Trump dice que EE.UU. no tiene “ninguna prueba todavía” del presunto envenenamiento de opositor ruso Navalny

Esta tarde el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, descartó que su gobierno tuviera evidencia de que el opositor ruso, Alexei Navalny, haya sido envenenado por un agente neurotóxico del tipo Novichok, como afirmó el gobierno de Alemania hace unos días.

“No sé exactamente qué pasó. Creo que es trágico, es terrible, no debería suceder”, dijo el mandatario en rueda de prensa. “No hemos tenido ninguna prueba todavía”, agregó, al tiempo que prometió que Estados Unidos examinará de manera muy seria este tema.

Previamente, la Casa Blanca se manifestó “muy preocupada” por los resultados de los exámenes médicos hechos por Berlín.

“Estados Unidos está muy preocupado por los resultados anunciados hoy. El envenenamiento de Alexéi Navalni es un acto absolutamente condenable”, escribió el Consejo de Seguridad Nacional de Washington D.C. “Rusia ya ha utilizado en el pasado el agente neurotóxico Novichok”, añadió, al precisar que Estados Unidos trabajará con sus aliados “para que los responsables en Rusia rindan cuentas”.

Merkel dijo tener “pruebas inequívocas” sobre ello y exigió al Kremlin explicaciones “urgentes” sobre el caso.

La Unión Europea respondió en una declaración conjunta donde denunció como un “acto despreciable y cobarde” el supuesto envenenamiento de Navalny.

Por otro lado, un exmiembro de la UE, Reino Unido, también se refirió al hallazgo de Novichok. El ministro de Relaciones Exteriores británico, Dominic Raab, indicó que Moscú “debe decir la verdad” sobre lo ocurrido a Alexéi Navalny.

“El gobierno ruso tiene claramente que dar explicaciones. Debe decir la verdad sobre lo que le ocurrió a Navalny”.

Navalny, que continúa en coma inducido en un recinto asistencial alemán, debió ingresar de urgencia en un hospital de la ciudad rusa de Omsk a finales de agosto. De acuerdo a sus cercanos, el abogado fue envenenado con algo que “bebió” esa mañana.

Conocido por sus duras críticas a Vladimir Putin, el abogado viajaba de Siberia a Moscú en un avión que tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia cuando empezó a sentirse enfermo. “Creemos que Alexei fue envenenado con algo mezclado en su té”, indicó en esa oportunidad su portavoz.