75 personas fueron condenadas a pena de muerte en Egipto por homicidios en 2013

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EFE

Esto en el marco de la macrocausa contra 739 personas acusadas de participan en la matanza de 900 manifestantes durante el desalojo de la acampada islamita el 14 de febrero de 2013.


La justicia egipcia anunció hoy las primeras 75 sentencias a muerte en la macrocausa contra 739 personas detenidas en la plaza cairota de Rabaa y sus alrededores en agosto de 2013, donde cerca de 900 islamistas murieron tiroteados por la policía.

El Tribunal Penal de El Cairo anunció las 75 condenas y remitió el fallo al muftí, la máxima autoridad religiosa del país, para que emita una opinión no vinculante y que los abogados de los sentenciados dan por sentado será una mera formalidad en la que se confirmarán las sentencias.

"Esperaremos al día 8 de septiembre, hasta que el muftí tome su decisión, que lo más probable sea la misma, luego apelaremos durante sesenta días desde la pronunciación del fallo", indicó a Efe Mohamed Hasan, abogado de Nabaui Nabaui, uno de los condenados.

Las sentencias fueron leídas ante la mirada de los acusados en la macrocausa sobre el desalojo violento de la acampada islamista de la plaza de Rabaa al Adauiya, en la que se encontraban miles de seguidores del presidente Mohamed Mursi para protestar contra los militares que le desalojaron del poder el 3 de julio de ese año.

Cerca de 900 manifestantes murieron el 14 de agosto de 2013 tiroteados por la Policía cuando trataba de dispersar la protesta, en los hechos más sangrientos ocurridos después del golpe de Estado, de los que el Gobierno acusa a los islamistas.

El juez leyó hoy el veredicto ante los condenados, que golpearon las paredes de la jaula de cristal en protesta por el fallo cuando concluyó la sesión.

A sus familiares no se les permitió entrar al lugar en que se celebró la vista, y aguardaron fuera del recinto reunidos y escuchando con angustia la lista de los nombres de los más de setenta condenados a muerte.

Cuando una mujer terminó de leer la relación de condenados, algunos suspiraron aliviados pero aún tristes por la situación. Otros lloraron silenciosamente.

A Iman Abdelahlim se le saltaron las lágrimas y abrazó a una amiga, que la consolaba después de escuchar el nombre de su marido, Ahmed Muhamed Aref, portavoz del grupo de los Hermanos Musulmanes hasta que fue detenido el 21 de agosto de 2013, una semana después del desalojo de Rabaa.

"Uno no entiende ¿cómo es que la víctima es el acusado y el acusado es la víctima?", dijo a Efe Abdelahlim.

Detalló que se les acusó de "instigar a la violencia, cometer disturbios, matar a miembros del Ejército y Policía y de difundir noticias falsas, aunque de la matanza de Rabaa todos los medios son testigos con sonido e imágenes".

"Todos los que fueron detenidos en la plaza de Rabaa o incluso fuera de la plaza fueron acusados falsamente", aseguró.

"Tanto ellos como nosotros moriremos y el tribunal y la justicia divina será igual para todos y obtendremos nuestros derechos al final, si Dios quiere", agregó.

Según la agencia oficial de noticia, MENA, los condenados fueron sentenciados, entre otros delitos, por participar en una concentración armada, ocupar y sabotear edificios y propiedades públicas y privadas con fines terroristas, asesinato premeditado de ciudadanos y policías e intento de asesinato.

El abogado Mohamed Ashiri Mohamed, letrado de Ozman Saber Mohamed Abdelsadeq, uno de los 664 procesados contra los que aún no se dictó sentencia, señaló a Efe que se prevé que el día 8 de septiembre "confirmen la condena de los 75" y "se pronuncie el fallo para los demás, que será más leve que la condena a muerte".

"Algunos están presos, otros están libres mientras sigue el proceso y otros están fugados", dijo.

Entre los procesados pendientes de sentencia está el fotógrafo Mahmud Abdelshakur abu Zeid, conocido como "Shawkan", galardonado con el premio de libertad de prensa de la Unesco y que fue detenido mientras fotografiaba la matanza.

En opinión de su abogado, Karim Abdelradi, los documentos aportados demuestran la inocencia del fotógrafo, que trabajaba en la zona el día en que se produjo la masacre.

"En el peor de los casos recibiría una condena de cinco años, que es el periodo que estuvo dentro de la prisión, por lo que ya podrá salir después del 14 de agosto", dijo a Efe.

De los 739 acusados, 379 están en prisión provisional, mientras que el resto está en libertad condicional o huidos de la Justicia, según los abogados.

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