¿Por qué midió seis metros de largo la mesa que separó a Putin y Macron en el Kremlin?
El mandatario francés se habría negado a que se le hiciera un PCR en el aeropuerto de Moscú, por lo que tuvo que seguir los protocolos locales del coronavirus: sin apretón de manos y sentado en el extremo de una interminable mesa para guardar la distancia social con su par ruso.
La imagen que mostraba al Presidente ruso, Vladimir Putin, sentado en un extremo de una mesa de seis metros mientras que en el otro lado se encontraba su par francés, Emmanuel Macron, durante el encuentro que sostuvieron el lunes en el kremlin, provocó no solo las burlas en las redes sociales, sino que también las críticas por la situación.
Incluso la foto difundida del encuentro generó comparaciones con la distancia mantenida en otros encuentros con dignatarios extranjeros, como el mandatario argentino Alberto Fernández y el Presidente de Kazajistán, Kassym-Jomart Tokayev.
Es por eso que Moscú aclaró hoy que el mandatario francés mantuvo una distancia llamativa con su homólogo ruso, en su encuentro sobre la crisis en Ucrania, debido a que Macron se negó a someterse a una prueba de Covid-19 en el Kremlin.
Macron buscaba evitar que la acumulación militar rusa masiva de más de 100,000 soldados diera paso a una guerra y mitigar las quejas de seguridad de Rusia, que incluyen demandas de que Ucrania y Georgia no puedan convertirse en miembros de la OTAN y que la alianza retire tropas en Europa del Este.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, indicó que la decisión de utilizar este mobiliario se debió a que el líder francés se negó a someterse a una prueba PCR en la presidencia rusa. “Las conversaciones con algunos se llevan a cabo en una mesa larga, la distancia (de la mesa) es de cerca de seis metros”, declaró el portavoz, respondiendo la pregunta de un periodista.
“Esto se debe a que algunos siguen sus propias reglas, no cooperan con el anfitrión”, indicó el funcionario, señalando que en estos casos se impone un protocolo sanitario adicional para proteger al Presidente ruso y a sus invitados.
El portavoz negó un trasfondo político. “Esto no es política y no interfiere de ninguna manera en las negociaciones”, afirmó Peskov.
La presidencia francesa justificó que las condiciones protocolares para un encuentro entre los dos jefes de Estado con un distanciamiento menor, con un contacto que incluyera un apretón de manos y una mesa más pequeña, no les pareció ni aceptable ni compatible con las limitaciones de la agenda. “Elegimos la otra opción propuesta por el protocolo ruso”, explicó el entorno del Presidente francés, que llegó a Moscú para entrevistarse con Putin a media tarde del lunes.
Un portavoz de Palacio del Elíseo explicó que la parte francesa “juzgó que las condiciones que permitían una distancia más corta (entre los presidentes durante sus conversaciones) no eran aceptables para nosotros y elegimos la otra opción propuesta por el protocolo ruso (sobre el Covid-19). Eso es todo”.
“El presidente, por supuesto, siempre ha hecho lo que tiene que hacer cuando viaja”, dijo el vocero. “La pregunta solo se basa en las condiciones de la prueba”.
Sin embargo, la periodista Isabelle Lasserre del diario Le Figaro -que dio a conocer esta información el jueves- señaló que Macron se negó a que le hicieran un PCR en el aeropuerto de Moscú. El mandatario ya se practicado un examen previo a su viaje a Rusia. Este nuevo test lo habría obligado a esperar dos horas el resultado y así cambiar el protocolo, lo que era una situación complicada.
La periodista señaló que tanto el examen como el resultado habrían sido realizados por un médico ruso y se habrían quedado en el país, al igual que la información médica del Presidente francés. Al ser consultado sobre si Macron no quería que Rusia tuviera acceso a su ADN, el portavoz francés dijo que “no merecía lanzarse a fantasías particulares”.
Si bien se negó a proporcionar detalles de las condiciones de la prueba, el portavoz dijo que había preocupaciones sobre quién haría la prueba, cómo se tomarían las pruebas y sus horarios.
“El Presidente tiene médicos que definen con él las reglas que son aceptables o no en términos de los protocolos de salud relacionados con él. Punto”, agregó el portavoz del Elíseo.
En sus encuentros de este año, Putin recibió al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, y al Presidente iraní, Ebrahim Raisi, países aliados de Rusia, en la gran mesa blanca del Kremlin. En cambio, el Presidente argentino, Alberto Fernández, y el mandatario de Kazajistán, Kassym-Jomart Tokayev, se sentaron cerca del mandatario ruso.
En ese sentido, Lasserre explicó que el Presidente kazajo, que acató estas reglas, fue recibido en una pequeña mesa y con saludo de manos. Y si bien Orbán también aceptó, alguien de su equipo dio positivo por lo que fue llevado a la mesa grande.
El encuentro entre Putin y Macron se desarrolló en un clima tenso durante más de cinco horas. Para empezar, el mandatario francés no fue recibido por ninguna autoridad rusa a su llegada al aeropuerto de Moscú, aparte del mal tiempo, destacó el diario español La Razón.
Sin embargo, ambos líderes, más tarde, se trasladaron a un comedor para cenar donde les esperaba un menú lujoso de siete platos: cigalas (langostas), esturión, carne de reno, sopa de pescado y raviolis rellenos con espinacas, además de vino y varios postres, asegura el periódico.
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