Dictan presidio perpetuo calificado contra violador en serie por ataque a dos menores mientras estaba en libertad condicional

Este martes, el Quinto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a Eduardo Marcelo Rodríguez Romero a la pena de presidio perpetuo calificado, en calidad de autor de sustracción y violación de menores contra dos niñas de 13 y 15 años, delito perpetrado mientras se encontraba en libertad condicional.

Según los antecedentes del caso, el sábado 30 de noviembre de 2019 Rodríguez -apodado “El Monín”- se acercó a las menores, quienes estaban haciendo un ensayo de baile en el parque de avenida Tres Poniente de Maipú, y les empezó a hacer varias preguntas, para luego intimidarlas con un arma y llevarlas en contra de sus voluntades hasta una construcción contigua, lugar en que realizó los ataques sexuales.

Después de cometer la violación, Rodríguez obligó a que las menores se lavaran y las dejó en un paradero del Transantiago, donde les advirtió de que no podían moverse por 30 minutos. Además, las amenazó con que mataría a su padres y quemaría sus viviendas en caso de que hablaran lo ocurrido.

En fallo unánime, el tribunal aplicó al acusado las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos por el tiempo de la vida del penado, y la sujeción a la vigilancia de la autoridad por el máximo que establece el Código Penal.

El hombre, al momento del ataque a las adolescentes se encontraba con el beneficio de libertad condicional desde el 12 de diciembre de 2018, luego de haber sido condenado a 10 años en 2013 por violar a una mujer frente de su hijo de dos años, en marzo 2012.

El 12 de octubre de 2020, Rodríguez volvió a cometer el mismo delito, esta vez contra una mujer de 21 años que estaba esperando el transporte público en La Granja. El hombre se acercó a ella para pedirle información, instante en que le dijo que tenía un arma escondida en el bolsillo y que debía obedecerle. Posteriormente, la trasladó a otro lugar para violarla y robarle sus pertenencias. Tras este hecho fue detenido.

Anteriormente, estuvo en prisión preventiva por un robo con fuerza en abril de 2020. Pero al igual que en 2012, salió en libertad. De acuerdo al registro general de condenas, Rodríguez además cometió un robo con fuerza el 20 de agosto de 2001 y un robo con intimidación y con fuerza el 25 de enero de 2002.

Una vez que se ejecute el fallo, el tribunal dispuso a que se proceda a la toma de muestra biológica del sentenciado para determinar su huella genética e incluirlo en el registro nacional de ADN de condenados.