Altos funcionarios estadounidenses se reúnen con Zelensky en Kiev

El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, se reunieron con Volodymyr Zelensky en Kiev el domingo, dijo un asesor del presidente ucraniano, en la visita de más alto nivel de funcionarios estadounidenses a Ucrania desde el comienzo de la guerra.

Oleksiy Arestovych, asesor principal de Zelensky, señaló en un video nocturno que los funcionarios estadounidenses se habían reunido con el presidente ucraniano. La reunión, que Estados Unidos no ha confirmado, sigue a viajes similares de líderes de otros países y diplomáticos, mientras Washington y sus aliados intensifican sus esfuerzos para ayudar a Ucrania a defenderse.

Arestovych no proporcionó detalles adicionales sobre la reunión, pero Zelensky manifestó durante una conferencia de prensa el sábado que esperaba discutir la asistencia militar con los funcionarios estadounidenses visitantes, mientras las fuerzas rusas se preparan para una ofensiva en el este de Ucrania.

Los países occidentales han acelerado el suministro de armas a Ucrania, pero Zelensky ha dicho que se necesita más para que las tropas del país, superadas en armamento, puedan repeler a las fuerzas rusas.

La visita del domingo se produjo cuando los cristianos ortodoxos, el grupo religioso más grande de Rusia y Ucrania, celebraron la Pascua dos meses después de la guerra.

António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, había pedido una tregua de cuatro días durante la Semana Santa ortodoxa para permitir la evacuación de civiles de las ciudades de primera línea y la entrega de ayuda humanitaria.

La propuesta de alto el fuego fue rechazada por Moscú, que dijo que era una artimaña para permitir que las Fuerzas Armadas de Ucrania se reagruparan. El primer representante permanente adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyanskiy, dijo en una sesión del Consejo de Seguridad sobre Ucrania la semana pasada que una pausa en las hostilidades daría tiempo a las fuerzas ucranianas para recibir nuevos envíos de drones, misiles guiados antitanque y sistemas portátiles de defensa aérea.

Guterres tiene previsto reunirse con el Presidente ruso, Vladimir Putin, en Moscú esta semana, antes de viajar a Kiev. Zelensky criticó el sábado la decisión de Guterres de visitar Rusia primero. “La guerra está en Ucrania, no hay cuerpos en las calles de Moscú”, dijo.

El domingo, Zelensky, quien es judío, publicó un mensaje de video desde la Catedral de Santa Sofía de Kiev en la plataforma de redes sociales Telegram, diciendo que Ucrania en Semana Santa le pide a “Dios una gran gracia para hacer realidad nuestro gran sueño; este es otro gran día, el día en que la gran paz llegará a Ucrania”.

Después de las rápidas ganancias iniciales de las fuerzas rusas, el conflicto se ha convertido en una guerra agotadora. Rusia está logrando avances cada vez mayores en el sur y el este de Ucrania, donde está concentrando su potencia de fuego, después de retirarse de Kiev y otras regiones del norte.

El Ministerio de Defensa de Rusia afirmó el domingo que había destruido una fábrica de pólvora y explosivos en Pavlohrad, una ciudad cerca del área oriental de Donbás, donde las tropas rusas están enfocando su ofensiva, así como cuatro depósitos de armas en la región de Kharkiv.

El comando operativo del sur de Ucrania dijo el domingo que sus fuerzas habían recuperado ocho asentamientos en la región sureña de Kherson, la mayoría de los cuales están ocupados por Moscú. Los avances rusos en las ciudades de Oleksandrivka, Tavri y Mykolaivka también fueron rechazados por la artillería ucraniana, señaló un comunicado.

No hubo confirmación independiente de los reclamos por ninguna de las partes.

Funcionarios ucranianos advirtieron que Rusia planea realizar un referéndum en mayo sobre el establecimiento de una “República Popular de Kherson”, similar a los pequeños estados de Donetsk y Luhansk en el este, que Moscú creó en 2014. Putin reconoció la independencia de las así llamadas repúblicas populares de Donetsk y Luhansk en vísperas de la guerra en febrero.

Zelensky enfatizó que no se llevarían a cabo más negociaciones con Moscú si el referéndum se realizaba, o si Rusia mataba a más civiles y combatientes del número desconocido que están escondidos en una planta de acero en la ciudad portuaria sureña de Mariupol.

La ciudad ha visto algunos de los combates más duros de la guerra. Zelensky dijo en su discurso nocturno que estaba surgiendo nueva evidencia de que las tropas rusas han matado a decenas de miles de residentes de Mariupol desde el comienzo de la invasión y están tratando de encubrir “rastros de sus crímenes”. También acusó a Rusia de deportar a ucranianos, incluidos niños, a lugares remotos de Rusia.

Mykhailo Podolyak, asesor del presidente de Ucrania, dijo el domingo que Rusia estaba bombardeando la planta siderúrgica de Azovstal con artillería y ataques aéreos y reuniendo fuerzas y equipos para asaltar el último reducto de Ucrania en la ciudad. Pidió una tregua de Pascua, un corredor humanitario para civiles y conversaciones para un intercambio de personal militar.

Un alto comandante militar ruso señaló la semana pasada que Moscú tenía como objetivo controlar todo el sur de Ucrania, desde Mariupol en el este hasta la región de Transnistria en Moldavia, donde dijo que los rusoparlantes sufren discriminación.

Eso aseguraría un corredor terrestre a Crimea, la península ucraniana que Moscú anexó en 2014, y negaría a Ucrania el acceso al mar.

El sábado, dos misiles rusos alcanzaron un activo militar no especificado y dos edificios residenciales en Odesa, matando a ocho personas, incluida una madre y un niño, en el ataque más mortífero dentro de la ciudad desde que comenzó la guerra, según el alcalde de Odesa, Gennadiy Trukhanov.

En un mensaje de Pascua publicado en el sitio web del Kremlin el domingo, Putin agradeció a la Iglesia Ortodoxa Rusa por su asistencia a quienes necesitan atención y apoyo “en nuestro momento difícil”.