Confusión marca últimas horas de proceso migrante

Hasta este lunes fue extendido el proceso de regularización extraordinaria de migrantes impulsado por el gobierno, pese a que su término original era hoy. La medida surge ante una normativa que alarga este tipo de iniciativas cuando tienen fecha de término en días no hábiles, como en este caso. Ante ello, el Ministerio del Interior habilitará las sedes de Chile Atiende a nivel nacional, así como las oficinas del Departamento de Extranjería ubicadas en Fanor Velasco, Santiago Centro, y las distintas gobernaciones provinciales del país.

De acuerdo a las últimas estimaciones oficiales cerca de 160 mil personas han participado del trámite.

Sin embargo, las últimas horas de regularización han estado marcadas por el desconocimiento entre los extranjeros. En muchos casos, motivado por la entrega errónea de información desde los funcionarios públicos a cargo del proceso. "No importa que haya ingresado hace poco. Al solicitar la regularización obtiene un año de salvoconducto en el país sin que lo echen. Aparece en el papel que se entrega". Con esta promesa, un funcionario del IPS incentivaba a los extranjeros que se acercaban a la sede de Moneda con Amunátegui, en Santiago Centro, a participar de la regularización, pese a que en su gran mayoría estas personas entraron a Chile después del 8 de abril, fecha límite que el Ejecutivo estableció para quienes quisieran solicitar residencia en el país por esta vía.

"Un joven afuera me dijo que participara, que eso me permitiría permanecer un año en Chile", señaló Brooke Wagner, ciudadana venezolana que entró a Chile en junio recién pasado. Así, los casos se repitieron en una mayoría de las más de 300 personas que habían obtenido el sábado un número para ser atendidos.

"Eso no es así", aseveró el jefe del Departamento de Extranjería y Migración, Álvaro Bellolio, quien desmintió la información y aseveró que cada solicitud de regularización que proviene de una persona que ingresó a Chile tras el 8 de abril es declarada "no admisible".

Eduardo Thayer, expresidente del Consejo Consultivo de Migraciones, dijo que "uno de los principales problemas del proceso ha sido la desinformación. Es insólito que una medida que supuestamente iba a afectar a 300 mil personas se anuncie el mismo día que se implementa sin ninguna campaña ni preparación a los funcionarios".