Expediente Llaitul: líder de la CAM relata cómo el homicidio de Matías Catrileo provocó un quiebre en la agrupación

La investigación que hasta ahora ha desarrollado el Ministerio Público en torno a Héctor Llaitul -quien fue detenido y formalizado por los delitos de usurpación de tierras, robo de madera y amenazas a las autoridades, en el marco de la Ley de Seguridad del Estado (LSE)-, sirve para ilustrar una serie de elementos de la vida del comunero. De hecho, de las interceptaciones telefónicas que realizaron los peritos, también se puede desprender parte relevante de la orgánica de la agrupación que lidera, la Coordinadora Arauco Malleco (CAM) que opera desde fines de los 90.

En la carpeta hay registro de una serie de alocuciones realizadas por Llaitul referentes a la evolución que ha tenido el grupo armado, y en medio de ello, la figura de Matías Catrileo, joven estudiante asesinado en enero de 2008, aparece como un importante símbolo. A partir de su deceso, de acuerdo con lo expresado por el comunero en distintas oportunidades, la CAM se radicalizó y un serie de miembros optaron por retirarse de las filas.

La primera vez que se refiere a aquello, según consta la carpeta investigativa, fue el 16 de enero de 2020 durante el relanzamiento del libro “Chem Ka Rekiduam” en Santiago. El texto, escrito “colectivamente por la CAM”, recoge los lineamientos políticos e ideológicos de la agrupación, además de testimonios de los mismos integrantes del grupo armado.

“El valor que tiene este texto es que no fue escrito por un historiador, por un especialista o un académico, este libro fue escrito por gente que lucha, gente que luchó y gente que lucha, de hecho en el texto en homenaje a Alex Lemún, a Matías Catrileo, hay mucho del pensamiento que esta gente nos dejó con su contribución”, comenzó su presentación Llaitul, la que se extendió por más de dos horas.

Respecto al asesinato del joven comunero, reconoce que en ese tiempo, “nosotros tuvimos un replanteamiento producto de su caída en combate y se levantaron los ORT (Órganos de Resistencia Territorial), y se empieza a legitimar la lucha por la acción directa, lo que nosotros hablamos con autoridad hoy día del weichan, lo que nosotros hablamos con autoridad de la resistencia mapuche, de recoger el legado de nuestro pueblo de antaño, esa concepción político militar que nos heredaron nuestros futakeche, que hoy día retomamos para situar una lucha por la dignidad y por la reconstrucción de nuestra nación”.

Las ORT son los grupos de sabotajes que se articulan como una acción armada, y los cuales buscan reivindicar como propios territorios en la Macrozona Sur.

El 2018, a 10 años de la muerte de Catrileo, la CAM publicó un video en que hablan Héctor Llaitul y Ramón Llainquileo. Este es otro elemento incluido en la carpeta investigativa y según el análisis de la PDI, Llaitul “al momento de recordar a Matías en entrevista por conmemoración de diez años de la muerte de éste, muestra levemente irritabilidad en su discurso que puede evidenciarse en su lenguaje corporal, refiriéndose más bien al contexto que circundó la muerte de éste que a los elementos más afectivos que podrían haber suscitado su pérdida, haciendo un llamado a recordarlo por sus valores como “weichafe”. A diferencia de lo expresado por Ramón Llanquileo, quien lo acompaña en dicha vocería, dando cuenta este último de una gran afectación emocional, desbordándose en ciertos momentos de su relato”.

El 25 de junio, a las 18.06 horas, Héctor Llaitul recibió una llamada de un estudiante de periodismo -el que no pudo ser identificado por la policía en la escucha telefónica-, pero quien le solicitaba realizar una entrevista, a la cual accedió el líder de la CAM.

En esa entrevista, Llaitul relata cómo conoció a Catrileo, mientras él lideraba los grupos armados de la CAM y el joven comunero era un estudiante universitario. Según el mismo líder de la agrupación, Catrileo estaba muy convencido e involucrado en los procesos de recuperación de tierra a través de la participación en los grupos armados.

Junto con eso, reitera lo que meses antes había señalado: a partir de su muerte comenzó una reflexión en la CAM, agudizando las formas de ataque y creando las ORT, “las que cuentan con mayor preparación militar para no sufrir más muertes como la de Matías”.

Llaitul asegura que a Catrileo lo conoció “en un proceso de recuperación de tierras, en un proceso de control territorial y precisamente yo estaba clandestino en aquella ocasión, no me acuerdo porque caso antes y había unos muchachos jóvenes militantes de la causa mapuche que venían de las universidades y nos estaban acompañando”.

• Estudiante: Aló, Héctor, ¿ahí sí?
• Llaitul: Sí, aquí estamos bien.
• Estudiante: Ya, perfecto, entonces te estaba preguntando ¿Cómo Matías... cuál fue el rol que él cumplió?

Ante esa pregunta, el líder de la CAM señaló que Matías Catrileo “fue que él se involucró de lleno, de hecho, su comportamiento pasó muy rápido de estar no sé po, él fumaba, por ejemplo, él carreteaba, tenía una conducta bien de joven relajado por decirlo así y se empezó a transformar en un militante muy asertivo con toda esta conducta necesaria de transformarse en un “weichafe”, entonces empezó a cambiar hábitos y se puso muy... como que pegó un estirón por decirlo de alguna manera en su condición”.

Y yo creo que si él hubiese...bueno, avanzado en esta vida, <b>sería hoy día uno de los dirigentes máximos de nuestra organización</b> y tal vez del movimiento mapuche”

Héctor Llaitul

Siguiendo la conversación con el estudiante, Llaitul abordó lo que ocurrió al interior de la CAM tras la muerte del comunero. Primero, comienza señalando que la agrupación nunca conoció a la familia de Matías Catrileo, lo que finalmente tendría implicancias tras su asesinato.

“A partir del hecho de la muerte de Matías, hay una división al interior de la CAM, en ese lugar, muy específico, en Lleupeco, de hecho nosotros cuestionamos un poco el grupo que estuvo ahí también participando y que después formaron otra expresión, se apartaron de la CAM”, comenzó señalando Llaitul.

Ante eso, afirmó que el grupo que se separó de la CAM “ellos se quedaron con la familia y se construyó incluso la versión de que nosotros habíamos matado a Matías Catrileo para tener un mártir, fue muy doloroso eso, nosotros no pudimos decir ni hacer nada, eso se giró en torno a un ambiente, a un ámbito muy selecto, muy específico, pero eso circuló y que también nosotros lo habíamos de alguna manera puesto en sacrificio por decirlo de otra forma”.

Finalmente, el líder de la CAM recuerda las veces que Catrileo lo visitó mientras él estaba detenido, lo que hizo que este último se acercara más a su familia. “Matías significó algo muy importante, no solamente para la CAM, sino en lo que respecta a la disposición que hoy día tenemos algunos que seguimos adelante en esta lucha y de la cual no vamos a transar en sus principios, en sus lineamientos centrales”, concluyó Llaitul antes de despedirse del estudiante.