Cuba sufre apagón digital temporal en conexión por Internet y telefonía

Cubans check their phones as telephone and internet connections were knocked out in a nationwide failure, in Havana
Cubanos chequean sus celulares tras la interrupción del servicio de Internet y telefonía en la isla. Foto: Reuters

La compañía de telecomunicaciones de la isla, ETECSA, reconoció el corte y dijo que hubo dificultades técnicas que ocasionaron la interrupción temporal de los servicios de mensajería y de voz, así como la conexión internet. Sin embargo, usuarios se quejaron que también se afectó la telefonía celular y residencial, cortándose los enlaces locales e internacionales.


Cuba sufrió este viernes un apagón digital de unas dos horas sin que hasta ahora se sepan las causas.

El servicio de internet y los datos móviles se pararon sobre el mediodía y recién se reinstauró pasadas las dos de la tarde hora local, constató The Associated Press en La Habana.

La compañía de telecomunicaciones de Cuba, ETECSA, reconoció el corte y dijo en una nota leída en el noticiero de la televisión cubana -posteriormente en sus cuentas de redes sociales- que había dificultades técnicas que ocasionaron la interrupción temporal de los servicios de mensajería y de voz, así como la conexión de internet.

No se especificó la causa del apagón y el alcance, aunque algunos usuarios de las provincias se quejaron también.

“No fue solamente el internet. Los celulares no tenían cobertura. Y no funcionaba el nauta hogar (la conexión doméstica)”, dijo en su cuenta de Twitter una persona identificada como @RayArceF3 una vez que el servicio se repuso.

“Tampoco se escucha emisora cubana alguna desde internet. Todas están off”, agregó por su parte en la misma red social Kike Perdomo.

En parte del tiempo que duró el inusual apagón tampoco hubo posibilidad de realizar llamadas internacionales y las locales se cayeron constantemente, constató AP.

ETECSA es el monopolio estatal que presta todos los servicios de telecomunicaciones y los usuarios suelen criticar los precios altos -las tarjetas cuestan el equivalente de dos dólares por cuatro horas- y que el servicio es todavía limitado.

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