Catalanes se manifiestan tras la detención del expresidente Puigdemont

Tras darse a conocer la detención del expresidente catalán, la asociación Asamblea Nacional de Cataluña convocó a sus militantes a convocarse ante la sede de la Comisión Europea en la capital catalana para protagonizar una marcha hasta el consulado alemán.


Los independentistas catalanes preparan varias manifestaciones en Barcelona para el domingo por la tarde poco después de conocerse la detención en Alemania del expresidente regional Carles Puigdemont, acusado de rebelión por la justicia española y objeto de una euroorden.

La influyente asociación Asamblea Nacional de Cataluña convocó a sus militantes a las 17.00 (15.00 GMT) ante la sede de la Comisión Europea en la capital catalana para protagonizar una marcha hasta el consulado alemán.

También los llamados Comités de Defensa de la República, unos grupos autoorganizados más radicales, llamaron a manifestarse a las 16.00 (14.00 GMT)  en las Ramblas de Barcelona y tres horas más tarde ante la delegación del  gobierno español, donde el viernes ya se produjeron choques entre manifestantes  y policía.

Ese día, tras anunciarse el encarcelamiento de cinco líderes separatistas y  las órdenes de detención europea contra otros seis, estos colectivos llamaron a  iniciar un ciclo de movilizaciones al que llaman "primavera catalana" a imagen  de las protestas que surgieron en 2011 en varios países árabes.

https://twitter.com/CDRCatOficial/status/977896834323697664

"Ante esta grave situación tenemos que responder juntos", instaba la cuenta  oficial de Twitter de los CDR llamando a estas protestas bajo el lema "Contra  la represión y hacia la República".

En Girona, la ciudad de Puigdemont, a 100 km al norte de Barcelona, algunas  decenas de independentistas se manifestaron enfrente de la delegación del  gobierno español, según las imágenes difundidas por el CDR de ese municipio en  Twitter.

Los protestantes se subieron al tejado del edificio, retiraron la bandera  de España y pintaron la fachada de amarillo, color que se ha convertido para  los independentistas en un símbolo contra la supuesta represión de Madrid,  informó un portavoz oficial.

Las protestas del viernes, convocadas tras el procesamiento de la cúpula  independentista que impulsó el intento de secesión de octubre, terminaron con  un balance de 37 heridos en Barcelona.

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