La policía arresta a manifestantes antimonárquicos antes de la coronación del rey Carlos

La policía arrestó al líder del grupo antimonárquico Republic horas antes de la coronación del rey Carlos el sábado y a varios otros manifestantes que se habían reunido entre la multitud que bordeaba la ruta de la procesión en el centro de Londres.

Republic había dicho anteriormente que montaría la mayor protesta contra un monarca británico en la historia moderna. Pero el jefe de policía de Londres, Mark Rowley, advirtió el viernes que la policía tomaría medidas si los manifestantes intentaban “obstruir el disfrute y la celebración” de la gente.

Los manifestantes, vestidos con camisetas amarillas para destacar, exigían un jefe de Estado electo y decían que la familia real no tiene cabida en una democracia constitucional moderna y que su mantenimiento es asombrosamente caro.

Un portavoz del grupo dijo que la policía arrestó a su líder Graham Smith el sábado por la mañana. Una foto publicada en Twitter mostraba a Smith sentado en el suelo rodeado de policías.

La policía no confirmó el arresto de Smith, pero dijo que había arrestado a cuatro personas bajo sospecha de causar molestias públicas y tres personas bajo sospecha de poseer artículos para causar daños criminales en lo que llamaron una “operación policial significativa”.

Un oficial en la escena cerca de Trafalgar Square dijo que tres manifestantes republicanos habían sido arrestados por llevar pintura.

Republic dijo que cinco de sus partidarios habían sido arrestados y cientos de sus pancartas confiscadas. Un fotógrafo de Reuters dijo que varios manifestantes de Just Stop Oil también fueron arrestados.

Kevin John, de 57 años, un vendedor de Devon que estaba entre los manifestantes, dijo sobre los arrestos: “Es repugnante y enormemente exagerado”.

“También es enormemente contraproducente por parte de la policía porque todo lo que ha hecho es crear una gran cantidad de publicidad para nosotros. Es completamente loco”.

Algunos manifestantes contra la monarquía habían sostenido carteles que decían “privatícenlos” y “abolir la monarquía, no el derecho a protestar” y “No es mi rey”.

Otros letreros mostraban una imagen de Meghan, la esposa del hijo de Carlos, el príncipe Harry, con las palabras “la princesa del pueblo” y “Dios salve al rey” con una imagen del difunto gran futbolista Pelé.

La mayoría de los manifestantes contra la monarquía se habían congregado el sábado en Trafalgar Square junto a la estatua de bronce del rey Carlos I, quien fue decapitado en 1649, lo que condujo a una república de corta duración.

Aunque eran una minoría en comparación con las decenas de miles reunidas en las calles de Londres para apoyar al rey, las encuestas sugieren que el apoyo a la monarquía está disminuyendo y es más débil entre los jóvenes.

Con el paso de la corona de la reina Isabel a su hijo menos popular, los activistas republicanos esperan que Carlos sea el último monarca británico en ser coronado.

Desde que Carlos se convirtió en rey en septiembre pasado, ha habido protestas en eventos reales. Fue interrumpido en un evento del Día de la Commonwealth en la Abadía de Westminster en marzo y atacado con huevos en York en noviembre.

La muerte de la reina también ha reavivado el debate en otras partes del mundo, como Australia y Jamaica, sobre la necesidad de mantener a Carlos como jefe de Estado.

Si bien muchas otras monarquías europeas han ido y venido, o han disminuido mucho en escala e importancia, la familia real británica se ha mantenido notablemente resistente.

En Gran Bretaña, las encuestas muestran que la mayoría de la población todavía quiere a la familia real, pero existe una tendencia a largo plazo de disminución del apoyo.

Una encuesta realizada por YouGov el mes pasado encontró que el 64% de las personas en Gran Bretaña dijeron que tenían poco o ningún interés en la coronación. Entre los que tenían entre 18 y 24 años, el número que expresaba poco o ningún interés aumentó al 75%.

Más de 11.000 policías patrullan para la coronación, el evento ceremonial más grande organizado en la capital británica en 70 años.