Comisión Experta ratifica umbral de 5% para que partidos accedan a escaños del Congreso
El órgano de 24 comisionados ya lleva cinco de 14 capítulos despachados. Esta jornada visó las cláusulas que le darán forma al sistema político y que pretenden combatir la fragmentación política y mejorar la relación entre el Ejecutivo y el Legislativo.
Un umbral adicional para que los partidos accedan a escaños en el Congreso, normas para combatir a los parlamentarios díscolos, multas para los diputados o senadores que no cumplan las urgencias legislativas y una agenda prioritaria para que el Presidente pueda aprobar sus proyectos de ley. Eso es, en parte, lo que aprobó el pleno de la Comisión Experta este viernes.
Al someter a votación el cuarto capítulo sobre el Congreso, el órgano de expertos se adentró en el corazón de los artículos que regularán el futuro sistema político, lo que algunos constitucionalistas llaman “la sala de máquinas” de este texto.
La norma más emblemática es el umbral electoral -pensado para combatir la fragmentación política- con el cual los partidos podrán acceder a los escaños luego de las elecciones parlamentarias. La norma exige lograr al menos el 5% de los votos válidamente emitidos a nivel nacional en la elección parlamentaria o sumar como mínimo ocho parlamentarios en el Congreso.
Pese a que la DC no apoyaba la norma y promovió sin éxito una enmienda que buscaba que los partidos que no lograban el 5% pudieran federarse, en el pleno sus dos comisionadas -Paz Anastasiadis y Alejandra Krauss- votaron a favor. De esta manera, el umbral tuvo 23 apoyos y la única abstención fue de la comisionada Magaly Fuenzalida (FRVS).
Los partidos oficialistas que podrían verse afectados -como el PR, DC, PL, FVRS- hicieron gestiones con los comisionados e incluso con La Moneda. Sin embargo, su arremetida llegó tarde. Sólo lograron un artículo transitorio para que la primera aplicación en la parlamentaria de 2025 sea más suave y el requisito baje a 4% o cuatro parlamentarios.
Uno de los defensores más duros fue el comisionado Gabriel Osorio (PS), quien calificó el umbral como “valioso” y dijo que no se pretende instalar “un monopolio político”, sino que consolidar “los disgregados grupos en organizaciones más coherentes y estructuradas que servirán de útiles interlocutores para el diálogo y la negociación política”.
La voz más crítica llegó por parte de Fuenzalida. “La cuota fijada en un 5% a nivel nacional resulta un guarismo excesivo”, expuso la representante de la FRVS.
Por parte de la derecha, Natalia González (Ind.-UDI) sostuvo que “la instalación del umbral, tan polémico por estos días, contribuye a la gobernabilidad, a crear partidos fuertes, con alta representación en la ciudadanía”.
Sin paridad permanente
Si bien el oficialismo quería tener una norma permanente para garantizar la paridad 50%-50% en el Congreso, ello quedó fuera del acuerdo. En cambio, ambas fuerzas políticas negociaron una norma transitoria atenuada. “Dentro del año siguiente a la entrada en vigencia de esta Constitución, será ingresado sea por mensaje o moción al Congreso un proyecto de ley electoral que deberá disponer un mecanismo” de paridad. Esa ley debe tener una distribución de sexos de 60%-40%.
La cláusula, además, tiene fecha de vencimiento: “Cesará tras las dos elecciones parlamentarias siguientes a la entrada en vigencia de la ley electoral a que hace referencia en este artículo, o bien, si antes del referido plazo en una misma elección parlamentaria, de no haber mediado su aplicación, fuere lograda la proporción en sus respectivos resultados electorales”.
La norma contó con 20 votos a favor y cuatro en contra: las comisionadas Horst, González, Marcela Peredo (Ind.-RN) y Carlos Frontaura (Ind.-Rep).
Sin escaños indígenas
El oficialismo tampoco logró incorporar escaños reservados para pueblos indígenas. Solo consiguió una norma genérica: “La ley podrá establecer mecanismos para promover la participación política de los pueblos indígenas en el Congreso Nacional”.
La norma tuvo 19 votos a favor, tres en contra y dos abstenciones, de Horst, González y Frontaura. En tanto los comisionados UDI Hernán Larraín y Máximo Pavez se abstuvieron.
Otra norma que visó el pleno fue la que establece que durante su cuenta pública, el Presidente podrá escoger hasta tres proyectos de ley como agenda legislativa prioritaria. Estos deben tramitarse en un año. Si el Congreso no cumple, “se pondrán en votación en la sala en su última versión aprobada”. También se les dio luz verde a los artículos que pretenden combatir a los parlamentarios díscolos: si renuncian al partido o son expulsados de la colectividad, perderán el escaño.
Asimismo, la Comisión Experta, con la intención de colaborar a la creación de gobiernos de mayorías, trasladó la elección parlamentaria a la segunda vuelta presidencial.
El pleno, además, visó el quinto capítulo sobre gobierno y administración del Estado, donde radican normas sobre las Fuerzas Armadas y de orden, así como el artículo que dice que una persona podrá llegar, como máximo, dos veces a la Presidencia de la República.
La recta final de la Comisión Experta partió el martes y, hasta el momento, él órgano ya tiene despachado el capítulo I sobre fundamentos del orden constitucional, el capítulo II sobre derechos y libertades fundamentales y el capítulo III sobre representación política y participación.
La comisión seguirá sesionando en pleno este sábado y la próxima semana hasta terminar de aprobar el resto de los acápites. Todo para cerrar el anteproyecto el 6 de junio y entregárselo al Consejo Constitucional el miércoles 7 de junio.
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