarían un sábado por reforma de pensiones: el plan B de la Cámara para bypasear negativa de republicanos

Nuevamente la bancada de diputados del Partido Republicano no dio la unanimidad para suspender la semana distrital (trabajo en terreno), agendada para los últimos días de enero, en los que no está previsto que haya sesiones legislativas.

El tema se abordó en la reunión de comités de diputados este miércoles, pero la negativa se mantuvo.

Ante el inminente acuerdo que podría alcanzar el gobierno con senadores de Chile Vamos en torno a la reforma de pensiones -que se votaría la próxima semana en la sala del Senado-, la Cámara recién estaría en condiciones de discutir el proyecto previsional la última semana enero, lo cual -del punto de vista de reglamentario- solo podría ocurrir si los republicanos dan la unanimidad para alterar el calendario y poder sesionar.

Sin embargo, la mesa de la Cámara, presidida por Karol Cariola (PC) e integrada por los vicepresidentes Eric Aedo (DC) y Gaspar Rivas (indep.), tiene un plan B. Mediante la facultad reglamentaria de la mesa, se podría convocar a sesiones el jueves 23, viernes 24 e, incluso, el sábado 25 de enero, ya que ello no altera la semana distrital.

Adicionalmente, La Moneda tiene una suerte de “botón atómico”: la facultad contemplada en el artículo 32, número 2, de la Constitución, que señala que es una de las “atribuciones especiales del Presidente de la República... pedir, indicando los motivos, que se cite a sesión a cualquiera de las ramas del Congreso Nacional”.

Esa disposición obligaría a los diputados a sesionar el día que disponga el Presidente Gabriel Boric.

Si bien esta medida es considerada de “ultima ratio”, ya que en la práctica impone el poder del Ejecutivo por sobre la voluntad o el reglamento de la Cámara, al menos contaría con el respaldo del oficialismo y de gran parte de Chile Vamos.

El problema de esta última alternativa es que ello no garantiza una alta concurrencia, pues es probable que en los días finales de enero algunos diputados ya tengan programado el inicio de vacaciones, con reservas y pasajes incluidos. Ello aumenta el riesgo de que las ausencias perjudiquen el quorum necesario para aprobar la reforma de pensiones, ya que varios de sus artículos requieren de mayoría absoluta de los diputados en ejercicio (quorum calificado), es decir 77 votos mínimo.

La ministra del Trabajo, Jeannette Jara (PC), en todo caso, hizo un nuevo llamado a los diputados republicanos. “Se requiere una semana más de tramitación en la Cámara de Diputados y los diputados del Partido Republicano no quieren correr sus vacaciones y, por tanto, el Congreso tendría que cerrar, lo que sería lamentable. Hago un llamado al Partido Republicano para que postergue sus vacaciones, si igual van a tener febrero”, dijo la secretaria de Estado, solicitud que la volvió a repetir este miércoles en la Comisión de Trabajo del Senado, donde señaló que la idea es despachar a ley la reforma de pensiones durante enero.

El ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Álvaro Elizalde (PS), este miércoles también criticó la negativa del partido fundado por José Antonio Kast. “Eso contrasta con lo que ha hecho el Senado, que tiene disposición de sesionar la última semana de enero, y no la Cámara. Pero en el caso de la Cámara es solo porque el Partido Republicano se opone. Se opone a que las diputadas y diputados trabajen hasta fin de mes. Es una pésima señal”, manifestó.