Unión Europea aprueba sanciones a vicepresidentes y otros nueve cargos oficiales en Venezuela
Entre los miembros del gobierno de Maduro están los vicepresidentes Delcy Rodríguez y Tareck el Aissami. La medida se da, ya que, el organismo considera que han "violado derechos humanos y socavado la democracia y el Estado de derecho".
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) aprobaron hoy sancionar a otras once personas con cargos oficiales en Venezuela, entre ellos los vicepresidentes Delcy Rodríguez y Tareck el Aissami, al considerar que han "violado derechos humanos y socavado la democracia y el Estado de derecho".
Estas medidas restrictivas se sumarán así a las impuestas a otra lista de siete altos cargos del Gobierno de Nicolás Maduro y a un embargo de armas y un veto a material que pueda utilizarse para la "represión interna" en Venezuela.
La UE amplía así la lista de responsables del Gobierno de Nicolás Maduro a los que ha impuesto la prohibición de viajar a territorio comunitario y la congelación de los bienes que puedan tener en el organismo.
En total, desde la creación de la lista negra en enero, se han añadido 18 personas.
En esta ocasión, han sido incluidos los vicepresidentes El Aissami, también ministro de Industrias y Producción Nacional, y Rodríguez.
También figuran Sergio José Rivero, inspector general de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana; Jesús Rafael Suárez, comandante general del Ejército Bolivariano; Iván Hernández, jefe de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, o Elías José Jaua Milano, ministro del Poder Popular para la Educación.
Completan la lista Sandra Oblitas, vicepresidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE); Freddy Alirio Bernal, director del Centro Nacional de Mando y Control de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción; Katherine Nayarith Harrington, vicefiscal general; Socorro Elizabeth Hernández, miembro del CNE y la Junta Nacional Electoral, y Xavier Antonio Moreno, secretario general del CNE.
En su reunión de finales de mayo, los ministros ya acordaron tomar nuevas medidas restrictivas "selectivas" y "reversibles" que no perjudicaran al pueblo venezolano en respuesta a las elecciones presidenciales recientemente celebradas en Venezuela, que la UE no consideró "ni libres ni justas".
En su opinión, el proceso electoral no ofreció las garantías necesarias para resultar inclusivo y democrático, por lo que llamaron a celebrar nuevos comicios "de conformidad con las normas democráticas internacionalmente reconocidas y el orden constitucional venezolano".
La UE también reiteró entonces la necesidad de respetar a todas las instituciones democráticamente elegidas, en particular la Asamblea Nacional, liberar a todos los presos políticos y defender los principios democráticos, el Estado de Derecho y los derechos humanos.
Los Veintiocho han dejado claro que sus sanciones van enfocadas a promover "soluciones democráticas capaces de garantizar la estabilidad política del país y que permitan a Venezuela atender a las acuciantes necesidades de la población".
Borrell dice que sancionar a Venezuela "no excluye la voluntad de diálogo"
El ministro español de Exteriores, Josep Borrell, afirmó que la decisión de la Unión Europea (UE) de imponer sanciones a Venezuela "no excluye en ningún caso la voluntad de diálogo" y aseguró que el gobierno pondrá "más énfasis" en "intentar encontrar soluciones políticas".
"El nuevo gobierno español va a poner más si cabe el énfasis en la necesidad de encontrar soluciones políticas a la situación en Venezuela que no se van a resolver únicamente a base de sanciones", afirmó en una rueda de prensa durante el consejo de ministros europeos de Exteriores, que se celebra hoy en Gran Ducado.
En su primer consejo de la UE como ministro, el expresidente del Parlamento Europeo (PE) subrayó que esta decisión responde al hecho de que la Unión Europea considera "negativamente el desarrollo de las pasadas elecciones en el país", que en su momento ya estimó que no eran "ni libres ni justas".
"De momento vamos a ver qué resultado tienen estas decisiones, pero la sanción no excluye en ningún caso la voluntad de diálogo", respondió Borrell a los periodistas preguntado por si considera eficaces este tipo de medidas, que, matizó, "no son multas".
Preguntado por si la UE irá más lejos en las sanciones, el ministro reiteró que irá "más lejos en el diálogo y la cooperación para intentar encontrar soluciones políticas al conflicto".
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.