Abuelo chileno los buscaba: La silenciosa operación retorno de los niños en Siria
La desesperada lucha de Patricio González tuvo final feliz. Tras poco más de un mes, desde que viajó a Siria para rescatar a sus nietos por sus propios medios y se hiciera público el caso, el gobierno sueco actuó sigilosamente y evacuó a los siete niños del campamento de Al-Hol, al norte de Siria. La recuperación de los pequeños, dice Juan Carlos Godoy, representante de la familia, sería en Chile.
Hasta ayer, en la cabeza de Patricio González, el escenario era prácticamente el mismo. El mail que recibió por parte de las autoridades suecas el pasado 18 de abril, donde le aseguraban estar trabajando intensamente en el caso, no había cambiado nada: sus siete nietos seguían allí, indefensos, sin los tratamientos adecuados, en el campamento Al-Hol. Sentía que, pese a las buenas intenciones y a los mensajes, no estaban dándole la importancia que requería una emergencia de este tipo.
Incluso, cerca del mediodía, González en su perfil de Facebook presentó un pequeño sitio web, Save-my-grandchildren, donde resumía la situación que vivían los niños y, también, permitía a los visitantes escribirles a Margot Wallström, ministra de Asuntos Exteriores de Suecia, y a Helena Wahlström, del Departamento de Asuntos Consulares, exigiendo una solución inmediata.
Todo cambió drásticamente la mañana de este martes. A primera hora, Juan Carlos Godoy, amigo y representante de la familia en Chile, recibió la inesperada noticia vía WhatsApp: desde la prensa sueca le informaban que los niños finalmente estaban siendo rescatados. Rápidamente se comunicó con Patricio.
—La operación fue absolutamente secreta, no se le entregó información a nadie, ni de la familia, a ningún periodista, nada. Solo entendía esto Cancillería chilena y Cancillería sueca —dice Godoy—. Al abuelo, de hecho, aún no le informan mucho, él está tratando de recabar la información con el consulado sueco.
Lo que sí les confirmaron es que los niños fueron evacuados del campamento, en el que se encontraban desde la muerte de sus padres, Amanda González y Michael Skråmo. La televisión sueca transmitió en vivo el proceso y, en las imágenes, pudieron apreciar a los siete pequeños, saliendo en una van, con camino a Irak.
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Captura: TV4[/caption]
—Se veían felices, contentos, en las fotografías levantaban los brazos de felicidad —cuenta Godoy—. Patricio está muy feliz, ahora a full, con la misión diplomática sueca en Irak, viendo todos los detalles.
Finalmente los niños llegaron a Erbil, ciudad iraquí cercana a la frontera con Siria, donde estaba Patricio, cerca de las 21 horas de Irak. El abuelo confirmó el reencuentro a su familia.
También lo confirmaron desde el Ministerio de Asuntos Exteriores. "Nuestro objetivo ahora es ayudar a los niños de la mejor manera posible", dijo Buster Mirow Emitslöf, responsable de prensa a SVT, de Suecia.
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Captura: TV4[/caption]
Desde Cancillería, informaron que Chile, a través del embajador Hernán Bascuñán, se mantiene en permanente contacto por el caso de los pequeños y que están al tanto de la operación, pero que se referirán solo cuando el gobierno sueco emita la información oficial.
Godoy, al respecto, explica que el proceso no se podría haber realizado sin la ayuda chilena:
—Fue importante el apoyo logístico, porque Suecia no tiene misión diplomática en Siria. Fue una operación secreta durante todo este mes, pero en la que Chile tuvo una participación importante —dice—. Patricio está muy agradecido. De hecho, el proceso de recuperación de los niños yo creo que se va a hacer acá en Chile, eso es lo que estamos evaluando con la familia, debido al nivel de estigmatización que hay en Suecia por ser hijos de terroristas.
*Esta nota fue actualizada a las 16:30.
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