SEIA: Monto de inversión aprobada cae a su menor nivel desde 2013, pero ingresos se duplican en último año

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Entre el 1 de enero y el 28 de marzo de 2018 ingresaron a tramitación ambiental iniciativas por un monto total de US$3.205 millones. Mientras en igual periodo del año en curso, la cifra se disparó a US$7.351 millones.


La inversión ambiental aprobada por el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) sigue sin despegar. Entre el 1 de enero y el 28 marzo del presente año  se han aprobado proyectos de inversión por US$3.609 millones, siendo el monto más bajo en los últimos seis años, según la plataforma del servicio. Ello si se considera que durante 2013 hubo una Reforma al Reglamento del SEIA y, por lo tanto, solo son comparables las cifras de hoy hasta dicho año.

Pero la ralentización de la economía no sólo se refleja en la caída de la inversión aprobada. Si en el primer trimestre de 2018 los proyectos que recibieron una RCA favorable sumaron 104, en lo que va del año 91 iniciativas contaron con el beneplácito de la autoridad ambiental.

La ampliación de una planta de litio de SQM Sala junto al Plan Integral de Sondajes de Codelco fueron los proyectos aprobados más cuantiosos durante el primer trimestre.

En contrapartida, el monto de proyectos de inversión ingresados durante el último año se duplicó. Entre el 1 de enero y el 28 de marzo de 2018 ingresaron a tramitación ambiental iniciativas por un monto total de US$3.205 millones. Mientras en igual periodo del año en curso, la cifra se disparó a US$7.351 millones. Se trata del monto más alto en los últimos tres años.

Entre los grandes proyectos ingresados a evaluación durante los primeros tres meses del años se cuenta el desarrollo de la infraestructura y capacidad productiva de la Compañía Minera Doña Inés de Collahuasi SCM (US$3.200 millones). Le siguen: SQM y Arauco Generación con iniciativas por US$350 millones y US$250 millones, respectivamente.

Sin embargo, en la industria sostienen que un ejemplo emblemático de las dificultades es la evaluación del proyecto de Minera Delfín, vinculado a Büchi, Petermann y Segura. El proyecto acumuló seis años en sin obtener su visado final en el SEIA y el directorio decidió poner fin a la iniciativa debido a los temores a una posterior judicialización ante el férreo rechazo que manifestó de la Comunidad de Peine.

Jaime Solari, gerente general de la agencia ambiental SGA, sostuvo que "no se ve que exista un clima que esté favorable para la aprobación de inversiones". "El tema de los permisos sigue siendo una cuestión traumática. El mundo ve que la evaluación del proyecto es una valla importante a saldar. La evaluación de proyectos está demorando cada vez más. En el fondo te dicen gastemos plata en los permisos, pero la inversión real se va posponiendo hasta que salen justamente los permisos".

Más tajante en su análisis se mostró el ex Superintendente de Medio Ambiente, Cristián Franz. "Los diagnósticos están bastante claros y consensuados, pero a la hora de solucionar los problemas, las gestiones se traban, por distintas razones. Chile no avanza en ese sentido, porque los estatutos jurídicos cambian de un gobierno para otro y aquello que es objeto de un consenso después queda postergado", comentó.

"Todavía no se resuelve cuál será el régimen con el cual se evaluarán los proyectos. Es muy distinto que un proyecto entre con consulta indígena a que lo haga sin ella. Hay una serie de incertidumbre que no han sido despejadas y la agenda política, pública y legislativa ha sido irresponsable en esta materia. El mundo técnico tiene claras las modificaciones al SEIA, pero el mundo político se pierde en discusiones y no hacen su pega, en otras palabras. Eso sí que desincentiva inversiones", remató Franz.

Visiones contrapuestas

Para el abogado Mario Galindo, socio de VGC, el bajo monto de proyectos de inversión aprobados da cuenta de los ripios que siempre se le han cuestionado al SEIA, como demoras. "El problema en la aprobación de proyectos es que muchas veces existe una excesiva demora que está asociada a que no siempre existe una unificación de criterios en los distintos actores del SEIA, siempre ha sido ese el problema.

"Mucha gente lo atribuye a que los titulares presentan en general proyectos a los que les falta información, pero no creo que sea eso efectivo. Me da la impresión que son elementos que tienen que ver con la falta de unificación de criterios y repetición de preguntas que no siempre son relevantes para la evaluación del proyecto", añadió el experto en litigación de proyectos.

Mientras, Pablo Badenier, ex ministro de Medio Ambiente del gobierno de Michelle Bachelet, va más allá: "Mi tesis es que hay problema de stock de proyectos en el SEIA. Todos los proyectos aprobados en 2018, que es una cantidad grande e importante, se presentaron antes del año 2017". "Si se analiza los proyectos presentados el 2018, son proyectos que representan montos de inversión menor a lo menos en un 40% presentado en los años anteriores. Por lo tanto, el año 2019 o 2020, vamos a tener pocos proyectos grandes que se estén implementando", complementó.

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