Defensoría de la Niñez revela aumento de homicidios de menores de edad: 38 niños murieron en 2023 por armas de fuego
De acuerdo al informe elaborado por la entidad, la comuna de Iquique es la que presenta la mayor cantidad de casos del país, con nueve homicidios registrados entre 2021 y 2023, la sigue la comuna de San Bernardo y Renca.
El Observatorio de Derechos de la Defensoría de la Niñez dio a conocer los resultados del análisis de datos del Ministerio de Salud y de la Subsecretaría de Prevención del Delito, los que revelaron que desde 2022 se ha identificado un aumento de los homicidios en menores de edad. De hecho, hasta la última semana del 2023, un total de 38 niños fallecieron producto de lesiones producidas con armas de fuego.
De acuerdo al análisis, en el último año se registró un “aumento de diversos indicadores de violencia hacia la niñez y adolescencia”. En esa línea, se señala que en comparación a 2019, desde 2022 se ha identificado un “aumento de los homicidios, lesiones y violencia sexual a niños, niñas y adolescentes (NNA)” diagnostico que desde la entidad califican como “altamente preocupante”.
Respecto a los homicidios por armas de fuego, el informe destaca un “incremento importante” de estos desde el 2022, año en que se registraron 49 muertes de NNA por ese método.
La Región Metropolitana encabeza la lista de defunciones por esa causa durante el 2023, año en que se registraron 25 defunciones por ese motivo y la sigue la región del Biobío con cuatro homicidios. Sin embargo, desde la entidad señalan que si se analiza la tasa “por cada 100 mil habitantes, la región de Tarapacá es la que tiene una mayor tasa con respecto a su población de todo el país”.
La cifra desglosada en comunas, señala que Iquique es la que presenta la mayor cantidad de casos del país, con nueve homicidios registrados entre 2021 y 2023, la sigue la comuna de San Bernardo y Renca.
Al respecto, el defensor de la Niñez, Anuar Quesille, advirtió que “la violencia hacia los niños, niñas y adolescentes es algo inaceptable y terrible, pero no debemos olvidar que también es algo prevenible”.
“No poner ahí los esfuerzos significa omitir la responsabilidad que tenemos todos los garantes en evitar una afectación grave al derecho de estar protegido contra toda forma de violencia que impactan en la supervivencia y desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes”, remarcó.
Respecto al análisis, el defensor indicó que tiene por finalidad “aportar a la toma de decisiones de las autoridades competentes, para que puedan basarse en un enfoque de derechos humanos de niñez y adolescencia para generar políticas públicas específicas y bien definidas, que reduzcan las desigualdades (…) junto con generar acciones para la prevención y no repetición de vulneraciones de derechos humanos”.
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