No había pasado una hora desde que se conocieron los resultados de la segunda vuelta de 2017 cuando el abanderado de la centroizquierda Alejandro Guillier reconoció su derrota y se trasladó desde su comando al Hotel Crowne Plaza. Ahí lo esperaba el Presidente electo, Sebastián Piñera, para recibir su saludo.

La posibilidad de que una escena así se repita este domingo entre Gabriel Boric (Apruebo Dignidad) y José Antonio Kast (Frente Social Cristiano) no está clara. Pese a que el hito se ha vuelto tradición en las últimas décadas, una campaña tensa y polarizada entre ambos proyectos de país instaló dudas sobre los gestos protocolares a los que estarían dispuestos los candidatos.

Es ante ese escenario de máxima incertidumbre que los comandos de ambos abanderados han activado gestiones para coordinar gestos el día de la elección, cualquiera sea el escenario. Sin embargo, en las últimas horas el debate se ha tensionado.

“La campaña ha sido con mentiras por delante, y eso hace difícil mantener las tradiciones”, sostuvo ayer el jefe político del comando del frenteamplista, Giorgio Jackson.

Si habrá foto o no, en todo caso, no es el único hito protocolar que está en duda. El tradicional desayuno al que el Presidente electo invita al Mandatario en ejercicio en su residencia tampoco es una decisión tomada en el comando de Gabriel Boric. De hecho, señalan que se ve complejo un gesto de esa naturaleza, porque podría incomodar a sus votantes y también respaldos que fueron clave durante la campaña de segunda vuelta de Boric, como las víctimas de trauma ocular: Gustavo Gatica y la senadora electa Fabiola Campillai.

“Con un llamado bastará”, dicen en el entorno del abanderado presidencial.

Por el contrario, en el caso de que sea Kast quien gane el balotaje, en su círculo dicen que mantendrá la tradición del desayuno con el Presidente y que, de hecho, dentro de las conversaciones que ha tenido su equipo con La Moneda eso ya se ha abordado. Si bien no es el escenario que más les acomoda -debido a que se han declarado como de oposición al segundo mandato de Piñera-, sostienen que lo harán probablemente en la casa de Kast, ubicada en Paine.

En ese sentido, lo que sí está claro es que esa noche quien sea el ganador se comunicará con el Presidente Piñera, llamada que, aseguran en La Moneda, ya fue coordinada con ambos comandos. En Palacio sostienen que esas gestiones las realizó el ministro vocero de gobierno, Jaime Bellolio, con los jefes políticos de ambas candidaturas, Cristián Valenzuela y Giorgio Jackson, además del propio Boric.

Si bien el abanderado republicano ya manifestó públicamente su intención de acudir al comando del frenteamplista -que estará apostado en el Hotel Fundador, en el centro de Santiago-, en caso de que sea el diputado por Magallanes quien se imponga en las urnas, desde Apruebo Dignidad no existe la misma claridad.

La decisión se zanjará en las próximas horas, probablemente en la reunión que sostendrán los dirigentes del pacto este sábado. Sin embargo, ya hay opiniones divididas en los equipos del frenteamplista.

Desde la plana mayor del comando con sede en Avenida Italia aseguran que parece improbable que, en caso de perder, el diputado por Magallanes asista al comando del republicano, como ha ocurrido en los últimos comicios presidenciales.

“Boric puede ser muy dialogante, pero no es cínico”, señala una fuente de su círculo más estrecho.

En el mismo sentido, en Apruebo Dignidad esperan que Kast no cumpla con su palabra de ir a saludar a su comando en caso de que sea Boric quien triunfe. “Sería una provocación para los nuestros”, sostienen.

No obstante, en otros sectores de Apruebo Dignidad señalan que sería “difícil” no recibir al republicano y desechar una señal de “unidad” para el país. Según las mismas fuentes, en Apruebo Dignidad entienden que un rechazo a concretar un encuentro entre ambos la noche del domingo podría leerse como una “afrenta” a un porcentaje importante de la población que respalde la alternativa del republicano.

En los últimos días de su campaña, Kast afirmó que no tenía problemas con ser el primero en ir a saludar a Boric directamente a su comando para reconocer un eventual triunfo del legislador. “Uno lo que espera ante el triunfo de uno de los dos es que el perdedor reconozca el triunfo del ganador, que haya un saludo democrático. Es parte de nuestra democracia, de nuestra historia republicana, y hay cosas que uno puede copiar de nuestra historia, son costumbres o tradiciones que son buenas. Eso le da sentido a la ciudadanía y espíritu democrático y republicano”, dice una de las voceras del comando de Kast, Ruth Hurtado.

Eso sí, la mañana del viernes Kast matizó su postura y dijo que el reconocimiento inmediato del triunfo dependerá finalmente si la elección es estrecha o no.

En entrevista con Radio Agricultura fue consultado sobre cuántos votos de diferencia tendría que tener Boric para que le fuera a dar la mano, a lo que el abanderado respondió que debería ser de “un margen de 50 mil”, y que si existen dudas con algunos votos, acudirán a las instancias que corresponda.