El frustrado quinto retiro, secundarios y los “presos del estallido”: policía activa resguardo de Plaza de Armas y La Moneda ante marchas
Durante la tarde de ayer jueves los jefes policiales de Carabineros se reunieron para analizar los escenarios posibles para esta jornada de viernes. Lo que se ha advertido entre uniformados es la alta participación de menores de edad en las últimas jornadas de protestas, a quienes sindican como secundarios que se adhirieron a grupos más radicales que protagonizan desórdenes y que han encendido las alarmas de las autoridades en los últimos días.
Si bien el viernes pasado fue -en intensidad- menos violento que las otras jornadas asociadas a protestas y desórdenes en Plaza Baquedano, para esta jornada, Carabineros activó una planificación centrada en dos puntos importantes de la capital, además de la denominada “zona cero”: la Plaza de Armas y el perímetro de La Moneda.
La razón radica en una serie de convocatorias para manifestarse en el centro de la capital bajo tres consignas en las redes sociales, según detectó la policía uniformada: el rechazo de la Cámara de Diputados a los dos proyectos de quinto retiro de los fondos provisionales, votado el lunes en el Congreso; el crispado ambiente en la comunidad estudiantil de los secundarios de colegios emblemáticos, como la quema de un bus el lunes en el Internado Nacional Barros Arana (Inba); y las ya infaltables, a estas alturas, demandas por la libertad de los “presos del estallido social”.
Para este viernes, por ejemplo, se espera que un grupo de más de 100 personas llegue hasta la Plaza de Armas para protestar y desplazarse, hasta la Plaza Baquedano. Según la información el motivo es realizar una manifestación por la libertad del ex frentista Raúl Escobar Poblete, también llamado “comandante Emilio”. Éste último se encuentra actualmente preso en espera de su sentencia por el crimen del senador UDI Jaime Guzmán, para luego ser devuelto a México donde debe cumplir una extensa condena por los secuestros cometidos en ese país. Este “mitin” está convocado en paralelo a otros llamados que hay para manifestarse entre Bustamante y Portugal, donde los locales comerciales, como todo viernes, se preparan para resguardar sus bienes ante los ataques de encapuchados.
Por lo mismo, hasta ayer en la tarde, los jefes policiales de Carabineros, que deben desplazarse por la capital, se reunieron para analizar los escenarios posibles para este viernes. Lo que se ha advertido en la policía uniformada, es una alta presencia de escolares en las últimas jornadas de protestas, a quienes sindican como secundarios que se adhirieron a los grupos más radicales que protagonizan los desórdenes por los “presos del estallido social”.
Las tácticas
Como hay manifestaciones anunciadas que comenzarán desde Plaza de Armas, Carabineros desplegará a sus equipos preventivos y de Control de Orden Público (COP), en las inmediaciones de la Catedral y también en el perímetro que abarca La Moneda. Lo que se quiere -según comentaron fuentes que conocieron las planificaciones- es evitar un avance de los manifestantes hasta Palacio, dado que eso dificultaría mucho los desplazamientos en el centro de Santiago.
Además, los policías han detectado una clima de “crispación” en torno a La Moneda, tomando en cuenta dos situaciones en particular: la quema de un vehículo, con un hombre en su interior, durante la mañana del viernes de la semana pasada, y el intento de otra persona de quemarse a lo bonzo en las afueras de Palacio. Este último hecho ocurrió hoy cerca del mediodía, donde Carabineros logró convencer al hombre de no dañarse. Portaba un bidón de bencina.
En paralelo, se dispondrán de distintos piquetes policiales en las cercanías de Plaza Baquedano, pero, tal como ha venido ocurriendo hace cerca de tres semanas, la estrategia estará basada en un despliegue en las intersecciones aledañas a la zona, y no específicamente cerca de las manifestaciones. La idea detrás de este plan -que contó con el visto bueno del Ministerio del Interior- es alejarse de los desórdenes e irrumpir cuando se vea un delito flagrante grave en ejecución.
Otro foco de preocupación constante son los locales comerciales que están emplazados en la zona. Eso, tomando en cuenta los últimos ataques al tradicional restaurante, Antigua Fuente (exFuente Alemana), por lo que ya desde hace un tiempo se dispone de un “teléfono de emergencia” para que el dueño del local, Carlos Siri, llame a Carabineros que están en las inmediaciones para puedan acudir al lugar, en caso de amenazas y ataques.
Por su parte, el gobierno, a través de la Subsecretaría del Interior y la Delegación Presidencial de la RM, estarán siguiendo los desórdenes que se registren en la capital, y así establecer puentes de comunicación con los generales de Carabineros, que estarán a cargo de los procedimiento.
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