Venta de autos nuevos en Chile caerá a su peor registro desde 2009

Una cifra durísima entregó la Asociación Nacional Automotriz de Chile. Según la organización, debido a los efectos de la pandemia y tras un análisis con Forescast Consultores, la venta de vehículos nuevos este año será del orden de las 200 mil unidades de livianos y medianos, lo que significaría un retroceso cercano al 46% en comparación con la temporada pasada (ver cifras primer semestre).

Para encontrar una cifra bajo las 200 mil unidades, hay que remontarse hasta 2009, año en que debido a la crisis subprime las matriculaciones fueron de 172.044 unidades. Antes de eso, el peor registro databa de 2006 (190.639 unidades)

“Durante estos meses nuestro sector ha conseguido sobrellevar la crisis con una gran capacidad de adaptación y flexibilidad en todos los niveles. A pesar de las dificultades, confiamos en que paulatinamente se va dejando atrás la peor cara de la pandemia”, explica Diego Mendoza, secretario general de ANAC, agregando que “la experiencia nos demuestra que la capacidad de recuperación económica del sector es rápida y ya se evidencia un interés creciente en la adquisición de vehículos de trabajo, como comerciales, camionetas y vehículos destinados al transporte de bienes y servicios, que han mantenido niveles de ventas superiores a los segmentos de pasajeros, al no estar confinados durante las cuarentenas”, indicó Diego Mendoza.

En un comunicado enviado por la Anac, se indica que si bien el sector nacional ha sufrido una caída porcentualmente menos profunda que el que han experimentado sus pares en otros mercados, por ejemplo en los europeos, la duración del impacto de la pandemia ha sido más extendida en el tiempo, desde abril del presente.

Ello se demuestra en que las ventas de vehículos nuevos bajaron en aproximadamente 72% en el segundo trimestre del año en el país, mientras que durante los mayores períodos de contagio en Europa éstas se desplomaron por sobre el 90%, pero con un lapso de contracción que no superó los dos meses, frente a los más de tres meses que enfrenta Chile.

En este complejo contexto, la Anac destaca el esfuerzo que ha realizado el sector automotor chileno, “adoptando todas las medidas de seguridad necesarias para resguardar a sus trabajadores, proveedores y clientes; acelerando las modalidades de trabajo remoto, potenciando sus canales de comercio no presenciales de venta y posventa y ayudando a enfrentar las necesidades sanitarias del país, a través de donaciones de insumos médicos, realización de sanitizaciones de espacios públicos y préstamos gratuitos de vehículos, entre otras contribuciones”.

A pesar de que los números son preocupantes, en la Anac confían en que se saldrá pronto de este complejo escenario.

“La experiencia nos demuestra que la capacidad de recuperación económica del sector es rápida y ya se evidencia un interés creciente en la adquisición de vehículos de trabajo, como comerciales, camionetas y vehículos destinados al transporte de bienes y servicios, que han mantenido niveles de ventas superiores a los segmentos de pasajeros, al no estar confinados durante las cuarentenas”, dice Diego Mendoza.

Tal como señala el secretario general de Anac, el segmento comercial ha ido ganando importancia en la primera mitad de 2020 con una participación que podría llegar al 10,0%, mientras que el de camionetas podría alcanzar el 16,8% a fines de 2020.

Por su parte, el mercado de camiones proyecta ventas cercanas a las 9.100 unidades nuevas para este año.

Con respecto a 2021, tanto Anac como la consultora estiman que el sector automotor tendrá una gran capacidad de recuperación, alcanzando ventas del orden de las 300 mil unidades nuevas de vehículos livianos y medianos, superando así esa barrera, como ha ocurrido desde 2016.

Por su parte, para el mercado de camiones se proyectan ventas del orden de 11.600 unidades nuevas para el próximo año.

“Si bien esas proyecciones están sujetas a que se retome la normalidad en el comercio en general, tienen el mérito de permitirnos tener una visión optimista, en el sentido que ratifican que la pandemia será un paréntesis. Largo y difícil, pero un paréntesis al fin, el cual comenzará a remontarse paulatinamente a contar de que terminen las medidas de confinamiento, y que permitiría retomar un ritmo normal durante 2021”, finalizó Mendoza.